Honestamente no sé que es el empate en las luchas sociales.
(Abordando eso gris, que parece la teoría).
Honestamente no sé que es el empate en las luchas sociales. Veamos ejemplos: la crisis bancaria de 1965, dejaba en la calle a miles de bancarios, y liquidaba al gremio bancario. La huelga bancaria impuso que ello no sucediera. En el 2002 la historia volvió repetirse aún con más gravedad, y otra vez la acción del gremio determinó una salida que como en el caso anterior se refrendó con la ley. Siempre en la lucha de clases los trabajadores deben apelar a su fuerza en el seno de la sociedad para lograr las leyes necesarias para una salida. Y abundan los ejemplos en todo el mundo.
Es lo que Marx definía como “dictadura del proletariado” frente a la dictadura de la burguesía.
Luego de la derrota de Lenin en 1924 el concepto de dictadura del proletariado pasó a ser el santo y seña de la construcción con su propia acumulación primitiva –colectivización forzosa entre otras cosas – de un capitalismo de Estado, deformación a la que se le llamó comunismo por conveniencia de los que la ejercían y de la propia burguesía que desviaba el centro del problema.
Cuando se analiza que un modo de producción en la historia no abandona su predominancia hasta agotar todas su posibilidades, se mostraba claramente que el objetivo socialista nunca puede ser construir un Estado alternativo, sino ayudar a que el capitalismo se desarrolle hasta las últimas consecuencias, y que en ello va de suyo el desarrollo de los derechos de todos los trabadores y el programa que haga posible el fin en paz de esa predominancia del modo de producción capitalista y el nacimiento de la predominancia de un nuevo modo de producción.
La democracia es una conquista de la sociedad, pero si no se tiene en cuenta esto, no es más que una abstracción, como nos ocurrió a nosotros cuando la acción de los “servicios” empujó a nuestro pueblo a una de las represiones más sanguinarias de la historia, utilizando para ello a todo el abanico de posiciones y a los organismos en los que tenía organizada su influencia.
Es a partir de esto que fundamentalmente en la izquierda hay que reexaminar conceptos con los que se ha tratado de impedir su desarrollo ideológico, como el del Partido Único, o el del desarrollo estatista de la sociedad.
O cuando se dice: yo discute primero internamente, que implica que el Partido disciplina las ideas, lo cual traiciona todo el pensamiento de los maestros, pues jamás estos hubieran impedido las expresión abierta de las ideas, lo que no implica actuar en lo que son las decisiones administrativas en forma centralizada, como lo es una huelga en el movimiento obrero.
Si queremos hablar de democracia, vamos a hacerlo en serio empezando por la democracia económica que hace que hoy los burgueses tengan paraísos fiscales y que los principales impuestos se apliquen sobre el consumo, los salarios y las pensiones.
Jorge Aniceto Molinari.
Montevideo, 5 de octubre de 2021.