[:es]Batalla cultural, por la solidaridad.[:]

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Batalla cultural, por la solidaridad.

Una nota del compañero Dr. Jorge Bruni.

(Abordando eso gris, que parece la teoría).

La nota y luego nuestro comentario:

1. La Seguridad social está en los primeros planos de la agenda pública. La actual crisis, que es mundial además, lo justifica. Argentina, Brasil, Nicaragua y otros países, son clarísimos ejemplos.

Las primeras reacciones gubernamentales son casi siempre las mismas: subir el monto de los aportes de trabajadores y patronales; eliminar y/o restringir derechos, argumentando que, si se sigue otorgándolos, la Seguridad Social se convertirá en un barril sin fondo. No es un lenguaje muy adecuado ¿no? Obsérvese que no se trata de cualquier beneficio sino de Derechos Humanos Fundamentales como el Trabajo y Seguridad Social, ambos profundamente relacionados, reconocidos por nuestra Constitución y La Declaración Universal de Derechos Humanos de las Naciones Unidas de 1948 en su artículo 22. Es lógico entonces que el Estado tenga la obligación de promoverlos y aplicarlos con visión global y elementales coordinaciones interinstitucionales. ¿Por qué? Muy simple: los Derechos Humanos son integrales, esto es, políticos, sociales, económicos y culturales, que son contenidos profundos para la dignidad y el libre desarrollo de las personas. Por eso cuando se restringen o eliminan los derechos, se está perjudicando a seres humanos en su vida personal y colectiva.

2. En este entorno es lógico que surjan polémicas sobre posibles reformas a la Seguridad Social. ¿Es necesaria o no? Sin duda que resulta imprescindible. Existen grandes desafíos generales mundiales, que ya hemos mencionado en notas anteriores. Nos limitaremos a nombrar sólo dos. En primer lugar al envejecimiento demográfico, recordando que junto con Cuba somos los dos países de la región con mayor envejecimiento. En segundo término, Uruguay no está al margen del proceso de cambios tecnológicos que están ocurriendo. Por supuesto deberá seguir desarrollándose, aplicando nuevos conocimientos y técnicas innovadoras.

3. La reforma del sistema debe ser general. No debería consistir sólo en modificar aspectos parciales, cambios paramétricos, edad de retiro, trabajo a tiempo parcial y aprovechamiento de experiencias laborales, etc., necesarios sin duda pero coordinando con reformas de fondo ineludibles.

Veamos nuestro sistema. Consta de dos pilares. El primero es el SOLIDARIO a cargo del BPS, que responde al objetivo de la redistribución de riqueza con justicia social. El segundo es el INDIVIDUAL a cargo de las sociedades anónimas AFAP, que en sus dos décadas de vigencia han demostrado sus enormes carencias, ayudando a la profundización del individualismo, la desigualdad y la insolidaridad, acorde con la filosofía a la que responde: la del capitalismo financiero, donde la ganancia y el lucro mandan. En las AFAP fundamentalmente, los principios de la S. Social están seria y profundamente afectados. Cabe la pregunta ¿por qué existieron autorizaciones para flexibilizar durante 2007-2008 la dureza de la ley 16713? Y actualmente el tema de los cincuentones ¿qué mensaje nos está dando? ¿Por qué perciben una pasividad menor los afilados a las sociedades anónimas AFAP que los que sólo están registrados en el B.P.S. en el sistema solidario? Es coherente con el sistema. Al Fondo de Ahorro Previsional – F.A.P. que es propiedad de los trabajadores en el sistema individual, y que es de donde sale el dinero para pagar las pasividades, se le realizan deducciones varias: pago de comisiones en general y la de custodia del mantenimiento de fondos en una institución financiera, etc. Además existen varias exoneraciones: las comisiones lo están del IVA, las Sociedades Anónimas AFAP del tributo a su constitución y a los aumentos de capitales; las aseguradoras no pagan el impuesto a los ingresos y por el cobro de primas de seguro de invalidez y fallecimiento, y por supuesto tampoco el IVA. No negamos que puedan ser necesarios dichas herramientas. Pero deducciones del FAP que afectan el monto de la pasividad por una parte, y múltiples exoneraciones que promueven el negocio financiero, el lucro en definitiva de estas sociedades anónimas por otra, nos lleva a la interrogante ¿quién asume los riesgos entonces? Habría mucho más. Por ejemplo no profundizamos en los arts. 8 y 28 de ley 16713, que incentivaron la afiliación a las AFAP a quienes no tenían obligación de hacerlo, etc.

4. ¿Y el futuro? Ya hemos mencionado en notas anteriores y en parte en líneas precedentes de esta nota. La importancia de la Seguridad Social en la sociedad es innegable influyendo profundamente en la vida de sus integrantes. Por supuesto, deberá seguir desarrollándose en todos los aspectos.

Con este panorama ¿por qué cuando se habla de reformas generales necesarias por supuesto, poco se menciona a las AFAP?

En cuanto a la reforma al sistema general y no sólo a aspectos parciales, que por supuesto son necesarios, hay varios conceptos a expresar.

El enfoque no deberá ser sólo económico, reconociendo su importancia obviamente, sino con visión estratégica global, considerando que estamos ante un Derecho Humano fundamental que requiere mirada global y pluralidad institucional. Se trata de un proceso, con sus avances, retrocesos, dificultades, etc. Agreguemos coordinaciones entre objetivos, herramientas y evaluaciones. Y por supuesto algo sustancial: la participación y diálogo con la sociedad, aplicando el rico patrimonio que tenemos en este aspecto, que nos da un amplio prestigio y nos coloca en los primeros planos a nivel regional y mundial.

5. Se trata de una verdadera batalla cultural. Detrás de cada solución que se adopte existen ideologías y políticas que la respaldan, que pueden facilitar o retardar soluciones. Debe transmitirse la solidaridad, contraria a la individualidad que es enormemente negativa, con objetivos financieros, lucrativos perjudiciales para la sociedad y el monto de las pasividades. La Cultura solidaria es un objetivo sustancial para el futuro del país fomentando un desarrollo inclusivo socialmente, porque sólo el crecimiento económico no asegura de por sí la justicia social. Lo contrario nos llevaría a terminar dominados por la insolidaridad, muy bien representada años atrás por la foto de un ex jerarca del BPS metiéndose la mano en el bolsillo mientras decía ¡Hacé la tuya!

Dr. Jorge R. Bruni.

Nuestro comentario:

Compartible y recomendable de acuerdo a nuestra opinión en su totalidad. La nota no lo dice pero nos queda la sensación de insuficiencia, porque lo que está en crisis no es un sistema que demostró en los países en que se aplicó plenamente que operó como un agente de bienestar social, sino la base económica que lo sustentaba.

Existe una acumulación monstruosa de capitales en un mundo gobernado en pugna por los conglomerados empresariales multinacionales, que tienen totalmente acotada su posibilidad de realizar inversiones con rentabilidad, lo que lleva a que se estimule la industria de guerra y las peores lacras en el seno de la sociedad.

Los aportes a la seguridad social, en un sistema basado en un sistema impositivo sobre la base de los impuestos al consumo, al trabajo y a las pensiones, es insostenible. Y esta realidad no vuelve atrás.

No hay forma directa, o por lo menos yo no la tengo de corroborar que los depósitos en el exterior de ciudadanos uruguayos superan los 6.000 millones de dólares que integran de alguna manera y trasladan su intranquilidad millonaria en las desventuras de esa acumulación monstruosa de capitales.

Mujica en la ONU en 2013 insinuó que era necesario el impuesto a las transacciones financieras, pero luego nadie habló del tema. Ahora hablar hoy de aumentar los aportes tradicionales parecería totalmente inviable, pero si no se hace, el sistema en los países que existe –y que son explicación de mejor nivel social– se desfinancia rápidamente.

Ahora no sólo es necesario para el rubro de la seguridad y previsión social (también integrada por el sistema de cuidados) que se establezca una suerte universal de este impuesto, sino que la propia actividad de los organismos sociales para darle actividad a la acumulación de capitales con un fin social necesita que se activen obras que hoy al sistema no le son rentables pero que la humanidad necesita si o si.

No es el fin del trabajo, es el fin de la rentabilidad capitalista en el uso del trabajo humano.

Necesitamos la muerte en paz de este sistema que ha venido predominando, en el transcurrir de sus límites naturales.

Jorge Aniceto Molinari.
Montevideo, 27 de abril de 2018.

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[:es]Los puros; de escritorio (buró).[:]

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Los puros; de escritorio (buró).

(Abordando eso gris, que parece la teoría).

Se busca a los puros y a las puras (mal que le pese a la posición actual de la Real Academia Española), para construir un Partido que asuma la tarea de enfrentar a este modelo de sociedad y construir uno nuevo.

Esta parece ser la consigna que prevalece en los distintos editoriales, y que tienen toda la gama de opiniones (de izquierda a derecha y de derecha a la izquierda) que hoy se desarrollan en el diario vivir con un corolario lógico: cada editorialista considera que el puro es él.

A mí y con el respeto que todos me merecen me parece una reverenda estupidez.

Pienso que para ilustrar este tipo de problemas no hay nada mejor que ir como ejemplo a los intercambios que diariamente se hace, particularmente por las redes sociales. No cito nombres, creo que no es necesario, sino ideas y opiniones que se vuelcan en el debate.

Dí mi opinión a través de esta columna, sobre la prisión del líder del PT, Lula, e hice comentarios a través de las redes a un editorial del Dr. Hoenir Sarthou. Un compañero me acerca su opinión:

«Afirmarse en lo colectivo como tú o en los aspectos contradictorios como Sarthou, son dos aspectos casi hermanos siameses. La solución es hipotética o no existe aún. Porque si bien la izquierda tradicional tiene la manía del justificometro y la receta de Lenin, o Guevara o Bakunin según sea el matiz del ortodoxo justificador nada resuelve el asunto de la corrupción burocrática de nuestros gobiernos. Su ineficacia, desprolijidad, y en algunos casos robos indignantes, son notorios y no deben taparse con la cita del librito de Mayo u otro atemporal y ya ridículo cómo ese gesto. Me temo que no se justifica, y así cayeron los soviéticos. No es cierto que los gobiernos corruptos no duran. Usan al ejército y al terror y la policía política. A revisar la Polonia de Bela Imredy, Venezuela de Maduro, Rusia stalinista y post stalinista. Etc. Etc. Se repite hasta el cansancio el justificometro y la complicidad con la infamia. Te dije que leas «El fin del homo sovieticus» de Svetlana Aleksievich escrito desde la nostalgia y de la gran decepción de una excamarada. Lo estoy leyendo y es un trago amargo pero necesario».

Mi respuesta:

Valoro enormemente que respondas, no es lo que abunda hoy en día.

No comparto tu punto de vista, la pureza en el plano de la política, no existe, pues partimos de una base económica que se establece a partir de la llamada «libre competencia», y ningún modo de producción abandona su predominancia hasta no agotar sus posibilidades, es lo que hoy está ocurriendo con el capitalismo y la crisis actual ya irreversible para que esa predominancia se mantenga. Eso es lo que se traslada a la política hoy.

Lo que si hay son desarrollos ideológicos y en ese plano no es lo mismo Lenin, que Bakunin o Guevara, pues sus posturas son diferentes. La vida viene confirmando a Lenin, no a Bakunin, ni a Guevara, y esto sin perjuicio de reconocer sus valores como seres humanos. De todos modos hay muchos «leninistas» que ni siquiera se han tomado el trabajo de leerlo.

Su respuesta:

«Me expliqué mal o no me entendiste. Lejos de mi modo de pensar el purismo, ni un poco. Lo que me parece muy reiterativo es el «justificómetro» de toda la izquierda en general, hoy Valenti escribe sobre lo mismo, diciéndole al PT. Que aunque Lula no haya comprado pase a la corrupción, luego de 13 años de jodas mezcladas con gobierno importante, no deja de ser responsable por aceptar las reglas de juego de su aliado corruptor (PMDB, etc.) que sirve a la oligarquía brasileña para frenar y empezar a revertir las conquistas populares, papel de tonto que le dicen. Si justificamos esto también a Sendic y al otro malandra de Alur. No entro en esa, no justifico: son responsables. Para mí debería ser expulsado del Fa».

Mi nueva respuesta:

He tratado de aprender, no quiere decir que lo haya logrado, de los maestros. Tomo lo que de acuerdo a mi leal saber y entender es lo más avanzado y partir de ahí me fijo objetivos (tareas), en todos los órdenes de la vida. Desde el vivir en familia, en el trabajo, en el gremio, etc. etc…

Sabiendo además que en la naturaleza los seres vivos y los seres sociales, nacen, se desarrollan, y mueren, hacen su historia, variopinta.

En política el curso de los acontecimientos está directamente vinculado a esto. Para ello es necesario instrumentos que tomando lo más avanzado del pensamiento se propongan un programa para cada momento, vinculado a ideas generales, interviniendo muchas veces en etapas que son de transición entre un modo de producción y otro, como va a comenzar a ser la actual si logramos que la humanidad salga de la actual lógica de guerra.

Sé que en esos avatares hay gentes que tiene otro punto de vista, también muchas veces vinculados a objetivos circunstanciales que lo benefician directamente aunque no beneficien al conjunto. Los Estados, los partidos, las iglesias, etc. etc. nacen con ese objetivo.

Hoy estamos en una etapa de una crisis irreversible del modo de producción capitalista, estamos llegando a los límites de su capacidad predominante en el seno de la sociedad.

Los puros no existen, entonces que hago, me someto a la vorágine de la crisis, o busco privilegiar puntos programáticos que supongan un progreso colectivo, y me asocio con los que estén dispuestos a llevarlos adelante, respetando acuerdos de convivencia que nos permita a todos actuar.

Esto es lo que he hecho en el tema Caja Bancaria, dando la pelea pública para que se entendiera que el tema de la seguridad social, en su totalidad, tenía que vincularse con el impuesto a las transacciones financieras. Y cuando me tocó administrar, gestionar, tratar de aprender y aportar, para hacer que el colectivo responsable lo hiciera de la mejor manera posible.

Hay compañeros, no lo reprocho que en su comprensión del mundo y la política llegan a usar y desarrollar lo que los beneficia y hasta ahí llegan.

El Frente tiene que ser severo con las inconductas, pero con eso no alcanza, no se trata de los puros por un lado y los corruptos por otro: «el que esté libre de pecados que arroje la primera piedra», tiene que ser más severo a la hora de analizar el programa. Mujica en la ONU esbozó uno, y luego el silencio de todos y el propio Mujica.

Si no somos capaces de esto estamos condenados al fracaso, pero para eso no cuentan conmigo.

Venezuela, Maduro está al frente de una dura lucha con lo más podrido de la sociedad burguesa, ha cometido errores y seguramente horrores (como el Frente), pero su mayor dificultad es en el programa por los intereses que afecta a muchos de su entorno, entre ellos el problema de la moneda.

No puede haber una moneda fuerte que maneje el Estado y otra para la gente, como ocurría en el stalinismo.

¿Qué va a pasar no lo sé? Pero no me sumo a las canalladas de los intereses de los conglomerados empresariales multinacionales contra su gobierno, porque además una derrota en Venezuela, como en Brasil supone un retroceso de todos. Como lo es hoy el mal llamado proceso de la «primavera árabe». Pero también Maduro, como Lula deben seguir respondiendo a los intereses colectivos y rechazando los halagos de los interesados en sus propios intereses, que pululan en estas situaciones, un especie de «lumpen burguesía».

¿No sé si me explico?

Reitero lo que decía en una de las notas:

Nosotros por otra parte respetando todos los puntos de vista, por su origen humano, partimos de otra forma de razonar, nuestro método es el materialismo histórico.

Esto quiere decir que las conductas humanas tomadas individualmente y colectivamente más allá de circunstancias coyunturales –que siempre hay que tener en cuenta y buscar condenar cuando corresponda– son productos del desarrollo material de las sociedades humanas, que nacen, se desarrollan y mueren, y como además nos acontece a nosotros.

Ignorar esto supone pasar la comprensión de los fenómenos sociales, no al análisis global del proceso sino a la responsabilidad individual de cada uno. La gente individualmente pasa a ser la responsable de lo que está pasando.

Le salvan la responsabilidad al sistema, que es el objetivo de la derecha; adjunto dos formidables poemas que de alguna manera expresa lo que siento.

Jorge Aniceto Molinari.
Montevideo, 20 de abril de 2018.

Realmente vivo en tiempos sombríos.
La inocencia es locura. Una frente sin arrugas
denota insensibilidad. El que ríe
es porque todavía no ha oído
la terrible noticia.


¡Qué tiempos son estos, en que
hablar sobre árboles es casi un crimen
porque implica silenciar tanta injusticia!
Ese, que cruza tranquilamente la calle,
¿será encontrado cuando los amigos
necesiten su ayuda?


Es verdad que todavía me gano el sustento,
pero creedme: es por casualidad.
Nada de lo que hago justifica
que yo pueda comer hasta hartarme.
Las cosas todavía me van bien
(si la suerte me abandonase, estaría perdido).


Me dicen:
«Come, bebe, alégrate por lo que tienes!»
Pero… ¿cómo puedo comer y beber
si estoy arrebatando al hambriento su comida,
y mi vaso de agua le falta al sediento?
Y sin embargo continúo comiendo y bebiendo.


Me gustaría también ser sabio.
Los libros antiguos nos hablan de la sabiduría:
consiste en apartarse de los problemas del mundo
y, sin temores,
dejar que transcurra tranquilamente
el tiempo de nuestra breve vida en la tierra,
pagar el mal con el bien,
no satisfacer nuestros deseos, sino desecharlos.
He aquí lo que llaman sabiduría.
Pero yo no consigo hacer tales cosas.
Verdaderamente vivo en tiempos sombríos.

2

Llegué a las ciudades en tiempos conflictivos
cuando reinaba el hambre,
me mezclé entre los hombres en época turbulenta
y me rebelé con ellos.
Así fue transcurriendo el tiempo
que me fue concedido en la tierra.
Comí mi pan en medio de batallas,
dormía entre asesinos,
traté despreocupadamente los asuntos amorosos,
y fui impaciente con la naturaleza.
Así fue transcurriendo el tiempo
que me fue concedido en la tierra.
En mi época todos los caminos conducían al fango,
mis palabras me traicionaban ante el verdugo,
yo era poca cosa. Pero pienso que los gobernantes
se sentían más seguros sin mí.
Así fue transcurriendo el tiempo
que me fue concedido en la tierra.
Nuestras fuerzas eran escasas, la meta
se hallaba distante
y aunque podía distinguirse claramente, me parecía
que yo tal vez no la alcanzaría.
Así fue transcurriendo el tiempo
que me fue concedido en la tierra.

3

Vosotros, que surgiréis del marasmo
en que nosotros nos hemos hundido,
acordaos también,
cuando habléis de nuestras flaquezas,
de los tiempos sombríos
de los que os habéis librado.
Cambiábamos más frecuentemente de país
que de zapatos,
a través de las guerras de clases, desesperados,
porque reinaba la injusticia y nadie se indignaba.
Bien sabemos que el odio contra la ruindad
deforma el rostro
y la rabia contra la injusticia
enronquece la voz. ¡Ah!, nosotros,
que queríamos preparar el terreno para la bondad
no pudimos ser bondadosos.
Pero vosotros, cuando llegue el momento
en que el hombre sea bueno para el hombre,
acordaos de nosotros con comprensión.

Bertolt Brecht.

Utopía.

Joan Manuel Serrat.

Se echó al monte la utopía perseguida por lebreles que se criaron en sus rodillas y que al no poder seguir su paso, la traicionaron; y hoy, funcionarios del negociado de sueños dentro de un orden son partidarios de capar al cochino para que engorde. ¡Ay! Utopía, cabalgadura que nos vuelve gigantes en miniatura. ¡Ay! ¡Ay, Utopía, dulce como el pan nuestro de cada día! Quieren prender a la aurora porque llena la cabeza de pajaritos; embaucadora que encandila a los ilusos y a los benditos; por hechicera que hace que el ciego vea y el mudo hable; por subversiva de lo que está mandado, mande quien mande. ¡Ay! Utopía, incorregible que no tiene bastante con lo posible. ¡Ay! ¡Ay, Utopía que levanta huracanes de rebeldía! Quieren ponerle cadenas Pero, ¿quién es quién le pone puertas al monte? No pases pena, que antes que lleguen los perros, será un buen hombre el que la encuentre y la cuide hasta que lleguen mejores días. Sin utopía la vida sería un ensayo para la muerte. ¡Ay! Utopía, cómo te quiero porque les alborotas el gallinero.

¡Ay! ¡Ay, Utopía, que alumbras los candiles del nuevo día!

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[:es]La guerra…[:]

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La guerra

(Abordando eso gris, que parece la teoría).

Ya la realidad actual de la guerra es una tragedia, que amenaza extenderse con consecuencias terribles para la humanidad toda.

Se han quedado cortos los expresivos versos interpretados por León Gieco:

«Sólo le pido a dios
Que la guerra no me sea indiferente,
Es un monstruo grande y pisa fuerte…».

Los expertos en el tema nos explican una multiplicidad de razones para que hoy los enfrentamientos parezcan no tener solución de continuidad.

Nosotros somos tercos y a la vez imbuidos de una filosofía humanista que bajo ninguna circunstancia queremos abandonar. La guerra es la forma más criminal del hacer político. Y el hacer político tiene su razón de ser en la economía.

Hoy los presupuestos de las naciones desarrolladas encuentran un trágico equilibrio circunstancial en la industria de guerra. Ahora ni el más recalcitrante conservador de los economistas del capitalismo piensa que esto se pueda constituir en una salida viable, y a lo sumo esperan un milagro que en economía no existe, ni aún sobre los escombros de la guerra. Además parten de una análisis de la segunda guerra mundial en el que esconden los verdaderos motivos y el verdadero resultado: el pasaje de los gobiernos de Estado, al gobierno en pugna de los conglomerados empresariales multinacionales, que hoy lo ejercen y someten. El pasaje del avance de una costosa construcción democrática, a la dictadura abierta de la burguesía ejercida desde estos instrumentos económicos que hoy gobiernan el mundo, donde dirimen su interés en pugnas alejados del interés general de la gente.

Donde sólo el fascismo está convencido de su utilidad, pero donde la inercia de todos los otros sectores se transforma en una inanición criminal.

Cuando la segunda guerra mundial Stalin temía más una reacción en contra suya de los generales del ejército rojo que a la propia reacción asesina de Hitler. Pero en última instancia no había los instrumentos políticos capaces de cambiar esa realidad, y la esperanza era que los nazis no se animaran a lanzarse contra la Unión Soviética. Seguramente no era lo que pensaba el Mariscal Gueorgui Zhúkov, que reaccionó organizando la heroica respuesta rusa al nazismo, apoyado en la tradición revolucionaria del ejército rojo y de los generales que en un número muy importante pagaban con la cárcel, y condenas de muerte, la persecución enfermiza hacia ellos de Stalin.

Hoy la paz imprescindible para el desarrollo de la humanidad sólo es posible dando muerte a la predominancia del modo de producción capitalista, que supone medidas para que el capital acumulado sin rentabilidad pueda ser utilizado en beneficio de la humanidad toda. Así de sencillo.

¿Ahora cómo explicamos esto?: el capitalismo en esa falta de rentabilidad que lo hace promover las peores lacras de la sociedad va creando una burbuja de capitales ociosos que amenazan con extender aún más la guerra y el uso de armas nucleares, en un combo terrible y sin ninguna solución de progreso posible.

¿Es posible otro camino? Si es posible, si esos capitales fueran dispuestos para realizar las obras que hoy la humanidad necesita pero que al modo de producción capitalista no le resultan rentables.

No estamos hablando de disponer de capitales para el desarrollo burocrático de los Estados a través de un capitalismo de Estados, estamos hablando de establecer en forma universal de un sistema impositivo basado en la circulación del dinero y en la aplicación universal de planes de desarrollo a través de las formas de producción más eficientes sin descartar ninguna, que atiendan, la salud, la educación, la vivienda, sacando de la marginalidad a millones de seres humanos e incorporándoles a un aparato productivo en desarrollo, nadie deberá vivir sin trabajar o a lo sumo dedicando el tiempo en el aprendizaje para ello.

Para esto es que necesitamos una medida única y universal monetaria para la economía, así como existe el metro, el kilo, el litro…

Y por supuesto que en esta tarea hay que incorporar todo el desarrollo intelectual que la humanidad ha acumulado, llevando al plano de la planificación estratégica de todo esto, todos los antecedentes democráticos que se han ido conquistando.

¿Es esto posible, o es solo un sueño irrealizable?, nosotros creemos basados en las mejores tradiciones que sí, que es posible, para lo cual es necesario poner manos a la obra, cuya tarea fundamental es la voluntad política que lo lleve adelante. No puede haber hoy ninguna organización social, política, religiosa que omita expresarse sobre esto, y a partir de allí todo es válido en propuestas que auguren un desarrollo del aparato productivo.

Ya no son más posibles planes nacionales, regionales e incluso continentales solamente, si estos no están supeditados a un interés humano universal. No ignoramos la existencia de políticas económicas nacionales e incluso continentales por parte de intereses particulares de sectores, en proyectos que no tienen posibilidades reales de desarrollo en el espacio en pugna en que actúan los conglomerados empresariales multinacionales que gobiernan realmente el mundo.

En el Uruguay los ejemplos son tremendos, y no sólo producto de una forma de hacer política que al país le viene haciendo daño desde hace mucho tiempo (desde que el batllismo desaparecido su creador perdió su rumbo, como certeramente lo analizaba el Dr. Carlos Quijano desde los editoriales económicos de «Marcha»), y porque además las propias multinacionales las conducen al fracaso. Usan y luego tiran aunque se trate de gobiernos y de realidades sociales que abarcan a millones de seres humanos. Es parte también de lo que analizamos, es la lógica que conduce a extender la guerra.

El espacio para desarrollar en avance la política económica que hoy necesitamos es el planeta todo, y necesariamente se van a solapar dos modos de producción uno ayudado a morir y otro ayudado a nacer.

Esto de ninguna manera significa borrar las nacionalidades –incluso, entre otras, las creencias religiosas–, por el contrario supone poner éstas al servicio del bien común, cambiando radicalmente lo que hoy se hace de ponerlas unos contra otras en beneficio de las políticas de la guerra.

Allá por 1848, Marx y Engels cerraban su magistral Manifiesto del Partido Comunista con la frase: «¡Proletarios de todos los Países, uníos!».

Sería terrible para la especie humana si hoy, 170 años después, no diéramos respuesta a este llamado en el que hoy se parte de la necesidad no ya de programas nacionales sino de un programa universal que ponga en manos de la gente el destino democrático de la humanidad.

Por supuesto, que debo pensar que muchos de mis lectores no aceptan el programa y el camino que propongo para estas ideas, lo mínimo que pido es que se debatan y que si estoy equivocado lo demuestren y propongan para el bien de todos un camino mejor.

Mejorar individualmente al ser humano, siempre es una tarea loable y es en definitiva una finalidad social, insuficiente si de mejorar la sociedad se trata, pues ésta requiere en su crisis de desarrollo, de medidas asumidas universalmente, giro en la gobernanza mundial con dos herramientas centrales: la moneda y los impuestos, lo que llamamos la tarea de ayudar a morir en paz a la predominancia del modo de producción capitalista, conquistar la democracia en las relaciones económicas del mundo.

Si por el contrario pensamos en primero cambiar al ser humano para cambiar luego a la sociedad, podemos llegar a la conclusión de que la guerra es inevitable. Ahora debemos admitir que la tarea insoslayable de construir la voluntad política del cambio ya es un avance en la transformación de cada uno de nosotros. Nuestra tarea es la de mostrar que esos objetivos son alcanzables, es más que es imperioso alcanzarlos.

Cuando se crearon las Naciones Unidas, el mundo pensó sanamente que era un instrumento a desarrollar, y con ese destino se crearon organismos de un enorme valor colectivo, pero pronto se comprobó el divorcio entre construcciones políticas, culturales, sociales… de interés general humanitario y un curso económico divorciado de esas intenciones. Hoy se trata de revertir esa situación, para lo cual es necesario un programa por medio del cual la sociedad pase a tener el control democrático de la economía.

Jorge Aniceto Molinari.
Montevideo, 15 de abril de 2018.

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[:es]Lo individual y lo colectivo en Hoenir Sarthou.[:]

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Lo individual y lo colectivo en Hoenir Sarthou.

(Abordando eso gris, que parece la teoría).

En un editorial de «Voces», Sarthou hace el siguiente razonamiento, lo adjunto y luego lo comento.

Lula y la muchacha del metro por Hoenir Sarthou.

La anécdota le ocurrió a una persona que conozco en uno de esos países que nos resultan remotos y culturalmente incomprensibles. Pongamos que fue en Suecia o en Noruega, no recuerdo bien. El hombre –uruguayo él– estaba en el metro y observó que, entre los molinetes que, previa introducción de una ficha de determinado valor, permitían el acceso a la zona de abordaje de los trenes, había una entrada libre, sin molinete o con molinete gratuito. Sin embargo, nadie pasaba por esa entrada. Todos introducían su ficha y pasaban por los molinetes pagos. Intrigado, se dirigió a una chica que limpiaba o cumplía no sé qué función en el lugar (nada cuesta imaginar la cara ancha, el cuerpo robusto, el pelo rubio y la sonrisa candorosa, casi al punto de parecer tonta).

Disculpe, ¿para qué es esa entrada?–

La muchacha lo miró sorprendida, sonrió con mayor candor aun y dijo con naturalidad.

Para que pasen los que no tienen dinero.–

El uruguayo no contestó enseguida. Le llevó varios segundos digerir la respuesta y confrontarla con sus instintos rioplatenses.

Pero… –dijo al fin, intrigado- ¿Cómo evitan que entren por ahí personas que tienen dinero pero no quieren pagar?–

La muchacha volvió a sonreír con cierta inquietud o desconcierto. Arqueó una ceja. Parecía sorprendida. Finalmente dijo con extrañeza:

¿Y por qué alguien iba a querer hacer eso?–


En Brasil, a muchos kilómetros de distancia, el ex presidente Lula está preso. Se lo acusa de muchas cosas, pero está preso por un apartamento lujoso que la fiscalía afirma le fue regalado por la empresa Odebrecht y que Lula y sus partidarios afirman que nunca fue de Lula.

En Brasil pasaron y pasan muchas otras cosas. Tienen un presidente sobre el que pesan acusaciones penales tan o más graves que las de Lula. Es algo común en Brasil, donde tres cuartas partes de los integrantes del sistema político tienen procesos penales abiertos.

