[:es]El escándalo en la ideología.[:]

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El escándalo en la ideología.

(Abordando eso gris, que parece la teoría).

Jorge Aniceto Molinari.Si bien hay muchos hechos puntuales en la realidad actual, entendemos de un gran valor volver e insistir sobre aquellos aspectos de la teoría que en su momento significaron y significan de alguna manera, una guía para la formación de generaciones de militantes de la izquierda y de la sociedad toda.

No hay mejor antídoto para el proceso de derechización y fascismo que provoca en la sociedad la crisis actual y la falta de respuestas programáticas frente a ella, que analizar las experiencias que nos da la historia.

La revolución rusa llegó a su cima con la conducción del Partido Bolchevique y el trabajo ideológico formidable, fundamental de Lenin. Ha sido el único Partido en la historia de la humanidad hasta hoy, que se construyó atendiendo a lo que estaba elaborado en textos magistrales que analizando el capitalismo había dado toda una guía para la acción política, y en lo que se destacaban los estudios de Marx y Engels. Lenin no solo que no se apartó un ápice de ellos sino que con un espíritu crítico y a la vez analítico incorporó nuevos elementos que hicieron de su aporte algo fundamental para entender lo que hoy está pasando.

Sus polémicas con Plejanov en la formación del Partido y luego en la tarea de construcción en revolución con Trotsky y Bujarin, son enseñanzas que hoy hay que tener presente. No para tomar como una verdad revelada sino como una guía para aprender a aplicar un método en el accionar social y político.

Lenin fue derrotado en 1924 cuando su intento de separar de la dirección del Partido a Stalin fracasó. La burocracia había dado un golpe y los textos de Lenin sobre estos hechos se conocieron 30 años después.

El capitalismo con sus liderazgos maltrechos salía de la tragedia de la primera guerra mundial y reconstituía sus fuerzas en las que preferían en la pugna que significaba su desarrollo y el egoísmo de clase, tener como rival a un capitalismo de Estado y no al de las conquistas sociales por parte del proletariado en el mundo. Vivía en medio de un peligroso equilibrio social. Más de uno de sus estadistas buscó por medio de los seguros sociales (seguridad social, previsión social) ese equilibrio.

El stalinismo mientras perseguía y asesinaba a los bolcheviques, heredaba como ejemplo para el mundo, las conquistas de la revolución de octubre.

A Trotsky mismo, no fueron pocos los militantes que lo increparon por defender a la Unión Soviética a pesar de Stalin. Su defensa era muy clara: «la Unión Soviética es una conquista de la humanidad».

Es como si hoy no entendiéramos que la caída de Venezuela, o de Cuba significarían un gran retroceso aún cuando pudiéramos señalar errores y hasta horrores burocráticos que nada tienen que ver con lo que fue el stalinismo, aunque hay mucho de lo que fue su origen.

El horror que significa en el mundo actual la promoción y la derrota de la llamada «primavera árabe» en la que participaron intelectuales europeos de izquierda, que no entendieron que sin desarrollo de una base social que lo posibilite, es imposible hacer un proyecto de sociedad nacional democrática. Introdujeron la inestabilidad social y el caldo de cultivo para la industria de la guerra, para la tragedia social actual y el padecimiento de las migraciones.

El propio fomento de los nacionalismos sin una base económica democrática a nivel mundial, tiene el marco de intereses sectoriales que pugnan por un desarrollo capitalista propio y en definitiva van en contra de la defensa misma de la razón de ser de las nacionalidades, como lo analizaba Lenin.

Rodney Arismendi, conductor del Partido Comunista uruguayo, constructor fundamental de la unidad sindical y política en el país, hablaba para interpretar los acontecimientos de la revolución de rusa de que Lenin había producido un escándalo en la ideología, pues había acercado los textos de los maestros a lo que estaba pasando con la construcción del llamado socialismo real y originado la reacción de la socialdemocracia europea, comprometida con los créditos para la guerra de sus respectivas burguesías.

