LA GENTE SE ABSTIENE.
(Abordando eso gris, que parece la teoría).
Si analizamos procesos electorales, en distintos lugares del mundo, en eso no hay diferencia en cuanto a los colores políticos de los que gobiernan, hay un fuerte y en aumento número de la abstención.
Los que gobiernan organizan y “entusiasman” a su gente, en esto hay variables, que tiene que ver con los objetivos económicos de cada uno de quienes se postulan, a la vez con el empoderamiento de sectores que en su historia han sido siempre desplazados de los objetivos económicos de bienestar social, como ocurre en Venezuela y Nicaragua, si bien en sus caminos no han sustituido los medios que con la moneda y los impuestos hacen a la diferencia de clase, y eso hace a la burocratización y formas de militarización.
Ahora hay un proceso que por su importancia, merece que se analice: Argentina, si bien todos, Chile por ejemplo, tienen particularidades propias.
Ayer hubo un atentado con “Clarín” con bombas molotov y decimos atentado, pero nadie puede descartar el autoatentado, Argentina al igual que EE.UU. siempre ha sido prodiga en este tipo de conductas.
La derecha –al menos un sector con peso- habla de la necesidad de dolarizar la economía, como hace unos años ocurrió en Ecuador. La noticia cayó como una bomba, y en el rápido repaso que hemos hecho de la prensa internacional a nuestro alcance, hay un asombrado silencio.
Sumemos, dolarización, tratado de libre comercio con China, en otra época ya se hubieran sucedido los golpes de Estado, por otra parte cuando hay consultas electorales un sector que va en aumento se abstiene. La poderosa clase obrera argentina: ¿Cómo se está expresando?, ¿Dónde está parado cada quién?
La Vice Presidente la Dra. Cristina Fernández de Kirchner, se ha pronunciado en que Argentina debe volcarse hacia dentro –puso como ejemplo a Trump- desarrollar su industria, para ello el acuerdo con el FMI es crucial y que estos lo entiendan también.
En el ínterin, ¿Qué pasa?, la gente siente que mientras los oligarcas manejan el dólar para sus mercancías ellos cobran en pesos cada vez más devaluados. En ese marco la situación es insostenible.
Por eso esta propuesta de un sector de derecha de dolarizar, pega tan duro en el gobierno, y también en los sectores vinculados al otrora imperialismo yanqui. Se dice por sus detractores: dolarizar es lo que hizo Cavalo con Menen, un peso, un dólar. Cuando todos saben que dolarizar es que la moneda de giro para oligarcas y proletarios sea la mismas en este caso el dólar, como ocurre en Ecuador y en otros países.
O como planteó Maduro en determinado momento para Venezuela: “si la gente hace valer el dólar para sus transacciones no nos oponemos”.
¿Ahora nuestros economistas que dicen?: porque llegó la hora de hablar de la moneda y de los impuestos, eso que insinuó Mujica en setiembre del 2013, en la ONU, y que luego no lo volviera a hacer como si fuera algo tabú que no se debe tocar.
Lo volvemos a reiterar: hoy la izquierda no entusiasma a la gente porque no tiene programa que no sea aquel diferente a un proyecto para ocupar cargos, cuando lo que hay que plantear es la necesidad de una moneda única y universal y que los impuestos sean sobre la circulación del dinero.
Jorge Aniceto Molinari.
Montevideo, 24 de noviembre de 2021.