Durante los gobiernos de Lula y de Dilma Rousseff ocurrió el «mensalao», por el que casi todos los legisladores cobraron grandes coimas mensuales por votar lo que el gobierno quería, y, más importante aún, ocurrió el multimillonario vaciamiento de Petrobras.

Sin embargo, todos discuten sobre el apartamento de Lula. La fiscalía lo acusa en base al testimonio de los directivos de Odebrecht, que están presos y recibieron promesas de aligerar sus condenas a cambio de sus testimonios. Por su parte, Lula, el PT y sus aliados del oficialismo uruguayo sostienen que hay una conspiración de la derecha para desplazar a los progresismos del Continente, lo cual también puede ser cierto, dependiendo de qué entendamos por «derecha».

Entiendo que judicialmente sea importante saber si Lula se llevó reales, dólares o apartamentos al bolsillo, así como si realmente Dilma no se los llevó. Pero, desde el punto de vista político, es casi irrelevante. Dados el «mensalao» y la ruina de Petrobras, mediante contratos truchos, ¿qué importa si se guardaron la plata o sólo la usaron para comprar votos y financiar campañas políticas?

El efecto social es tan devastador en un caso como en otro. Al punto que discutir sobre el apartamento es casi hacerle un favor a Lula y –claro– también a Temer y a sus socios, que, entre otras cosas, parecen haber estado en primera fila en la nómina del «mensalao».


Como se darán cuenta, paso muy por arribita sobre el tema «Brasil». Es que, cuanta más información intento reunir, más me cuesta conocer los vericuetos de ese monstruo de país.

En otras palabras, escribo para compartir interrogantes más que para comunicar certezas.

Por ejemplo, ¿qué papel juega el sistema de justicia brasileño en esta historia? ¿Es una corporación autárquica acometiendo con mesianismo una función depuradora? ¿Son creíbles esa autonomía y esa limpieza en medio de un sistema institucional y empresarial de corrupción generalizada?

En caso contrario, ¿con qué respaldo actúa? ¿Quién está interesado en el descabezamiento del sistema político y de algunas empresas que, como Odebrecht, se habían comido al Estado y empezaban a comerse al mundo? ¿La oligarquía tradicional que se siente desplazada? ¿Intereses transnacionales? ¿Una mezcla de ambos?


¿La corrupción está destinada a ser la tumba de los «progresismos» latinoamericanos?

Desde una perspectiva de izquierda, es muy tentador sostener que la crisis que amenaza a los progresismos se explica por la esencial inviabilidad de su proyecto: conciliar la instalación del modelo económico global con la aplicación de políticas sociales distributivas, asistencialistas y clientelares.

Es tentador porque en buena medida es verdad. Los proyectos progresistas, teniendo el control del Estado, abren las puertas a la inversión extranjera, exprimen a los sectores productivos y a las capas medias nacionales y, en compensación, mejoran los salarios de los trabajadores sindicalizados y captan con políticas sociales asistencialistas a los sectores sociales pobres y semi marginales.

Obviamente, ese proyecto es, por definición, inestable. Lo es porque la inversión extranjera viene a condición de no aportar impuestos, tener acceso a recursos naturales a bajo costo y no ceñirse a ninguna estrategia nacional. Entonces, tarde o temprano, el dinero no alcanza para pagar la fiesta de la burocracia estatal progresista y, a la vez, asegurar los salarios de los trabajadores sindicalizados, costear la salud y la educación públicas y seguir financiando políticas sociales.

Cuando eso ocurre, se produce una rebatiña. La desesperación por mantenerse en el gobierno lleva a endeudar al país, otorgar a inversores extranjeros concesiones insostenibles, recortar los presupuestos de salud, educación y seguridad social, comprar votos y apoyos, mentir en las cifras y datos estadísticos y desviar fondos para financiar publicidad y campañas electorales.

Los primeros en percibir la inestabilidad son los dirigentes y altos funcionarios del proyecto progresista. Y, en ese contexto, es muy fácil que se inclinen a «hacer la suya» antes de que todo se desmorone.


Decir eso es tentador. Pero no es toda la verdad.

Un gobierno corrupto no puede instalarse ni perdurar si la sociedad, de la que proviene y a la que gobierna, no comparte ciertas características culturales afines a la corrupción.

En el Uruguay, como en Brasil, aunque a nuestra escala, todos los días se denuncian y se descubren casos de corrupción en altas esferas de la administración pública.

Tengo la impresión de que esas denuncias no producen un efecto saneador. Por alguna razón, confirman que hay corrupción en lo grande y, de alguna manera, legitiman que la haya en lo chico.


Es una vieja tradición la de conjurar todos los males con un cambio de gobierno. La militancia política de todos los signos, desde siempre, presupone que su misión es llegar al gobierno para, desde allí, cambiar-mejorar a la sociedad en algún sentido. Quizá ese sea el paradigma que no funciona.

Una larga historia de revoluciones y cambios de gobierno, en América Latina, por no ir más lejos, indica que, más temprano que tarde, las ilusiones de cambio social naufragan en un mar de decepciones, «achanchamientos», «vivezas» individuales, corrupción y autoritarismo.


Pienso en esa muchacha nórdica que no comprendía la razón por la que alguien quisiera acceder al metro sin pagar entrada.

Sí, claro, probablemente sea el resultado de una sociedad rica, en la que «avivarse» resulte una actitud inexplicable o estúpida. Pero tal vez detrás de esa aparente ingenuidad esté la noción de que la «viveza» individual generalizada es en realidad estupidez colectiva.

Durante mucho tiempo pensé que ese estado de espíritu sólo podría producirse tras un cambio social y económico que asegurara a todos condiciones aceptables de vida.

Hoy tengo dudas. Me pregunto si la lucha que tenemos por delante es política, como se ha creído por tanto tiempo, o si es ante todo cultural.

En un mundo en qué términos como trabajo, salario, crecimiento, desarrollo, energía, poder, comunicación y educación van a resignificarse, la pregunta se vuelve cada vez más pertinente.

Mi comentario:

El razonamiento es impecable, cambias al individuo y cambia la sociedad.- Desde el punto de vista idealista es así, cada uno es dueño de su propio destino y con su voluntad puede llegar o no a los fines que se proponga en la vida. Hasta aquí hay similitud con los razonamientos que han llamado la atención en todo el mundo del ex Presidente José Mujica.

Nosotros por otra parte respetando todos los puntos de vista, por su origen humano, partimos de otra forma de razonar, nuestro método es el materialismo histórico.

Esto quiere decir que las conductas humanas tomadas individualmente y colectivamente más allá de circunstancias coyunturales –que siempre hay que tener en cuenta son productos del desarrollo material de las sociedades humanas, que nacen, se desarrollan y mueren, y como además nos acontece a nosotros.

Ignorar esto supone pasar la comprensión de los fenómenos sociales, no al análisis global del proceso sino a la responsabilidad individual de cada uno. La gente individualmente pasa a ser la responsable de lo que está pasando.

Entonces los puntos de un programa para ayudar a la actual predominancia capitalista a morir en paz, pasan a ser los puntos de programa para realizar un proyecto propio y nacional, en que la economía puede ser manejada (estatizada) con consecuencias favorables para la gente. Y aún que funcionó en una etapa de la historia sobre la derrota de Lenin, a la larga conducen a una vía muerta.

Por eso Mujica no volvió sobre lo que dijo en la ONU, hasta ahora ha demostrado que ese discurso está fuera de esta lógica que venimos analizando en Sarthou.

Jorge Aniceto Molinari.
Montevideo, 13 de abril de 2018.

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[:es]Es necesario «filosofar»…[:]

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Es necesario «filosofar»…

(Abordando eso gris, que parece la teoría).

¿Por qué las cosas son como son?, aquí mi verdad, que ni siquiera tiene un valor definitivo en tanto creo tener adquirido el valor de criticar y de autocriticarme poniendo en duda todo lo que dije y escribí antes.

Marx no era marxista, Lenin no era leninista y sus textos originales formidables –muchas veces en formas de apuntes– por el valor y profundidad con el que abordaban los temas cruciales para el desarrollo humano, están plagados de tachaduras, enmiendas, que muestran su convicción de que lo importante era y es aportar, desprovisto de todo afán que no fuera el progreso de las ideas humanas y vaya que aportaron conceptos que denigrados de mil formas –por propios y extraños– en el crisol de la lucha de clases, a poco de encararlos con seriedad y la profundidad que requieren, afloran en todo su valor.

Dicho sea esto como prologo a mi opinión sobre un hecho que ha conmovido a la sociedad: la prisión del líder del PT brasileño el ex Presidente Lula.

Y en primer lugar mi total solidaridad y respaldo, aún en la modestia personal del mismo, con quién ha sido a lo largo de su vida un formidable y reconocido luchador por los derechos de la gente.

Ahora está claro de que todos debemos aprender de esta experiencia, de lo que acontece con Lula y no hacerlo no ayuda a salir con propuestas claras de todo este embrollo.

El hecho en si pone en discusión todo y cada uno de los enfoques es representativo de cómo se ubica cada quién frente a una crisis irreversible de la predominancia del modo de producción y ya con esto hago una primera presentación que seguramente no es compartida por muchos de los que tienen la gentileza de leerme.

Me dice un amigo: «para construir un mundo mejor, hay que partir de una selección de seres humanos mejores que construyan una», toda una definición, muy extendida particularmente entre los intelectuales, que para nada comparto.

De esto se desprende que Lula debió construir un Partido y luego un gobierno que cuestionara todo lo cuestionable de lo existente, así su gobierno hubiera sido impoluto e incuestionable, incluso por aquellos que pretendieron utilizarlo para el desarrollo de sus negocios. Y vaya si Brasil tiene un engranaje político más que bicenteañero en que todas las corruptelas parecen estar presentes. Es más esa grandeza parece haber sido posible solo con ese amparo de corruptela imperial. Sin embargo cuando llegó Lula en medio de una crisis brutal del sistema, la burguesía brasileña comenzó a soñar con tener a través de él una marca presencial de desarrollo de sus productos en el mundo. Ahora convengamos que el gobierno de la economía mundial, viviendo una aguda pugna por la rentabilidad, podía darle a esa perspectiva muy poca vida, como efectivamente ocurrió u ocurre hoy por ejemplo con la perspectiva que le pueda dar a la experiencia «nacionalista» de Trump y un final presumiblemente también trágico en su agotamiento.

La expresión del entonces Presidente Mujica de que debemos viajar en el estribo de Brasil, tenía en cuenta la coyuntura, pero no la perspectiva de la economía mundial, que si efectivamente encaró en su «olvidada» intervención en el seno de la ONU (septiembre 2013), aunque solo le demos a esta el valor de insinuarlo. También Lula al principio de su gobierno insinuó que iba a recorrer ese camino, el nacimiento del Foro Social Mundial debía hacerlo. Su impulso fue decisivo para que se constituyera y luego también en su decaecimiento.

Lula decidió meter las manos en el barro, ¡y en que barro!, para construir un modelo de desarrollo que el capitalismo mundial pudiera admitir. No fue posible, los plazos y los tiempos necesitan otra respuesta que es sobre la que efectivamente hay que debatir. Y cuando hablo de barro es más que una metáfora, es la realidad política en la que hoy se construyen las esperanzas progresistas de los pueblos. ¿Había otro camino? No, pero se insinuó un programa que luego no se desarrolló, y en el pecado está la penitencia.

También admitamos que desde los resabios del stalinismo aún persisten con proyectos varios, la idea de la estatización de la sociedad y para la cual para estas corrientes solo basta con la voluntad y los «hombres nuevos» dispuestos a su construcción. Amén de pensar en una realidad de la economía mundial idealizada, que no le puede brindar posibilidades porque no existen. Si bien en toda una etapa de la historia, –en medio de dos guerras mundiales– economías estatizadas tuvieron distinta suerte, por la propia existencia de la Unión Soviética, que siempre hemos señalado como apoyadas en el triunfo de la revolución rusa, utilizando la vía no marxista, ni leninista, del capitalismo de estado. Conjunción de avance y tragedia, con todo lo que ello significó en la vida de la gente, el asesinato de los revolucionarios y muchísimos seres humanos en un camino abierto al fascismo.

Para no los que no parecen entender esta realidad, hay un hecho que rompe los ojos, y es el de que el capitalismo embretado en una crisis cada vez más profunda, y necesitado de caminar, aborda hoy su desarrollo universal, apoyado en un país enorme, cuyo principal sostén es el gobierno del Partido Comunista. Como antes lo hizo en otra etapa de la historia en la construcción de EE.UU. como eje mundial del capitalismo.

Que esto no alcanza para darnos la tranquilidad; estamos de acuerdo, pero comprobemos que es un dato muy firme de la realidad y que es sobre él que debemos encarar el futuro. Es más, muchas de las esperanzas «progresistas» están amparadas hoy en esa realidad. Por eso de la vida política china ni la derecha habla, y cuando reciben las declaraciones de Trump, toman distancia. Quién los hubiera visto a fines del siglo 20 a estos mismos actores. El comercio no debe tener banderas nos explican.

Cosas vederes Sancho, diría el Quijote.

Apoyados en este análisis es que decimos que la prisión de Lula, es una prisión política y para resolverse necesita de un programa para el conjunto de la sociedad brasileña y que hoy repercuta en el mundo.

¿Por qué?, porque si no se abre la realidad política que lo condena sobre la base de prácticas que son nocivas para la sociedad, las fuerzas que predominan lo condenan porque ellas se siente ilegítimas sino lo hacen y porque el argumento de que abrió el camino de una vida digna a millones de seres humanos para ellos no es de recibo en tanto la economía tal cual está hoy organizada no lo puede sostener, sienten ahogo fascista y desprecio por todos los otros seres humanos. Hay odio de clase en su proceder.

Y por favor no me vengan con la moralina democratista, de los que en su vida diaria y a través de miles de ejemplo lo están negando; el que esté libre de pecados que arroje la primera piedra. ¿Quién en el Uruguay no evadió impuestos, quién no trabajó o hizo trabajar en negro? ¿Me explico? ¿Es que detrás de la oposición a la bancarización por ejemplo, no están los grandes operadores financieros que aprovechan errores de este proceso para afirmar sus negocios en el micro y gran mercado de los créditos? Negocio brutal de endeudamiento de la gente, y que a estos ni siquiera se atreven a denunciarlos como pasa con el movimiento llamado de los «autoconvocados».

Que debe haber reglas: de acuerdo, pero la punidad en la aplicación de esas reglas tiene el límite de la necesidad social de un programa que permita a la sociedad toda salir de esta etapa de crisis irreversible de la predominancia del modo de producción capitalista.

¿Cuál es el futuro de Lula?: siendo importante debemos saber que ello depende de algo aún más importante y es la capacidad de la izquierda de tener un programa para superar esta etapa de crisis, Lula lo insinuó en el 2001 con el Foro Social Mundial, Chávez lo enriqueció con su aportes, Mujica lo llevó a la ONU en setiembre del 2013, pero luego entramos en un pantano en que si no actuamos el retroceso es evidente. Y en el pantano las conductas antisociales de la corrupción, pesan y lesionan.

Todo esto sin dejar de señalar la existencia de los huevos de la serpiente, y los peligros que ello conlleva en un mundo donde el modo de producción capitalista hace que viva en un estado de guerra permanente. Y si para muestra basta un botón, tomemos las declaraciones militares presionando a los jueces, la conversación de la torre de control con el mando del helicóptero que transportaba a Lula, que son muestras que el fascismo sigue integrando el conglomerado de las conductas humanos posibles.

