LOS MAESTROS DEJARON EL CAMINO TRAZADO.

LOS MAESTROS DEJARON EL CAMINO TRAZADO.

(Abordando eso gris, que parece la teoría).

Los maestros dejaron el camino trazado. El capitalismo va a agotar sus posibilidades de desarrollo, por eso hoy toman a China gobernada por el Partido Comunista, como el centro del capitalismo y el centro del libre comercio mundial.

Mientras tanto EE.UU., el Reino Unido y la Comunidad Europea, queman sus naves imprimiendo billetes a mansalva sin ningún respaldo, pero atendiendo por ahora las necesidades de su gente y sin que las izquierdas de esos países y del mundo digan nada de lo que esto significa, algo parecido a lo que pasó con los créditos de guerra antes de la primera guerra mundial, una verdadera traición.

El problema que en la izquierda tenemos es que predomina la idea de que para avanzar se necesita de la propiedad estatizada, lo que fue en momentos de desarrollo del capitalismo un punto de apoyo para atender necesidades de salud, enseñanza, vivienda, trabajo, pero hoy es una vía agotada.

Lo que se necesita para los tiempos que se avecinan pero ya presentes es instrumentos para democratizar la economía, poner en manos de la sociedad la misma, y para ello las herramientas son la moneda y los impuestos.

Mujica lo insinuó en la ONU en el 2007, pero luego no volvió a hablar del tema. La moneda debe ser única y universal, no puede haber dólares para los que exportan y pesos para los que laburan en el país. Los impuestos deben ser sobre la circulación del dinero, no sobre el consumo, los salarios y las pensiones. Toda transacción que no esté registrada donde la sociedad democráticamente lo determine no puede ser legal. Hay que dar muerte a los paraísos fiscales.

La zona de libre comercio que hoy comanda China debe extenderse a toda la humanidad, y los planes de desarrollo del aparato productivo atendiendo al desarrollo de toda la humanidad, además de atender la salud, la educación, la vivienda, el trabajo obligatorio de todos, debe atender el medio ambiente, y respetando a todas las nacionalidades en sus características.

Es tan simple que parece de una tremenda estupidez que hoy no se hable en estos términos, más cuando el aparato productivo de la humanidad está ya en condiciones de hacer este cambio pacífico enterrando para siempre la industria de guerra, de guerras alimentadas sobre la base falsa de nacionalismo inconducentes.

Jorge Aniceto Molinari.

Montevideo, 15 de agosto de 2021.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *