De actualidad.
En mis funciones en el Banco Hipotecario (ingresé en 1961 y egresé en 1999) coincidí en el tiempo en la Institución con los ingresos realizados por Directores del Partido Nacional luego del restablecimiento democrático en 1985 de la Escribana Beatriz Argimón y la Doctora Ana Lía Piñeyrua.
Si bien en mi constante actividad gremial nunca tuve relación con dichas funcionarias me sorprendía la forma en que sus correligionarios blancos (hombres y mujeres) hablaban de ellas y no precisamente en términos elogiosos.
La escribana Argimón siempre me impresionó como dispuesta a la negociación, al diálogo, a intentar puentes y para mí eso era un hecho positivo.
Luego he constatado que en sus funciones políticas en el Partido Nacional ha provocado más reacciones negativas en sus propias filas que en las adversarias.
En el incidente sobre las pasantías en la Intendencia de Colonia, donde el rol fundamental de separar a Moreira lo jugó el Doctor Larrañaga (al que le bastó conocer los hechos para proceder), la condena que algunos blancos hacen a la escribana me parecen fuera de lugar.
Hasta llegar a esto de ahora que no creo llegue a la renuncia, pero es una mancha más que se agrega junto a la del Doctor Da Silveira por ejemplo, que cargan contra una gestión que en el tema de la pandemia viene siendo más que aceptable y en el plano económico no sorprende la Ministro porque se viene moviendo en los mismos parámetros que se movía el Cr. Astori. Sin embargo a nivel del pueblo se comienza a sentir más que antes que los ingresos no dan.
Sin embargo el futuro es preocupante porque además desde el Frente no solo no se hace una autocrítica sino que se pretende hacer normal una falta de programa para abordar la crisis económica de la que el país forma parte en la situación general del propio capitalismo.
Jorge Aniceto Molinari.
Jueves, 25 de Junio de 2020.