En este sentido y reconociendo la modestia de nuestros conocimientos, están todas las propuestas que sobre la base de dos herramientas –la moneda y los impuestos– hemos ido desarrollando en todas las columnas anteriores y que pueden consultarse en los archivos de la misma, con un centro: como ayudar entre todos a la muerte en paz de la predominancia del modo de producción que hoy nos está condenando a una vida peor.

Un mundo mejor es posible.

Jorge Aniceto Molinari.
Montevideo, 9 de abril de 2018.

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[:es]Día internacional de la mujer.[:ca]Dia internacional de la dona.[:]

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Día internacional de la mujer.

(Abordando eso gris, que parece la teoría).

Las sufragistas inglesas –Suffragettes– Annie Kenney y Christabel Pankhurst portando un cartel reivindicativo del sufragio femenino. Autor desconocido: http://www.hastingspress.co.uk/history/sufpix.htm, Dominio público, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=15154048En 1910, en la II Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas reunida en Copenhague, se reiteró la demanda de sufragio universal para todas las mujeres y, a propuesta de Clara Zetkin, se proclamó el 8 de marzo como el Día Internacional de la Mujer. La propuesta de Zetkin fue respaldada unánimemente por la conferencia a la que asistían más de 100 mujeres procedentes de 17 países, entre ellas las tres primeras mujeres elegidas para el parlamento finés. El objetivo era promover la igualdad de derechos, incluyendo el sufragio para las mujeres. Además de Clara Zetkin hay que señalar los nombres de otras pioneras en la reivindicación de los derechos de las mujeres como Rosa Luxemburgo, Aleksandra Kolontái, Nadezhda Krúpskaya e Inessa Armand.

Recurrimos a la aguda memoria que nos presta hoy internet, para refrescar datos que no están suficientemente difundidos y son importantes, aunque la cita que transcribimos es limitada.

El origen es claro y contundente. La represión y el asesinato de obreras textiles, en EE.UU. Esto motiva para transformarlo en un mojón de luchas, también reconocidas, muchos años después por la ONU, y que llega nuestros días con renovada potencia. Fruto también de la acentuación de la crisis irreversible en la que ha entrado la predominancia del modo de producción capitalista.

¿Es la reivindicación de igualdad en los derechos suficiente?, está claro que no alcanza con eso, sin embargo el reconocimiento es muy importante como base de partida de las reivindicaciones.

No las colma, pues la desigualdad nace en la lucha de clases y en el uso que de ella hace el modo de producción capitalista en su objetivo de abaratar costos y ampliar mercados, cuyo límite material y natural es el Planeta.

La incorporación de la mujer al trabajo en las fábricas era para los empresarios capitalistas una de las formas de abaratar el trabajo asalariado.

Lo que no podía prever el burgués empresario es que iniciaba un proceso de transformaciones de las relaciones sociales que llega profundamente hasta nuestros días.

El trabajo de la mujer era «más barato» y por eso abusó de su uso, e incluso aplicó en él, las medidas represivas más repudiables en el capitalismo, como el asesinato que da nacimiento a esta fecha.

En el auge de la expansión capitalista, esto significó por la repercusión y significado de las luchas un progreso enorme en derechos sociales en toda la humanidad. Progreso desigual y combinado, que tiene puntos altos en las conquistas que en la materia se han logrado en los países desarrollados y puntos pendientes a reivindicar en muchas zonas del planeta.

En América el Uruguay ha sido pionero en la materia. Sería bueno, no lo vamos hacer en esta nota, repasar una reseña histórica de los hitos que se han marcado en este proceso.

En la actualidad la situación es otra. El capitalismo ha entrado en una crisis irreversible, y sus corrientes más estúpidas hablan de abaratar costos sociales y de preparar la represión y la guerra contra la sociedad en su conjunto y en particular contra los avances de los derechos de las mujeres trabajadoras.

Lo que nos preocupa es que el movimiento que felizmente va creciendo en todo el mundo tenga claro que los objetivos para ser logrados no basta con la igualdad de derechos del hombre y la mujer, –que es importante–, sino que es necesario preparar la transición para la muerte en paz de la predominancia del modo de producción capitalista.

Y esto no se logra en la confrontación de modelos sino en medidas de transición que hoy están alcance de toda la humanidad en la medida que exista la voluntad política de aplicarlas. Voluntad política que el movimiento de las mujeres en todo el mundo es prueba de que ella puede ser rápidamente construida.

Sin embargo como en el proceso de los Foros Sociales Mundiales, donde la bastedad del movimiento y lo difuso de la concreción programática ha hecho que no falten los elementos de provocación para impedir que ello se plasme.

La manifestación en Montevideo fue importante. Ha habido muchas importantes, como la del sepelio de Líber Arce en 19681. En aquella, la provocación tenía un objetivo, desviar la atención de la acción masiva a la protesta individual sin sentido. En este caso fue muy menor pero no por ello debe dejar de censurarse.

El antídoto como en aquel entonces es la capacidad para construir programa, y esto vale para el Uruguay como para España, por ejemplo, donde también las manifestaciones marcaron un hito en un contexto social que ya no logra equilibrios.

La desigualdad es una realidad que exige ser superada. Las movilizaciones hablan por sí solas de una alto nivel de consciencia, pero a la vez emergen en un mundo donde la crisis del capitalismo es ya irreversible, y los efectos de la guerra particularmente en y contra las mujeres se extienden y la llamada igualdad de géneros no es suficiente como reivindicación programática, sino que debe estar acompañada por la construcción de la voluntad política para terminar con los paraísos fiscales, para hacer que el sistema impositivo provea de los fondos que la sociedad necesita, incluso para la labrar la igual, de la circulación del dinero y no del consumo, los salarios y las pensiones como es la realidad actual.

¿Se tiene consciencia de esto?: en el ejemplo de 1968 (Líber Arce), estábamos ya sumergidos en un proceso en que comenzaban a instaurarse las llamadas dictaduras «cívico-militares». Hoy la situación es aún más grave, hay que parar la extensión de la guerra y ello supone la organización de la sociedad para desmantelar la industria que la impulsa. Ello exige medidas programáticas universales que el movimiento de las mujeres en el mundo está mostrando que son posibles.

No tenemos dudas de cuál debería ser el próximo paso: construir la voluntad política sobre la base de un programa que efectivamente pueda transformar esta realidad traumática de hoy. Ese programa ya existe y en la propia ONU se le ha esbozado.

Jorge Aniceto Molinari.
Montevideo. Domingo, 11 de marzo de 2018.

Nota:

1Estos hechos son paradigmáticos. Se cumplen 50 años y sobre ellos que nosotros conozcamos no ha habido una investigación exhaustiva que determine de donde surgió la orden del balazo que terminó con la vida de Líber Arce y de donde surgieron las ordenes para realizar los desmanes en el centro de Montevideo, que desviaran la atención luego de la impotente manifestación que acompañara el sepelio. Seguramente ya estaban trabajando los «servicios» para corromper a la policía y a las fuerzas armadas, que culminó con el golpe de Estado de junio del 1973 y la tragedia posterior cuyas secuelas aún vivimos.

Es la película que han tratado de repetir en Venezuela, con un marco distinto y con un panorama en el mundo donde frente a la crisis ya no pueden operar de la misma manera.

[:ca]

Dia internacional de la dona.

(Abordant això gris, que sembla la teoria).

Les sufragistes angleses –Suffragettes– Annie Kenney i Christabel Pankhurst portant un cartell reivindicatiu del sufragi femení. Autor desconegut: http://www.hastingspress.co.uk/history/sufpix.htm, Domini públic, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=15154048El 1910, en la II Conferència Internacional de Dones Socialistes reunida a Copenhaguen, es va reiterar la demanda de sufragi universal per a totes les dones i, a proposta de Clara Zetkin, es va proclamar el 8 de març com el Dia Internacional de la Dona. La proposta de Zetkin va ser recolzada unànimement per la conferència a la qual assistien més de 100 dones procedents de 17 països, entre elles les tres primeres dones escollides per al parlament finès. L’objectiu era promoure la igualtat de drets, incloent el sufragi per a les dones. A més de Clara Zetkin cal assenyalar els noms d’altres pioneres en la reivindicació dels drets de les dones com Rosa Luxemburg, Aleksandra Kol·lontai, Nadejda Krúpskaia i Inessa Armand.

Recorrem a l’aguda memòria que ens presta avui internet, per refrescar dades que no estan prou difoses i són importants, encara que la cita que transcrivim és limitada.

L’origen és clar i contundent. La repressió i l’assassinat d’obreres tèxtils, als EUA. Això motiva per transformar-la en una fita de les lluites, també reconegudes, molts anys després per l’ONU, i que arriba als nostres dies amb renovada potència. Fruit també de l’accentuació de la crisi irreversible en què ha entrat la predominança de la manera de producció capitalista.

N’hi ha prou amb la reivindicació d’igualtat en els drets?, està clar que no s’aconsegueix amb això, però el reconeixement és molt important com a punt de partença de les reivindicacions.

No les satisfà, doncs la desigualtat neix en la lluita de classes i en l’ús que d’ella fa la manera de producció capitalista en el seu objectiu d’abaratir costos i ampliar mercats, el límit material i natural dels quals és el Planeta.

La incorporació de la dona al treball de les fàbriques era per als empresaris capitalistes una de les formes d’abaratir el treball assalariat.

El que no podia preveure el burgès empresari és que iniciava un procés de transformacions de les relacions socials que arriba profundament fins als nostres dies.

El treball de la dona era «més barat» i per això va abusar del seu ús, i fins i tot va aplicar en aquest, les mesures repressives més rebutjables en el capitalisme, com l’assassinat que dóna naixement a aquesta data.

En l’auge de l’expansió capitalista, això va significar per la repercussió i significat de les lluites un progrés enorme en drets socials per tota la humanitat. Progrés desigual i combinat, que té punts alts en les conquestes que en la matèria s’han aconseguit en els països desenvolupats i punts pendents a reivindicar en moltes zones del planeta.

A Amèrica, l’Uruguai ha estat pioner en la matèria. Seria bo, no ho farem en aquesta nota, repassar una ressenya històrica de les fites que s’han marcat en aquest procés.

En l’actualitat la situació és una altra. El capitalisme ha entrat en una crisi irreversible, i els seus corrents més estúpids parlen d’abaratir costos socials i de preparar la repressió i la guerra contra la societat en el seu conjunt i en particular contra els avenços dels drets de les dones treballadores.

El que ens preocupa és que el moviment que feliçment va creixent a tot el món tingui clar que els objectius per a ésser assolits no n’hi ha prou amb la igualtat de drets de l’home i la dona, –que és important–, sinó que cal preparar la transició per la mort en pau de la predominança de la manera de producció capitalista.

I això no s’aconsegueix en la confrontació de models sinó en mesures de transició que avui estan abast de tota la humanitat en la mesura que hi hagi la voluntat política d’aplicar-les. Voluntat política que el moviment de les dones a tot el món és prova que aquesta pot ser ràpidament construïda.

No obstant això com en el procés dels Fòrums Socials Mundials, on l’extensió del moviment i el difús de la concreció programàtica ha fet que no faltin els elements de provocació per impedir que això es plasmi.

La manifestació a Montevideo va ser important. Hi ha hagut moltes importants, com la del sepeli de Liber Arce el 19681. En aquella, la provocació tenia un objectiu, desviar l’atenció de l’acció massiva cap a la protesta individual sense sentit. En aquest cas va ser molt menor però no per això s’ha de deixar de censurar.

L’antídot com en aquell temps és la capacitat per construir programa, i això val tant per a l’Uruguai com per a Espanya, per exemple, on també les manifestacions van marcar una fita en un context social que ja no aconsegueix equilibris.

La desigualtat és una realitat que exigeix ser superada. Les mobilitzacions parlen per si soles d’una alt nivell de consciència, però alhora emergeixen en un món on la crisi del capitalisme és ja irreversible, i els efectes de la guerra particularment en i contra les dones s’estenen i l’anomenada igualtat de gèneres no és suficient com a reivindicació programàtica, sinó que ha d’estar acompanyada per la construcció de la voluntat política per acabar amb els paradisos fiscals, per fer que el sistema impositiu proveeixi dels fons que la societat necessita, fins i tot per a la conrear la mateixa, de la circulació dels diners i no del consum, els salaris i les pensions com és la realitat actual.

Es té consciència d’això?: en l’exemple de 1968 (Liber Arce), estàvem ja submergits en un procés en què començaven a instaurar-se les anomenades dictadures «cívic-militars». Avui la situació és encara més greu, cal aturar l’extensió de la guerra i això suposa l’organització de la societat per desmantellar la indústria que la impulsa. Això exigeix mesures programàtiques universals que el moviment de les dones en el món està mostrant que són possibles.

No tenim dubtes de quin hauria de ser el proper pas: construir la voluntat política sobre la base d’un programa que efectivament pugui transformar aquesta realitat traumàtica d’avui. Aquest programa ja existeix i en la pròpia ONU se li ha esbossat.

Jorge Aniceto Molinari.
Montevideo. Diumenge, 11 de març del 2018.

Nota:

1Aquests fets són paradigmàtics. S’acompleixen 50 anys i sobre ells que nosaltres coneguem no hi ha hagut una investigació exhaustiva que determini d’on va sorgir l’ordre del tret que va acabar amb la vida de Líber Arce i d’on van sorgir les ordres per realitzar els excessos en el centre de Montevideo, que desviessin l’atenció després de la impotent manifestació que acompanyés el sepeli. Segurament ja estaven treballant els «serveis» per corrompre a la policia i les forces armades, que va culminar amb el cop d’Estat de juny del 1973 i la tragèdia posterior les seqüeles de la qual encara vivim.

És la pel·lícula que han tractat de repetir a Veneçuela, amb un marc diferent i amb un panorama en el món on davant de la crisi ja no poden operar de la mateixa manera.

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[:es]Un nuevo ropaje para el viejo cuento del Tió.[:ca]Un nou vestit per al vell conte del Tió.[:]

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Un nuevo ropaje para el viejo cuento del Tió.

(Abordando eso gris, que parece la teoría).

Tió de Navidad.Allá por la década del 60 había un estudio jurídico en Montevideo, Uruguay, que recibía dinero y redituaba un interés a plazo fijo superior al establecido en las instituciones bancarias.

Establecía entonces una calesita, pagando como prueba de su idoneidad, los intereses estipulados y recibiendo cada vez más capitales hasta que el encanto se rompía y los iniciadores del proceso se hacían humo.

En el 94 en Rusia, con la ayuda de una intensa propaganda en la televisión, ocurrió un juego parecido con títulos, que decían iban a ser invertidos con grandes dividendos, el nombre de esos títulos «MMM», hasta que se rompió el encanto, y algunos de los estafados se suicidaron. Lo de las AFAPS (prestadores privados de jubilaciones y pensiones) no fue lo mismo aunque el argumento de grandes rentabilidades también se destacó y los organismos financieros internacionales aprovecharon para colocar deuda pública con la que se financiaba el inicio del sistema. El argumento de fondo era que el viejo sistema de seguridad social que le había dado estabilidad al Uruguay estaba quebrado y el nuevo tenía la promesa de una inversión privada exitosa aunque en el mundo esta comenzaba a tener las dificultades que hoy vemos acrecentadas.

