DE CHINA LLEGAN NOTICIAS.
(Abordando eso gris, que parece la teoría).
Hay que decirlo, y lo tenemos que decir nosotros, porque el silencio sobre el tema que nos rodea es ensordecedor.
Llegó una partida de una de las vacunas que se producen en China para encarar la lucha contra la corona virus.
Llegan de un país gobernado por el mayor Partido Comunista del mundo que antes de que este llegara al gobierno padecía 4 hambrunas anuales y con el triunfo de la revolución y pasando miles de peripecias está donde está hoy encabezando la zona de libre comercio mayor de la historia y la del propio capitalismo en su etapa en que la crisis de su predominancia comienza a ser irreversible.
Y en contra partida llegan a un país donde el gobierno nos dice que irremediablemente va a aumentar la pobreza.
No faltará –la estupidez humana no tiene límites- alguien que nos dirá: andate a vivir a China.
Y no se trata de eso, se trata de entender que está pasando en el mundo, donde un modo de producción está llegando a su fin, y lo que se impone no es un modelo distinto sino que primero se trata de que la predominancia de este modo de producción muera en paz, para dar paso a el desarrollo desde su nacimiento de un nuevo modo de producción.
Que el gobierno de un Lacalle haya recibido vacunas de China es un avance gigantesco, es el triunfo de las ideas por sobre el negacionismo que si sigue rigiendo en el plano económico donde el gobierno toma el avance de la pobreza como una condena de la naturaleza y no como producto de una política económica que ha llegado a sus límites.
Ahora no es solo responsable lo que llamamos derecha, sino que hay una izquierda que mas allá de reivindicar cargos en materia ideológica no aporta nada, y eso tiene que cambiar. Mujica en la ONU nos ilusionó en que se iba a ese camino pero duró 46 minutos y luego nada.
Recomiendo entonces repasar siempre con sentido crítico el libro rojo de Mao Tse Tung, -aquellos revolucionaras dejaban todo por escrito, hasta en eso eran revolucionarios – porque de esa revolución hoy tenemos esta realidad, que no deja de ser crítica pero que vale la pena analizarla.
Jorge Aniceto Molinari.
Montevideo, 26 de febrero de 2021.