No quiere decir que estos sean los únicos ejemplos del famoso cuento del Tió, sino que cada país los ha tenido con el mismo sentido en distintas formas y épocas.

En el 2002 cuando en el gobierno del Dr. Jorge Batlle y producto también de una crisis muy profunda en la economía argentina, este quedó agarrado del pincel, y fue auxiliado en la defensa de los ahorristas y del ahorro nacional, por Juan José Ramos, inolvidable dirigente bancario de AEBU, y el Dr. Alejandro Atchugarry que formaron un equipo para negociar una salida ante el Fondo Monetario Internacional, que ante la debacle y lo que ello suponía se avino a una salida acordada, que permitió a la democracia uruguaya salvar el duro trance que suponía la caída de todo el sistema financiero.

Hoy, cuando los grandes Estados emiten moneda sin ningún respaldo para paliar sus déficit presupuestales a gusto y placer de los grandes organismos financieros internacionales, el aumento constante y sin retroceso de los endeudamientos presupuestales de los distintos países, y cuando no hay nadie que desde el punto de vista económico no reconozca que hoy el valor de las monedas es una convención política, que puede fracturarse en cualquier momento, la llamada «volatilidad», ha surgido una moneda cuya cotización es como en los casos que reseñamos al principio un juego con el cual se genera un burbuja que beneficia a sus promotores y cuando revienta genera la perdida de sectores importantes de la sociedad que cayeron en el juego y quedan sin protección posible. Parecería ser que es esto lo que está pasando con el «Bitcoin», una estafa hecha y favorecida con el aprovechamiento de la inmoralidad de los organismos financieros internacionales.

En este caso además la llamada «cripto moneda» viene vestida de la aureola de la tecnología, aunque su función no es monetaria sino especulativa y como tal en algún momento se quiebra su hechizo. Usufructúa la situación caótica de los emisores monetarios que no tienen orientación clara en cuanto a cómo fijar el valor de la unidad monetaria, en tanto los paraísos fiscales, las evasiones, las elusiones, y el lavado son moneda corriente en el flujo de inversiones en todo el mundo, tendiendo a generar burbujas financieras en plazos cada vez más cortos.

Una cosa muy distinta es sustituir el papel moneda por el dinero digital, que es un ahorro y una comodidad en las transacciones y no pueden tener valor especulativo, como el que viene realizando a modo de experiencia el Banco Central del Uruguay con la aplicación E-peso, por ahora un sistema pionero en el mundo y con proyecciones de futuro si de crear un sistema financiero sano se trata.

Es más, esta experiencia muestra claramente que hoy es posible y necesario ya promover un acuerdo universal para que el valor unitario de la moneda efectivamente lo sea con un valor perfectamente delimitado, acabando con el manejo de esos valores, en detrimentos de los sectores menos beneficiados de la sociedad. Hoy cuando por ejemplo se habla de atraso cambiario, lo que se está buscando no es otra cosa que un subsidio indiscriminado por medio de las diferencias en la cotización de la moneda. Es más, la diferencia entre el valor de comercialización en el mundo, generalmente en dólar, con el valor interno con el que se pagan las prestaciones de los salarios y jubilaciones hace posible un juego contra la gente y su nivel de vida, como ha ocurrido, en unos ejemplos claros, en Argentina y Venezuela.

La aprensión que en algunos sectores produce la aplicación de la tecnología, se acrecienta pues no hay una explicación pública fehaciente de estos hechos, pues de alguna manera los organismos financieros internacionales en su conducción hoy se hacen cómplices de este tipo de maniobras, al permitir los paraísos fiscales, el lavado de dinero, aún cuando aparecen haciendo esfuerzos de control extremadamente limitados a un sector muy menor de las transacciones que hoy se hacen en el mundo.

Podemos presumir que hoy en los países lo que pasa efectivamente por la contabilidad de los bancos es una proporción menor de lo que es en su conjunto la actividad financiera que efectivamente genera el desarrollo de la actividad productiva.

Si a esto le agregamos la creencia bastante desarrollada de que la actividad financiera puede operar por fuera del aparato productivo, con leyes propias, tenemos el combo completo, como si controlándola –a la actividad financiera– se lograra «enderezar» la actividad del aparato productivo en beneficio de la gente. Cuando es precisamente la crisis del aparato productivo –la falta de rentabilidad de las inversiones, el agostamiento de la tasa general de ganancia– lo que alimenta este fenómeno, junto con el incremento de la industria de la guerra entre otras, como la de los medicamentos, por ejemplo.

Por eso sostenemos que hoy los ingresos impositivos para atender y desarrollar las necesidades de la gente deben provenir de impuestos aplicados al giro del dinero, ninguna transacción financiera o con uso de dinero debería ser válida sin estar debidamente registrada en los organismos que la sociedad determine, dando muerte a los paraísos fiscales, y a los sistemas impositivos basados en el consumo, los salarios y las pensiones.

Las llamadas cripto-monedas son una demostración de que la sociedad está en una etapa donde es totalmente posible ayudar a la predominancia del modo de producción capitalista a morir en paz. Esto es lo que Mujica insinuó en setiembre del 2013 en la ONU. Es, además, lo que expresamos en carta –diciembre del 2008– al entonces Presidente Electo Obama y sobre la que nunca tuvimos respuesta. Nuestro objetivo era y es dejar planteado al más alto nivel posible, para abrir el debate, el programa necesario a esta etapa.

Sin embargo, hay que prestar atención a la enorme desprotección en la que vive la sociedad ante el tipo de maniobras como la que describimos al inicio de esta nota. Y frente a las cuales ya existen medidas necesarias e imprescindibles que se deben tomar a nivel universal, por las que hemos venido abogando, y precisamente insinuó Mujica en la ONU. En la modestia de nuestro conocimientos tal vez podamos decir como se dijo alguna vez: «e pour se mouve».

También a modo de autocrítica:

Hace ya unos cuantos años que venimos escribiendo sobre los bitcoin. Advertíamos sobre los peligros, y a la vez nos entusiasmaba más el uso de los avances tecnológicos. Hoy cuando estos avances son fácilmente utilizables, empieza a pesar el uso con fines de estafa que se hace con los mismos, y el peligro que ello significa. Los fines especulativos se multiplican y los desequilibrios también. Hoy comprendemos que esto pesa más que los propios adelantos que para la sociedad son irrenunciables en la medida que pueda hacer de su control un avance. La sociedad debe imponer su control democrático sobre la economía. Esa es hoy la tarea impostergable.

Jorge Aniceto Molinari.
Montevideo. Sábado, 23 de diciembre de 2017.

[:ca]

Un nou vestit per al vell conte del Tió.

(Abordant això gris, que sembla la teoria).

Tió de Nadal.Allà per la dècada del 60 hi havia un estudi jurídic a Montevideo, Uruguai, que rebia diners i atorgava un interès a termini fix superior a l’establert en les institucions bancàries.

Establia llavors com un joc dels cavallets, pagant com a prova de la seva idoneïtat, els interessos estipulats i rebent cada vegada més capitals fins que l’encant es trencava i els iniciadors del procés es feien fum.

Al 94 a Rússia, amb l’ajuda d’una intensa propaganda a la televisió, va ocórrer un joc semblant amb títols, que deien anaven a ser invertits amb grans dividends, el nom d’aquests títols «MMM», fins que es va trencar l’encant, i alguns dels estafats es van suïcidar. El de les AFAPS (prestadors privats de jubilacions i pensions) no va ser el mateix encara que l’argument de grans rendibilitats també es va destacar i els organismes financers internacionals van aprofitar per col·locar deute públic amb la qual es finançava l’inici del sistema. L’argument de fons era que el vell sistema de seguretat social que li havia donat estabilitat a l’Uruguai estava trencat i el nou tenia la promesa d’una inversió privada reeixida encara que al món aquesta començava a tenir les dificultats que avui veiem augmentades.

No vol dir que aquests siguin els únics exemples del famós conte del Tió, sinó que cada país els ha tingut amb la mateixa orientació en diferents formes i èpoques.

El 2002 quan en el govern del Dr. Jorge Batlle i producte també d’una crisi molt profunda en l’economia argentina, aquest va quedar agafat del pinzell, i va ser auxiliat en la defensa dels estalviadors i de l’estalvi nacional, per Juan José Ramos, inoblidable dirigent bancari de AEBU, i el Dr. Alejandro Atchugarry que van formar un equip per negociar una sortida davant el Fons Monetari Internacional, que davant el desastre i el que això suposava es va avenir a una sortida acordada, que va permetre a la democràcia uruguaiana salvar el dur tràngol que suposava la caiguda de tot el sistema financer.

Avui, quan els grans Estats emeten moneda sense cap suport per pal·liar els seus dèficit pressupostaris a gust i plaer dels grans organismes financers internacionals, l’augment constant i sense retrocés dels endeutaments pressupostaris dels diferents països, i quan no hi ha ningú que des del punt de vista econòmic no reconegui que avui el valor de les monedes és una convenció política, que pot fracturar-se en qualsevol moment, l’anomenada «volatilitat», ha sorgit una moneda la cotització de la qual és com en els casos que ressenyem al principi, un joc amb el qual es genera un bombolla que beneficia als seus promotors i quan rebenta genera la pèrdua de sectors importants de la societat que van caure en el joc i queden sense protecció possible. Semblaria ser que és això el que està passant amb el «Bitcoin», una estafa feta i afavorida amb l’aprofitament de la immoralitat dels organismes financers internacionals.

En aquest cas a més l’anomenada «cripto moneda» ve vestida de l’aurèola de la tecnologia, encara que la seva funció no és monetària sinó especulativa i com a tal en algun moment es trenca el seu encanteri. Genera la situació caòtica dels emissors monetaris que no tenen orientació clara pel que fa a com fixar el valor de la unitat monetària, en tant els paradisos fiscals, les evasions, les elusions, i el rentat de diner negre són moneda corrent en el flux d’inversions en tot el món, tendint a generar bombolles financeres en terminis cada cop més curts.

Una cosa molt diferent és substituir el paper moneda pel diner digital, que és un estalvi i una comoditat en les transaccions i no poden tenir valor especulatiu, com el que realitza a manera d’experiència el Banc Central de l’Uruguai amb l’aplicació Correu pes, per ara un sistema pioner al món i amb projeccions de futur si de crear un sistema financer es tracta.

És més, aquesta experiència mostra clarament que avui és possible i necessari i promoure un acord universal perquè el valor unitari de la moneda efectivament ho sigui amb un valor perfectament delimitat, acabant amb el maneig d’aquests valors, en detriments dels sectors menys beneficiats de la societat. Avui quan per exemple es parla d’endarreriment canviari, el que s’està buscant no és altra cosa que un subsidi indiscriminat per mitjà de les diferències en la cotització de la moneda. És més, la diferència entre el valor de comercialització al món, generalment en dòlar, amb el valor intern amb el qual es paguen les prestacions dels salaris i jubilacions fa possible un joc contra la gent i el seu nivell de vida, com ha passat, en uns exemples clars, a l’Argentina i Veneçuela.

La aprensió que en alguns sectors produeix l’aplicació de la tecnologia, augmenta ja que no hi ha una explicació pública fefaent d’aquests fets, doncs d’alguna manera els organismes financers internacionals en la seva conducció avui es fan còmplices d’aquest tipus de maniobres, en permetre els paradisos fiscals, el rentat de diners, tot i que apareixen fent esforços de control extremadament limitats a un sector molt menor de les transaccions que avui es fan al món.

Podem presumir que avui els països en allò que passa efectivament per la comptabilitat dels bancs és una proporció menor del que és en el seu conjunt l’activitat financera que efectivament genera el desenvolupament de l’activitat productiva.

Si a això li afegim la creença bastant desenvolupada que l’activitat financera pot operar per fora de l’aparell productiu, amb lleis pròpies, tenim la combinació completa, com si controlant –a l’activitat financera– s’aconseguís «redreçar» l’activitat de l’aparell productiu en benefici de la gent. Quan és precisament la crisi de l’aparell productiu –la manca de rendibilitat de les inversions, l’esgotament de la taxa general de guany– la que alimenta aquest fenomen, juntament amb l’increment de la indústria de la guerra entre d’altres, com la dels medicaments, per exemple.

Per això sostenim que avui els ingressos impositius per atendre i desenvolupar les necessitats de la gent han de provenir d’impostos aplicats al gir dels diners, cap transacció financera o amb ús de diners hauria de ser vàlida sense estar degudament registrada en els organismes que la societat determini, donant mort als paradisos fiscals, i als sistemes impositius basats en el consum, els salaris i les pensions.

Les trucades cripto-monedes són una demostració que la societat està en una etapa on és totalment possible ajudar a la predominança de la manera de producció capitalista a morir en pau. Això és el que Mujica va insinuar al setembre del 2013 a l’ONU. És, a més, allò que expressem en carta –desembre del 2008– al llavors president electe Obama i sobre la qual no hem tingut mai resposta. El nostre objectiu era i és deixar plantejat al més alt nivell possible, per obrir el debat, el programa necessari a aquesta etapa.

No obstant això, cal prestar atenció a l’enorme desprotecció en què viu la societat davant el tipus de maniobres com la que descrivim a l’inici d’aquesta nota. I enfront de les quals ja existeixen mesures necessàries i imprescindibles que s’han de prendre a nivell universal, per què hem vingut advocant, i precisament va insinuar Mujica a l’ONU. A la modèstia del nostre coneixements potser podrem dir com es va dir alguna vegada: «e pour es mouve».

També a manera d’autocrítica:

Ja fa uns quants anys que venim escrivint sobre els bitcoin. Advertíem sobre els perills, i alhora ens entusiasmava més l’ús dels avenços tecnològics. Avui quan aquests avenços són fàcilment utilitzables, comença tot l’ús amb fins d’estafa que es fa amb els mateixos, i el perill que això significa. Les finalitats especulatius es multipliquen i els desequilibris també. Avui comprenem que això pesa més que els propis avenços que per a la societat són irrenunciables en la mesura que pugui fer del seu control un avenç. La societat ha d’imposar el seu control democràtic sobre l’economia. Aquesta és avui la tasca inajornable.

Jorge Aniceto Molinari.
Montevideo. Dissabte, 23 de desembre del 2017.

[:]

[:es]Vale, es bueno, recordar.[:ca]D’acord, és bo, recordar.[:]

[:es]

Vale, es bueno, recordar.

(Abordando eso gris, que parece la teoría).

José Mujica y Tabaré Vázquez.Cuando se proyectan los presupuestos para salud, para la enseñanza, para la seguridad social, para la vivienda, para el cuidado del medio ambiente… en cada uno de los Estados en los que se divide el planeta, se percibe en perspectiva la magnitud de la crisis que vive la humanidad.

Estamos hablando de un mundo cuya economía tomada globalmente sigue creciendo y fracturándose en lo social, particularmente por el crecimiento del nuevo centro que para su desarrollo han tomado los conglomerados empresariales multinacionales sin apartarse un ápice de sus disputas por la tasa de ganancia (nos referimos a China). No podrían hacerlo, es su esencia, lo que Marx llamaba la realización de la plusvalía.

Pero el avance ideológico, el necesario debate para resolverla está estancado, o al menos no afloran las posibles salidas. Es bueno entonces recordar lo que escribíamos en setiembre del 2005, a pocos meses en el Uruguay del primer gobierno del Dr. Tabaré Vázquez, cuando uno de sus ministros, manifestaba su intención de renunciar:

¿El Pepe se va?

De Mujica a Grompone ¿cuántas leguas quedarán?

Nadie puede poner en duda la capacidad de Búsqueda y en particular de Danilo Arbilla (ex dirigente bancario –rimenber Lista 55) en poner los centros de por donde pasa el acontecer político, y con ello dar su mensaje ideológico. Así ocurrió en dictadura, así ocurre ahora en democracia.

Las notas tanto al Ministro José Mujica como al Ing. Juan Grompone, no vinculadas periodísticamente entre sí, tienen mucho que ver con lo que hoy está pasando en el país.

Dice Mujica: Ganó una concepción ideológica. Me está ganando Harvard, que es tan dogmática como Moscú. Más que Astori es el astorismo. Acá hay dogmatismo de derecha y dogmatismo de izquierda, hay dogmatismo en los dos lados.

¿Y en que ganó Harvard?, ¿en la propiedad de la tierra?, ¿en imponer las recetas de los organismos financieros internacionales?, Harvard ganó en el libre ingreso de mercaderías, incluso en el ingreso de productos competitivos con los nuestros o los de nuestra región. Esta es la batalla perdida por el Ministro que nos puede dejar sin su concurso.

Lo que nos tendría que explicar el Ministro es si esta batalla está emparentada con la otra, la de la propiedad de la tierra, la de la organización de toda la producción, porque el Uruguay tiene un millón de pobres, una dependencia cada vez mayor con el mercado mundial.

Nosotros estamos con el Ministro Mujica, en esta batalla, pero siempre y cuando nos lleve a la otra batalla, a la de la organización de la economía en beneficio de la gente, porque lo que él llama astorismo es el navegar con las coordenadas que hoy mandan en el mundo, con la prolijidad de un gobierno progresista sí, pero con coordenadas contradictorias con nuestros sueños.

Los ministros Astori y Mujica son necesarios en el gobierno, en tanto no podamos incidir en el cambio de esa realidad, pero alguien tiene que decir que otro mundo es posible. Y eso es lo que no se está haciendo. Con el agravante de que los cambios por los que se brega toda la vida solo son posibles en los momentos más cruciales de las crisis, y ello requiere una apertura de cabeza que hoy existe muy limitadamente.

El gobierno camina a pasos acelerados a una diferenciación social cada vez más pronunciada, ese es el resultado de las recetas que hoy increíblemente también intranquilizan a Harvard, el plan de emergencia social, necesario e insuficiente no remedia esta tendencia de la economía, es una tendencia empresarial que predomina inexorablemente en el mundo.

Empresas con cargos gerenciales muy bien remunerados y una masa inestable de asalariados cuanto más tercerizados e informales mejor para esta política. Esto no quiere decir que también a nivel gerencial no se tercerice (las asesorías famosas), Mujica da la batalla con un sector muy importante y muy golpeado, pero muy pequeño en su tamaño económico frente a la realidad empresarial actual.

Por otro lado Grompone confronta con el planteo del Cr. Enrique Iglesias que ató el crecimiento económico de Uruguay a la posibilidad de que aproveche sus recursos naturales, ante las enormes posibilidades que genera el mercado asiático. Dijo Iglesias, que el país tiene una especial dotación de recursos naturales sobre todo aquellos que provienen de la base agraria. Grompone por el contrario llamó el dilema básico para el futuro uruguayo: la agropecuaria o la tecnología.

El Ministro Mujica habla a nombre de su gente que tiene que perdurar en una realidad económica adversa, más allá de las previsiones hechas a medida de las grandilocuentes conferencias internacionales del Cr. Enrique Iglesias. El ministro siente a la gente que va quedando a la vera del camino.

Grompone habla en nombre de los jóvenes que quieren abrirse paso, y augura un mundo tecnológico irrebatible desde el punto de vista pragmático de lo que está sucediendo hoy en el mundo. Pero es un terreno para pocos que se destaquen y sean reconocidos por las multinacionales o los contratistas de las multinacionales, es un mundo para pocos, para los pocos que puedan acceder a la accesocracia.

El tema es que necesitamos de Mujica, de Astori, de Iglesias y de Grompone entre otros, para romper el círculo vicioso a donde nos conduce el capitalismo actual. Y la realidad es tan cruda que no admite bolazos.

Mujica sabe que no puede delinearse en el país una política distinta a la diseñada por Astori y su equipo, más allá de errores de concepto en aspectos si se quiere menores aun cuando en su momento puedan tener graves consecuencias como por ejemplo la política con la Dirección General Impositiva, donde se privilegió la remuneración elitista por sobre la necesidad de instrumentos de la sociedad como la bancarización.

Pero frente a ello se nos podrá decir que no era correcto crear otro frente en las negociaciones con el Fondo.

Nosotros pensamos por el contrario que hay que ir preparando las condiciones políticas para dirigir los dardos hacia el conjunto de la política económica universal.

Fracasos como los del Mercosur eran totalmente previsibles en la medida que los organismos internacionales presionan de mil maneras para que no se produzcan avances como el de la comunidad económica europea. Y hablar de Mercosur sin un sistema impositivo común y una moneda común es no hablar.

Pero tal vez lo más grave es que unos y otros piensan en un sistema capitalista sin grandes convulsiones, y nosotros por el contrario vaticinamos una crisis superior a la 1929, y para la cual hay que preparar medidas de transición.

Aterra la pasividad del gobierno y de las fuerzas políticas ante el derrumbe monetario, y que no salgan de las expresiones de atraso cambiario o su reverso la inflación en dólares. Yo no les pido que se acuerden de Marx, sería demasiado pero por lo menos que alguien se preocupe por las opiniones de Keynes al finalizar la segunda guerra mundial de que era necesaria una única moneda universal.

Es muy posible que una vez desatada la crisis, el tema este en debate.

Para hacer lo que plantea Mujica, o para hacer lo que plantea Grompone, los reparos de Astori necesariamente van a ser los recursos. Y los recursos provienen de los impuestos, en una realidad de un millón de pobres y del 40% de informalismo. ¿Pero es que Uruguay puede cambiar su sistema impositivo, sin que el tema este debatido en el centro mismo del sistema económico mundial?. Jeremy Rifkin dice que el capitalismo es cada vez más un juego para pocos, Stiglitz analiza como las capas superiores del capitalismo, sus cuerpos gerenciales se van comiendo a las capas inferiores, pero todos son contestes en que es necesario un cambio.

Jueves, 28 de setiembre de 2005.

Mi comentario.

Jorge Aniceto Molinari.Han transcurrido 12 años, y más allá de los ajustes y desajustes que impone el tiempo, hoy podríamos escribir prácticamente lo mismo, salvo que hemos pasado por la Presidencia de José Mujica y de su discurso en la ONU, que como en el film de Marcelo Mastroiani: de eso no se habla.

Jorge Aniceto Molinari.
Montevideo. Sábado, 25 de noviembre de 2017.

[:ca]

D’acord, és bo, recordar.

(Abordant això gris, que sembla la teoria).

José Mujica i Tabaré Vázquez.Quan es projecten els pressupostos per salut, per a l’ensenyament, per a la seguretat social, per a l’habitatge, per a la cura del medi ambient… en cadascun dels estats en què es divideix el planeta, es percep en perspectiva la magnitud de la crisi que viu la humanitat.

Estem parlant d’un món amb una economia presa globalment que segueix creixent i es fractura en allò social, particularment pel creixement del nou centre que per a desenvolupar han pres els conglomerats empresarials multinacionals sense apartar-se una mica de les seves disputes per la taxa de guany (ens referim a la Xina). No podrien fer-ho, és la seva essència, el que Marx anomenava la realització de la plusvàlua.

Però l’avenç ideològic, el necessari debat per resoldre-la està estancat, o almenys no afloren les possibles sortides. És bo llavors recordar allò que escrivíem al setembre del 2005, a pocs mesos en l’Uruguai del primer govern del Dr. Tabaré Vázquez, quan un dels seus ministres, manifestava la seva intenció de renunciar:

El Pepe se’n va?

De Mujica a Grompone quantes llegües quedaran?

Ningú no pot posar en dubte la capacitat de Recerca i en particular de Danilo Arbilla (exdirigent bancari -rimenber Llista 55) a posar els centres de per on passa l’esdevenir polític, i amb això donar el seu missatge ideològic. Així va passar en la dictadura, així passa ara en democràcia.

Les notes tant al ministre José Mujica com a l’Ing. Joan Grompone, no vinculades periodísticament entre si, tenen molt a veure amb allò que avui està passant al país.

Diu Mujica: Va guanyar una concepció ideològica. M’està guanyant Harvard, que és tan dogmàtica com Moscou. Més que Astori és l’astorisme. Aquí hi ha dogmatisme de dreta i dogmatisme d’esquerra, hi ha dogmatisme en els dos costats.

¿I en què va guanyar Harvard?, en la propietat de la terra?, en imposar les receptes dels organismes financers internacionals?, Harvard va guanyar en el lliure ingrés de mercaderies, fins i tot en l’ingrés de productes competitius amb els nostres o els de la nostra regió. Aquesta és la batalla perduda pel Ministre que ens pot deixar sense el seu concurs.

Allò que ens hauria d’explicar el ministre és si aquesta batalla està emparentada amb l’altra, la de la propietat de la terra, la de l’organització de tota la producció, perquè l’Uruguai té un milió de pobres, una dependència cada cop més gran amb el mercat mundial.

Nosaltres estem amb el ministre Mujica, en aquesta batalla, però sempre que ens porti a l’altra batalla, a la de l’organització de l’economia en benefici de la gent, perquè el que ell anomena astorisme és el navegar amb les coordenades que avui manen al món, amb la prolixitat d’un govern progressista sí, però amb coordenades contradictòries amb els nostres somnis.

Els ministres Astori i Mujica són necessaris en el govern, fins que no puguem incidir en el canvi d’aquesta realitat, però algú ha de dir que un altre món és possible. I això és el que no s’està fent. Amb l’agreujant que els canvis pels quals es brega tota la vida només són possibles en els moments més crucials de les crisis, i això requereix una obertura de cap que avui existeix molt limitadament.

El govern camina a passos accelerats cap a una diferenciació social cada cop més pronunciada, aquest és el resultat de les receptes que avui increïblement també intranquil·litzen a Harvard, el pla d’emergència social, necessari i insuficient no posa remei aquesta tendència de l’economia, és una tendència empresarial que predomina inexorablement al món.

Empreses amb càrrecs gerencials molt ben remunerats i una massa inestable d’assalariats com més terceritzats i informals millor per aquesta política. Això no vol dir que també a nivell gerencial no terceritzi (les assessories famoses), Mujica dóna la batalla amb un sector molt important i molt copejat, però molt petit en la seva grandària econòmic enfront de la realitat empresarial actual.

D’altra banda Grompone confronta amb el plantejament del Cr. Enrique Iglesias que va lligar el creixement econòmic d’Uruguai a la possibilitat que aprofiti els seus recursos naturals, davant les enormes possibilitats que genera el mercat asiàtic. Va dir Iglesias, que el país té una especial dotació de recursos naturals sobretot aquells que provenen de la base agrària. Grompone per contra va cridar el dilema bàsic per al futur uruguaià: l’agropecuària o la tecnologia.

El ministre Mujica parla en nom de la seva gent que ha de perdurar en una realitat econòmica adversa, més enllà de les previsions fetes a mida de les grandiloqüents conferències internacionals del Cr. Enrique Iglesias. El ministre sent a la gent que va quedant a la vora del camí.

Grompone parla en nom dels joves que volen obrir-se pas, i augura un món tecnològic irrebatible des del punt de vista pragmàtic del que està succeint avui al món. Però és un terreny per pocs que es destaquin i siguin reconeguts per les multinacionals o els contractistes de les multinacionals, és un món per a pocs, per als pocs que puguin accedir a la accesocràcia.

El tema és que necessitem de Mujica, d’Astori, d’Iglesias i de Grompone entre d’altres, per trencar el cercle viciós a on ens condueix el capitalisme actual. I la realitat és tan crua que no admet tonteries.

Mujica sap que no pot dissenyar al país una política diferent de la dissenyada per Astori i el seu equip, més enllà d’errades de concepte en aspectes si es vol menors tot i que en el seu moment puguin tenir greus conseqüències com ara la política amb la Direcció general Impositiva, on es va privilegiar la remuneració elitista per sobre la necessitat d’instruments de la societat com la bancarització.

Però enfront d’això se’ns podrà dir que no era correcte crear un altre front en les negociacions amb el Fons.

Nosaltres pensem per contra que cal anar preparant les condicions polítiques per dirigir els dards cap al conjunt de la política econòmica universal.

Fracassos com els del Mercosur eren totalment previsibles en la mesura que els organismes internacionals pressionen de mil maneres perquè no es produeixin avenços com el de la Comunitat Econòmica Europea. I parlar de Mercosur sense un sistema impositiu comú i una moneda comuna és no parlar.

Però potser allò més greu és que uns i altres pensen en un sistema capitalista sense grans convulsions, i nosaltres per contra vaticinem una crisi superior a la de 1929, i per a la qual cal preparar mesures de transició.

Aterra la passivitat del govern i de les forces polítiques davant l’ensorrament monetari, i que no surtin de les expressions d’endarreriment canviari o el seu revers la inflació en dòlars. Jo no els demano que es recordin de Marx, seria massa però almenys que algú es preocupi per les opinions de Keynes al final de la segona guerra mundial que era necessària una única moneda universal.

És molt possible que un cop deslliurada la crisi, el tema aquest es debateixi.

Per fer allò que planteja Mujica, o per fer allò que planteja Grompone, les objeccions d’Astori necessàriament seran els recursos. I els recursos provenen dels impostos, en una realitat d’un milió de pobres i el 40% de mercat negre. ¿Però és que Uruguai pot canviar el seu sistema impositiu, sense que el tema aquest sigui debatut en el centre mateix del sistema econòmic mundial?. Jeremy Rifkin diu que el capitalisme és cada cop més un joc per a pocs, Stiglitz analitza com les capes superiors del capitalisme, els seus cossos gerencials es van menjant a les capes inferiors, però tots són contestacions en que cal un canvi.

Dijous, 28 de setembre del 2005.

El meu comentari.

Jorge Aniceto Molinari.Han transcorregut 12 anys, i més enllà dels ajustos i desajustos que imposa el temps, avui podríem escriure pràcticament el mateix, llevat que hem passat per la Presidència de José Mujica i del seu discurs a l’ONU, que com en el film de Marcelo Mastroiani: d’això no se’n parla.

Jorge Aniceto Molinari.
Montevideo. Dissabte, 25 novembre de 2017.

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[:es]Después de la guerra de Corea.[:ca]Després de la guerra de Corea.[:]

[:es]

Después de la guerra de Corea.

(Abordando eso gris, que parece la teoría).

Cuando veo o escucho noticias sobre Corea del Norte me queda como un sabor amargo, porque se informa condenando lo que allí sucede y sin ninguna explicación de porqué sucede, quedando la conclusión entonces de que la culpa es de los comunistas y de qué comunistas.

Entonces nada mejor que recurrir a una opinión acreditada y, luego sí, nuestro comentario:

Palabras de Ernesto Guevara sobre su visita a Corea en 1960.

El Che Guevara en Corea del Norte.«De los países socialistas que visitamos personalmente, Corea es uno de los más extraordinarios. Quizás es el que nos impresionara más de todos ellos. Tiene solamente diez millones de habitantes y tiene el tamaño de Cuba, poquito menos, unos ciento diez mil kilómetros cuadrados. La misma extensión territorial que la parte sur de Corea, pero la mitad de habitantes, fue asolado por una guerra tan fantásticamente destructiva que de sus ciudades no quedó nada, y cuando uno dice nada, es nada. Es como los pequeños poblados de guano que Merob Sosa y Sánchez Mosquera y esa gente quemaba aquí, y de los cuales no quedaban nada más que cenizas. Así quedó, por ejemplo, Pyonyang, que es una ciudad de un millón de habitantes. Hoy no se ve un solo resto de toda aquella destrucción, todo es nuevo. El único recuerdo que queda es, en todos los caminos, en todas las carreteras, y en todas las vías férreas, los huecos de las bombas que caían unas al lado de otras.

Ellos me mostraron muchas de las fábricas, todas ellas reconstruidas y otras hechas nuevas, y cada fábrica de esas había soportado entre 30 y 50 mil bombas. Si nosotros nos hacemos una idea de lo que eran 10 ó 12 bombas tiradas alrededor nuestro en la Sierra, que significaba un bombardeo terrible, y había que tener su dosis de valor para aguantar esas bombas, ¡lo que significaban 30 mil bombas tiradas en un espacio de tierra, a veces menor que una caballería!

Corea del Norte salió de la guerra sin una industria en pie, sin una casa en pie, hasta sin animales. En una época en que la superioridad aérea de los norteamericanos era tan grande, y ya no tenía qué cosa destruir, los aviadores se divertían matando bueyes, matando lo que encontraban. Era, pues, una verdadera orgía de muerte lo que se cernió sobre Corea del Norte durante dos años solamente. En el tercer año aparecieron los Mig-15 y ya la cosa cambió. Pero esos dos años de guerra significaron, quizás, la destrucción sistemática más bárbara que se ha hecho.

Todo lo que se pueda contar de Corea parece mentira. Por ejemplo, en las fotografías se ven gentes con el odio, ese odio de los pueblos cuando llega a la parte más profunda del ser, que se ve en las fotos de cuevas donde se meten 200, 300 y 400 niños, de una edad de 3 ó 4 años, se asesinan allí con fuego y otras veces con gas. Los descuartizamientos de las gentes, matar a mujeres embarazadas a bayonetazos para hacerle salir el hijo de las entrañas, quemar heridos con lanzallamas… Las cosas más inhumanas que pueda imaginar la mente fueron realizadas por el ejército norteamericano de ocupación. Y llegó casi hasta el confín de Corea con China, y ocupó, en un momento dado, casi todo el país. Sumado a eso que en la retirada lo destruían todo, podemos decir que Corea del Norte es un país que se hizo de muertes. Naturalmente, recibió la ayuda de los países socialistas, sobre todo la ayuda de la Unión Soviética, en una forma generosa y amplísima.

Pero lo que más impresiona es el espíritu de ese pueblo. Es un pueblo que salió de todo esto tras una dominación japonesa de treinta años, de una lucha violenta contra la dominación japonesa, sin tener siquiera un alfabeto. Es decir, que era de los pueblos más atrasados del mundo en ese sentido. Hoy tiene una literatura y una cultura nacionales, y un orden nacional y un desarrollo ilimitado, prácticamente, de la cultura. Tienen enseñanza secundaria, que allá es hasta el noveno grado, obligatoria para todo el mundo.

Tiene en toda la industria el problema que ojalá nosotros tuviéramos hoy –que tendremos dentro de 2 o 3 años–, que es el problema de la falta de mano de obra. Corea está mecanizando aceleradamente toda la agricultura para lograr mano de obra y poder realizar sus planes, y también está preparándose para llevar a los hermanos de Corea del Sur el producto de fábricas de tejidos y otras, para ayudarlos a sobrellevar el peso de la dominación colonial norteamericana.

Es, realmente, el ejemplo de un país que gracias a un sistema y a dirigentes extraordinarios, como es el mariscal Kim II Sung, ha podido salir de las desgracias más grandes para ser hoy un país industrializado. Corea del Norte podría ser para cualquiera aquí en Cuba, el símbolo de uno de los tantos países atrasados del Asia. Sin embargo, nosotros le vendemos un azúcar semielaborado como es el azúcar crudo, y otros productos aún sin elaborar, como es el henequén, y ellos nos venden tornos fresadores, toda clase de maquinaria, maquinaria de minas, es decir, productos que necesitan una alta capacidad técnica para producirlos. Por eso es uno de los países que nos entusiasma más».

Nuestro comentario:

Jorge Aniceto Molinari.Corea del Norte es el resultado de una de las tantas derrotas puntuales del Imperialismo Yanqui, cuando aún lo era, hoy ya no es más que el principal Estado gendarme al servicio del accionar de los complejos empresariales multinacionales y no por eso menos peligroso para la paz mundial.

Ese accionar destructivo, canallesco aplicado en la guerra, originó como reacción la acción heroica de un pueblo, y la construcción que observaba «El Che».

Que la reacción ha llevado a la construcción de un Estado al estilo stalinista, también está de alguna manera explicado en la nota que comentamos.

Era lo que el capitalismo provocaba y a la vez estimulaba cuando aún se sentía seguro en el desarrollo de sus propias fuerzas territoriales.

Se sentía a gusto en el desarrollo de la llamada «guerra fría».

Pero así como en los siglos 18 y 19 necesitó construir un nuevo centro desplazándolo del Reino Unido (el principal) a EE.UU., el inexorable agostamiento de la tasa general de ganancia lo lleva a crear un nuevo centro, lo que actualmente comienza a generarse en China, en la China gobernada por un Partido Comunista (por aquello de las paradojas, que lo son en tanto no tienen una explicación).

Y ahora ¿por qué Corea del Norte parecería ser la única que no se asocia a esta perspectiva, hoy comandada por China?

Para nosotros la explicación que los medios informativos que están al servicio de las multinacionales expresan, de que es la responsabilidad de su gobierno, es una verdad a medias.

La existencia de este conflicto y su permanencia es una necesidad de la industria de guerra, una vorágine hacia el vacío que debe preocupar a todos.

Lo que más preocupa es la falta de este tipo de análisis, que como excepción intentó insinuar Mujica1 en la ONU en setiembre del 2013. ¿Es que todos estamos embarcados en una nave sin piloto y sin control remoto?: que es la distancia entre la consciencia y la inconsciencia.

Jorge Aniceto Molinari.
Montevideo, 15 de noviembre de 2017.


Nota:

1He insistido en que más allá de los errores y horrores que han acompañado a su gestión, lo que dijo en la ONU es el camino correcto, también en algún momento daremos una opinión más, de porqué las cosas son así, donde hay una generalidad de opiniones sobre este hecho, unánimes en ignorarlo.

[:ca]

Després de la guerra de Corea.

(Abordant això gris, que sembla la teoria).

Quan veig o escolto notícies sobre Corea del Nord em queda com un sabor amarg, perquè s’informa condemnant el que hi passa i sense cap explicació de perquè passa, i la conclusió llavors que la culpa és dels comunistes i de quins comunistes.

Llavors res millor que recórrer a una opinió acreditada i, després sí, el nostre comentari:

Paraules d’Ernesto Guevara sobre la seva visita a Corea el 1960.

El Che Guevara a Corea del Nord.«Dels països socialistes que vam visitar personalment, Corea és un dels més extraordinaris. Potser és el que ens impressiona més de tots ells. Té només deu milions d’habitants i té la mida de Cuba, una miqueta menys, uns cent deu mil quilòmetres quadrats. La mateixa extensió territorial que la part sud de Corea, però la meitat d’habitants, va ser assolada per una guerra tan fantàsticament destructiva que de les seves ciutats no va quedar res, i quan hom diu res, és res. És com els petits poblats de guano que Merob Sosa i Sánchez Mosquera i aquesta gent cremava aquí, i dels quals no quedaven res més que cendres. Així va quedar, per exemple, Pyonyang, que és una ciutat d’un milió d’habitants. Avui no es veu un sola resta de tota aquella destrucció, tot és nou. L’únic record que queda és, en tots els camins, en totes les carreteres, i en totes les vies fèrries, els buits de les bombes que queien unes al costat d’altres.

Ells em van mostrar moltes de les fàbriques, totes elles reconstruïdes i altres fetes noves, i cada fàbrica d’aquestes havia suportat entre 30 i 50 mil bombes. Si nosaltres ens fem una idea del que eren 10 o 12 bombes tirades al voltant nostre a la Serra, que significava un bombardeig terrible, i calia tenir la seva dosi de valor per aguantar aquestes bombes, ¡què significaven 30 mil bombes tirades en un espai de terra, sovint menor que una cavalleria!

Corea del Nord va sortir de la guerra sense una indústria en peu, sense una casa en peu, fins i tot sense animals. En una època en què la superioritat aèria dels nord-americans era tan gran, i ja no tenia cap cosa per destruir, els aviadors es divertien matant bous, matant allò que trobaven. Era, doncs, una veritable orgia de mort allò que va planar sobre Corea del Nord durant dos anys només. En el tercer any van aparèixer els Mig-15 i ja la cosa va canviar. Però aquests dos anys de guerra van significar, potser, la destrucció sistemàtica més bàrbara que s’hagi fet.

Tot el que es pugui comptar de Corea sembla mentida. Per exemple, en les fotografies es veuen gents amb l’odi, aquest odi dels pobles quan arriba a la part més profunda de l’ésser, que es veu en les fotos de coves on es fiquen 200, 300 i 400 nens, d’una edat de 3 o 4 anys, s’assassinen allà amb foc i altres cops amb gas. Els esquarteraments de les gents, matar dones embarassades a cops de baioneta per fer-li sortir el fill de les entranyes, cremar ferits amb llançaflames… Les coses més inhumanes que pugui imaginar la ment van ser realitzades per l’exèrcit nord-americà d’ocupació. I va arribar gairebé a l’altre cap de Corea amb la Xina, i va ocupar, en un moment donat, gairebé tot el país. Sumat a això que en la retirada ho destruïen tot, podem dir que Corea del Nord és un país que es va fer a base de morts. Naturalment, va rebre l’ajut dels països socialistes, sobretot l’ajut de la Unió Soviètica, en una forma generosa i amplíssima.

Però allò que més impressiona és l’esperit d’aquest poble. És un poble que va sortir de tot això després d’una dominació japonesa de trenta anys, d’una lluita violenta contra la dominació japonesa, sense tenir si més no un alfabet. És a dir, que era un dels pobles més endarrerits del món en aquest sentit. Avui té una literatura i una cultura nacionals, i un ordre nacional i un desenvolupament il·limitat, pràcticament, de la cultura. Tenen ensenyament secundari, que allà és fins al novè grau, obligatori per a tothom.

Té en tota la indústria el problema que tant de bo nosaltres tinguéssim avui –que tindrem d’aquí a 2 o 3 anys–, que és el problema de la manca de mà d’obra. Corea està mecanitzant acceleradament tota la pagesia per aconseguir mà d’obra i poder realitzar els seus plans, i també està preparant-se per portar als germans de Corea del Sud el producte de fàbriques de teixits i d’altres, per ajudar-los a suportar el pes de la dominació colonial nord-americana.

És, realment, l’exemple d’un país que gràcies a un sistema i dirigents extraordinaris, com és el mariscal Kim II Sung, ha pogut sortir de les desgràcies més grans per a ser avui un país industrialitzat. Corea del Nord podria ser per a qualsevol aquí a Cuba, el símbol d’un dels tants països endarrerits de l’Àsia. No obstant això, nosaltres li venem un sucre semielaborat com és el sucre cru, i altres productes encara sense elaborar, com és el henequén, i ells ens venen torns fresadores, tota classe de maquinària, maquinària de mines, és a dir, productes que necessiten d’una alta capacitat tècnica per produir-los. Per això és un dels països que ens entusiasma més».

El nostre comentari:

Jorge Aniceto Molinari.Corea del Nord és el resultat d’una de les tantes derrotes puntuals de l’Imperialisme Ianqui, quan encara ho era. Avui ja no és més que el principal Estat gendarme al servei de l’accionar dels complexos empresarials multinacionals i no per això menys perillós per a la pau mundial.

Aquest accionar destructiu, canallesc aplicat a la guerra, va originar com a reacció l’acció heroica d’un poble, i la construcció que observava «El Che».

Que la reacció ha portat a la construcció d’un Estat a l’estil stalinista, també està d’alguna manera explicat dins la nota que comentem.

Era allò que el capitalisme provocava i alhora estimulava quan encara se sentia segur en el desenvolupament de les seves pròpies forces territorials.

Es sentia a gust en el desenvolupament de l’anomenada «guerra freda».

Però així com en els segles 18 i 19 va necessitar construir un nou centre desplaçant del Regne Unit (el principal) a EUA, l’inexorable esgotament de la taxa general de guany el porta a crear un nou centre, allò que actualment comença a generar a la Xina, a la Xina governada per un Partit Comunista (per allò de les paradoxes, que ho són en tant no tenen una explicació).

I ara, per què Corea del Nord semblaria ser l’única que no s’associa a aquesta perspectiva, avui comandada per la Xina?

Per a nosaltres, l’explicació que els mitjans informatius que estan al servei de les multinacionals expressen, que és la responsabilitat del seu govern, és una veritat a mitges.

L’existència d’aquest conflicte i la seva permanència és una necessitat de la indústria de guerra, una voràgine cap al buit que ens ha de preocupar a tots.

El que més preocupa és la manca d’aquest tipus d’anàlisi, que com a excepció intentar insinuar Mújica1 a l’ONU al setembre del 2013. És que tots estem embarcats en una nau sense pilot i sense control remot?: que és la distància entre la consciència i la inconsciència.

Jorge Aniceto Molinari.
Montevideo, 15 de novembre del 2017.


Nota:

1He insistit que més enllà de les errades i horrors que han acompanyat a la seva gestió, allò que va dir a l’ONU és el camí correcte, també en algun moment donarem una opinió més, del perquè les coses són així, on hi ha una generalitat d’opinions sobre aquest fet, unànimes en ignorar-lo.

[:]

[:es]Trabajo, quiero trabajo…[:ca]Treball, vull treball…[:]

[:es]

Trabajo, quiero trabajo…

(Abordando eso gris, que parece la teoría).

Persona pidiendo trabajo.Hacia donde uno mire en el mundo, hay mucho trabajo para hacer, pero para hacerlo en la predominancia del actual modo de producción capitalista necesita que sea «rentable».

Si además el trabajo hoy existente dentro de los marcos predominantes, va conociendo que un formidable desarrollo tecnológico lo va eliminando, nos podría generar una sensación de problema universal insoluble, con todo lo que ello implica en el Presupuesto General de la naciones y en los sistemas de la salud, enseñanza, seguridad y previsión social e inda mais.

La derecha, derecha: fascista, cada vez piensa más en la guerra, más allá de lo que presupuestalmente supone la industria de guerra como instrumento de reactivación de la economía, como si en última instancia el suicidio fuera una solución a los intensos dolores que padece la sociedad.

Esto es lo que puso de manifiesto en la ONU el entonces Presidente Mujica, en setiembre del 2013 insinuando posible salidas en dos herramientas que consideramos fundamentales para un cambio de progreso en la humanidad: la moneda y los impuestos.

Era además lo que expresábamos al entonces Presidente electo Obama en carta de fecha 11 de diciembre del 2008, a través del Instituto Uruguay-EE.UU. y para la que nunca tuvimos respuesta y en la que nos reafirmamos en su contenido.

El tema no ha sido retomado a ese nivel, y sigue pendiente y agravándose.

La humanidad hasta ahora conoce muy poco de organizar el trabajo de otra forma, pues organizado desde el Estado, no deja de primar la relación laboral a través del salario, con las implicancias burocráticas que ello supone, salvo y son excepciones muy importantes, en las campañas impulsadas por la revoluciones socialistas en materia de salud y enseñanza, pero a la larga y con el transcurso del tiempo también estas relaciones sienten la presión de la organización económica del modo de producción capitalista, que la economía estatizada no logra cambiar, aún con la militancia política que con inmenso esfuerzo se asigna a los objetivos de mantener y desarrollar su finalidad humana y Cuba es un ejemplo formidable para el mundo.

No cabe duda de que el trabajo asalariado y el modo de producción capitalista no van a desaparecer por decreto, como también así ha ocurrido con los modos de producción anteriores, ellos están incorporados a lo que es el funcionamiento del aparato económico de la humanidad y existirán aún por muchos años como una necesidad de la propia sociedad, hasta su superación.

Lo que estamos analizando es que todos los indicadores muestran claramente que el agostamiento de la tasa general de ganancia conduce inexorablemente a una parálisis de la economía mundial (hecho gradual y discontinuo) por la existencia de una enormidad de capitales que en las actuales circunstancias deben pelear duramente para obtener rentabilidad, y en esa pelea aflora lo peor que el ser humano ha desarrollado en su curso civilizatorio. No es lo mismo Trump que el referéndum catalán, pero en uno de sus motores está este problema.

Ahora sí, afirmamos que las estatizaciones (no las descartamos cuando resultan coyunturalmente necesarias) y el desarrollo burocrático de la actividad económica conducen a un callejón sin salidas (aunque haya durado 75 años como en el caso de la Unión Soviética y haya ayudado a otros procesos similares en el mundo), estamos aseverando que es necesario disponer universalmente de recursos para planificar un desarrollo económico que parta no de la rentabilidad capitalista sino de las necesidades humanas. Parta no de la asignación burocrática de recursos, sino de una asignación superior de los mismos. ¿Ello es posible?: nosotros pensamos que sí.

Días pasados escribíamos de que ya es posible con los adelantos tecnológicos actuales tener a entera disposición la historia clínica digital de todos los seres humanos que poblamos el planeta, con el agregado de que ya existen exámenes sencillos que permiten determinar en cada ser humano la propensión de su relación con prácticamente todas las posibles enfermedades, lo que permite ahorrar en medicamentos y prácticas muy costosas que hoy hacen a esa industria. Lo que no quiere decir que haya voluntad política para hacerlo.

¿Qué podría pasar entonces en esta materia con los organismos que hoy existen a nivel mundial y que prácticamente tienen las manos atadas cuando de tocar intereses privados se trata? Podrían planificar el cuidado de la salud de toda de la humanidad: los medios ya existen.

Por eso no es menor que se disponga de una unidad monetaria universal, y que los impuestos con los que se atienden las necesidades presupuestales importantes de los Estados ya no provengan de los impuestos al consumo, a los salarios y a las pensiones, sino sobre el movimiento de dinero, haciendo que este movimiento para ser legal y reconocido deba ser registrado por un procedimiento que la sociedad determine. Estaríamos en inmejorable situación para dar muerte a los paraísos fiscales y todas las lacras que ellos conllevan.

Imaginemos (siempre es muy bueno imaginar) por un instante, que planificamos la desaparición de un determinado desierto, y en él construimos una sociedad sustentable con los adelantos hoy existentes, en la que puedan convivir seres humanos provenientes de los más diversos orígenes, a los cuales se le ha provisto de todos los elementos para su desarrollo educacional, incluido fundamentalmente el que le permita aportar su trabajo.

En esta tarea y bajo el control de los organismos que la sociedad determine podrían desarrollar su actividad empresas «privadas» u organizadas socialmente, que teniendo en cuenta la necesidad de su tamaño económico pudiera aportar en forma conveniente «rentabilidad y eficiencia». ¿Por qué hacemos hincapié en mencionar a las empresas privadas?: porque entendemos que no debemos dejar de lado nada de lo que hoy está organizado y permite la conservación y desarrollo del aparato productivo que la sociedad se ha venido dando.

A 100 años del triunfo de la revolución rusa, creemos que éste es el camino con el cual soñaban los revolucionarios y particularmente Lenin. La sociedad organizada en cooperativas y en una planificación que permitiera que su esfuerzo no quedara aprisionado en la estrechez de sus objetivos, de la que hablaban Marx y Engels. Entonces los grandes emprendimientos empresariales multinacionales, a lo que el espacio económico obliga, construidos con ese fin.

¿Qué necesitamos?: voluntad política y comprender que es necesario asegurar la paz, e imponer herramientas que permitan que esto sea posible. La actual situación es insostenible, y además insoportable cuando cada uno de los actores busca salidas para su situación en particular, ignorando que no hay salvación si no es con todos.

¿Se pueden dar señales a nivel de los Estados?: si, sin duda. En el Uruguay el plan Ceibal que puso una computadora a cada niño es un ejemplo. Estamos proponiendo además que hoy se incorpore en forma digital la historia médica de cada uno de los habitantes del país, y a ello la posibilidad de instrumentar en breve plazo exámenes que ahorren miles y miles de pesos en el presupuesto médico y en los equipamientos desmesurados y a la vez insuficientes en el instrumental con el que se asisten las distintas dolencias. La meta de la medicina preventiva y educativa es una meta plenamente alcanzable y sería un crimen con los recursos actuales no aspirar a ella.

En las revoluciones que ha vivido la humanidad, la salud y la enseñanza han sido fundamentales para mostrar una conducta humana en el proceder de los revolucionarios, más aún cuando la presión de la organización de la economía en manos del modo de producción capitalista, pasadas las crisis, han vuelto a hacer de la rentabilidad el índice más notorio para un desarrollo de la sociedad, pero ello está llegando a sus límites, y tenemos que prepararnos para dar el salto que la continuidad de la humanidad exige.

Es cierto también que en nuestra educación el trabajo ha sido considerado como una obligación a asumir, –«ganarás el pan con el sudor de tu frente»–, tal vez porque las cosas ya nos venían dadas, la sociedad en nuestros primeros años de vida tenía pautas que parecían inconmovibles, cosa que hoy no sucede, la crisis actual se extiende y abarca todo.

Entonces son tiempos de replanteos, o mejor aún, de retomar enseñanzas que muestran como el trabajo y las características del mismo son el más potente formador de las características de la sociedad, por eso retomamos el aporte de Federico Engels, cuando analiza el papel del trabajo en el desarrollo de la sociedad.

Ninguno de los problemas sociales hoy existentes tienen solución verdadera sin asumir el tema de la organización del trabajo. Y ese gran tema ya no lo puede resolver en su predominancia el modo de producción capitalista, por eso la necesidad de abordar las tareas de transición que tienen como objetivo entre otros el de organizar la educación para el trabajo de todos y en planificar para que ello suceda.

Jorge Aniceto Molinari.
Montevideo, 30 de setiembre de 2017.

[:ca]

Treball, vull treball…

(Abordant això gris, que sembla la teoria).

Persona demanant feina.Cap a on hom miri en el món, hi ha molta feina per fer, però per fer-la en la predominança de l’actual mode de producció capitalista hom necessita que sigui «rendible».

Si a més el treball avui existent dins dels marcs predominants, va coneixent que un formidable desenvolupament tecnològic el va eliminant, ens podria generar una sensació de problema universal insoluble, amb tot el que això implica en el Pressupost General de la nacions i en els sistemes de la salut, ensenyament, seguretat i previsió social i inda mais.

La dreta, dreta: feixista, cada vegada pensa més en la guerra, més enllà del que pressupostàriament suposa la indústria de guerra com a instrument de reactivació de l’economia, com si en darrera instància el suïcidi fos una solució als intensos dolors que pateix la societat.

Això és el que va posar de manifest a l’ONU el llavors president Mujica, al setembre del 2013 insinuant possible sortides en dues eines que considerem fonamentals per a un canvi de progrés en la humanitat: la moneda i els impostos.

Era a més allò que expressàvem al llavors president electe Obama en carta de data 11 de desembre del 2008, a mitjançant l’Institut Uruguai-EUA. i per a la qual mai vam tenir resposta i en la qual ens reafirmem en el seu contingut.

El tema no ha estat reprès a aquest nivell, i segueix pendent i agreujant-se.

La humanitat fins ara coneix molt poc d’organitzar el treball d’una altra manera, doncs organitzat des de l’Estat, no deixa de primar la relació laboral a mitjançant el salari, amb les implicacions burocràtiques que això suposa, fora de perill i són excepcions molt importants, a les campanyes impulsades per les revolucions socialistes en matèria de salut i ensenyament, però a la llarga i amb el transcurs del temps també aquestes relacions senten la pressió de l’organització econòmica de la manera de producció capitalista, que l’economia estatitzada no aconsegueix canviar, encara amb la militància política que amb immens esforç s’assigna als objectius de mantenir i desenvolupar la seva finalitat humana i Cuba és un exemple formidable per al món.

No hi ha dubte que el treball assalariat i la manera de producció capitalista no desapareixeran per decret, com també així ha passat amb les maneres de producció anteriors, aquests estan incorporats al que és el funcionament de l’aparell econòmic de la humanitat i existiran encara per molts anys com una necessitat de la pròpia societat, fins a la seva superació.

El que estem analitzant és que tots els indicadors mostren clarament que l’esgotament de la taxa general de guany condueix inexorablement a una paràlisi de l’economia mundial (fet gradual i discontinu) per l’existència d’una enormitat de capitals que en les actuals circumstàncies han de lluitar durament per obtenir rendibilitat, i en aquesta baralla aflora el pitjor que l’ésser humà ha desenvolupat en el seu curs civilitzador. No és el mateix Trump que el referèndum català, però en un dels seus motors està aquest problema.

Ara sí, afirmem que les estatitzacions (no les descartem quan resulten conjunturalment necessàries) i el desenvolupament burocràtic de l’activitat econòmica condueixen a un carreró sense sortides (encara que hi hagi durat 75 anys com en el cas de la Unió Soviètica i hagi ajudat a altres processos similars en el món), estem asseverant que cal disposar universalment de recursos per planificar un desenvolupament econòmic que parteixi no de la rendibilitat capitalista sinó de les necessitats humanes. Parteixi no de l’assignació burocràtica de recursos, sinó d’una assignació superior dels mateixos. ¿Això és possible?: nosaltres pensem que si.

Dies passats escrivíem que ja és possible amb els avenços tecnològics actuals tenir a disposició la història clínica digital de tots els éssers humans que poblem el planeta, amb l’agregat que ja existeixen exàmens senzills que permeten determinar en cada ésser humà la propensió de la seva relació amb pràcticament totes les possibles malalties, la qual cosa permet estalviar en medicaments i pràctiques molt costoses que avui es fan en aquesta indústria. La qual cosa no vol dir que hi hagi voluntat política per fer-ho.

Què podria passar llavors en aquesta matèria amb els organismes que avui existeixen a nivell mundial i que pràcticament tenen les mans lligades quan de tocar interessos privats es tracta? Podrien planificar la cura de la salut de tota de la humanitat: els mitjans ja existeixen.

Per això no és menor que es disposi d’una unitat monetària universal, i que els impostos amb els que s’atenen les necessitats pressupostàries importants dels Estats ja no provinguin dels impostos al consum, als salaris i a les pensions, sinó sobre el moviment de diners, fent que aquest moviment per ser legal i reconegut hagi de ser registrat per un procediment que la societat determini. Estaríem en immillorable situació per donar mort als paradisos fiscals i totes les xacres que aquests comporten.

Imaginem (sempre és molt bo imaginar) per un instant, que planifiquem la desaparició d’un determinat desert, i en ell construïm una societat sostenible amb els avenços avui existents, en la qual puguin conviure éssers humans provinents dels més diversos orígens, als quals se li ha proveït de tots els elements per al seu desenvolupament educacional, inclòs fonamentalment el que li permeti aportar el seu treball.

En aquesta tasca i sota el control dels organismes que la societat determini podrien desenvolupar la seva activitat empreses «privades» o organitzades socialment, que tenint en compte la necessitat de la seva mesura econòmica pogués aportar en forma convenient «rendibilitat i eficiència». Per què fem èmfasi en esmentar a les empreses privades?: perquè entenem que no hem de deixar de banda res del que avui està organitzat i permet la conservació i desenvolupament de l’aparell productiu que la societat s’ha vingut donant.

A 100 anys del triomf de la revolució russa, creiem que aquest és el camí amb el qual somiaven els revolucionaris i particularment Lenin. La societat organitzada en cooperatives i en una planificació que permetés que el seu esforç no quedés empresonat en l’estretor dels seus objectius, de la qual parlaven Marx i Engels. Llavors les grans iniciatives empresarials multinacionals, al que l’espai econòmic obliga, construïts amb aquesta finalitat.

Què necessitem?: voluntat política i comprendre que cal assegurar la pau, i imposar eines que permetin que això sigui possible. L’actual situació és insostenible, i més insuportable quan cadascun dels actors busca sortides per a la seva situació en particular, ignorant que no hi ha salvació si no és amb tots.

Es poden donar senyals a nivell dels Estats?: si, sens dubte. A l’Uruguai el pla Ceibal que va posar un ordinador a cada nen és un exemple. Estem proposant a més que avui s’incorpori en forma digital la història mèdica de cada un dels habitants del país, i a això la possibilitat d’instrumentar en breu termini exàmens que estalviïn milers i milers de pesos en el pressupost mèdic i en els equipaments desmesurats i a la vegada insuficients en l’instrumental amb el qual es assisteixen les diferents malalties. L’objectiu de la medicina preventiva i educativa és una meta plenament assolible i seria un crim amb els recursos actuals no aspirar-hi.

En les revolucions que ha viscut la humanitat, la salut i l’ensenyament han estat fonamentals per mostrar una conducta humana en la conducta dels revolucionaris, més encara quan la pressió de l’organització de l’economia en mans de la manera de producció capitalista, passades les crisis, han tornat a fer de la rendibilitat l’índex més notori per a un desenvolupament de la societat, però això està arribant als seus límits, i hem de preparar-nos per fer el salt que la continuïtat de la humanitat exigeix.

És cert també que en la nostra educació el treball ha estat considerat com una obligació a assumir, –«guanyaràs el pa amb la suor del teu front»–, potser perquè les coses ja ens venien donades, la societat en els nostres primers anys de vida tenia pautes que semblaven incommovibles, cosa que avui no passa, la crisi actual s’estén i ho abasta tot.

Llavors són temps de replantejaments, o millor encara, de reprendre ensenyaments que mostren com el treball i les característiques del mateix són el més potent formador de les característiques de la societat, per això reprenem l’aportació de Frederic Engels, quan analitza el paper del treball en el desenvolupament de la societat.

Cap dels problemes socials avui existents tenen solució veritable sense assumir el tema de l’organització del treball. I aquest gran tema ja no el pot resoldre en el seu predominança la manera de producció capitalista, per això la necessitat d’abordar les tasques de transició que tenen com a objectiu entre d’altres el d’organitzar l’educació per al treball de tots i en planificar perquè això succeeixi.

Jorge Aniceto Molinari.
Montevideo, 30 de setembre de 2017.

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