Permítasenos, en nuestra modestia de conocimientos, señalar que dentro de sus enormes valores y aportes, esa fue una idea que aún sigue haciendo daño a la izquierda y es sobre ello que queremos hacer algunas puntualizaciones para enriquecer el debate importante que tarde o temprano se debe dar sobre la ideología.

Lo cual conlleva nuestra propia autocrítica, pues en 1971 muchos de estos temas nos eran confusos y aún no teníamos una base ideológica suficiente como para entender porque el camarada profesor Julio Rodríguez afirmaba que el stalinismo era el trotskismo sin Trotsky. Seguramente a su tiempo volveremos a examinar estos temas, ya que con Batlle y Ordoñez, con el Doctor Carlos Quijano y con el propio Julio, creemos haber aprendido a valorar a los maestros en una dimensión que antes no comprendíamos y que en la etapa actual resulta fundamental para poder entender que está pasando.

No hay texto, análisis, desarrollo, en la obra de Marx, Engels y Lenin, donde se analice la posibilidad de construir un modo de producción alternativo –no es otra cosa el capitalismo de Estado– en competencia y confrontación con el capitalismo que es lo que se propuso el stalinismo usufructuando las conquistas formidables de la revolución de octubre. Capitalismo de Estado coyunturalmente necesario para defender el propio aparato productivo en beneficio de la gente en cada una de las crisis anteriores en el desarrollo y crecimiento del modo de producción predominante.

Para esa defensa de las conquistas, el ejercicio de la Dictadura del Proletariado, en contraposición a la dictadura ejercida dentro del modo de producción capitalista por la burguesía y sus formas imperialistas. Dictadura del Proletariado a la que se recurre con las huelgas, con las ocupaciones, incluso con las revoluciones cuando las masas se sienten ahogadas por la explotación como ocurre hoy en muchos países y la burguesía trata de meterlas dentro del corset de su propia dictadura.

Sabiendo que dentro de esas conquistas están los derechos democráticos de las masas, el derecho a la salud, a la enseñanza, el voto, el voto secreto, los derechos de la mujer, de los niños, de los ancianos…

Está fuera de esos objetivos hacer de cada Estado centro de la economía en confrontación con el desarrollo ecuménico de la misma.

El capitalismo como sistema trató de circunscribir los problemas a cada país y los revolucionarios fueron coptados por el aparato del Estado y llamaron a eso socialismo y sus programas ya no tuvieron la dimensión universal con la que fueron desarrollados en los textos de los maestros.

Estamos hablando a principio del siglo 20 de crisis iníciales de un modo de producción predominante, con situaciones de una gravedad tal que determinaron la existencia de tragedias como las guerras, dos de ellas mundiales.

El modo de producción capitalista se repuso y continuó su desarrollo, de un centro inicial: el Reino Unido con su saturación, pasó a un centro que se desarrolló con el encabezamiento de EE.UU. como nación emergente, fue en su momento el nuevo «súper imperialismo».

Hoy EE.UU. también se ha saturado y su lucha interna que se extiende a lo que ha sido su influencia en el mundo comandando en su momento el libre comercio y la diversidad de monedas pero imponiendo la hegemonía del dólar; confronta con complejos empresariales multinacionales que ya se van desplazando a hacia un nuevo centro: China y su entorno.

Mientras tanto corrientes «nacionales» de capitalistas se amurallan para desarrollar lo que queda del aparato productivo nacional, usando como estandarte a Trump y al ala más conservadora del Partido Republicano.

De aquel imperialismo quedan «servicios» que actúan como gendarmes manteniendo y aumentando sus características criminales en la defensa de una de las válvulas de escape del sistema a la crisis: la industria de la guerra.

Hoy la crisis de la predominancia del modo de producción capitalista es tal que se da esta situación insólita e incompresible sin recurrir a lo que los maestros analizaron en su momento.

El capitalismo no va a ser sustituido por un sistema alternativo que lo derrote en una confrontación. Por el contrario, su predominancia necesita morir en paz, para evitar una tragedia mayor aún a la Humanidad y eso que hoy hace que la tasa general de ganancia haga cada vez más difícil su actividad productiva. Va a pasar a las manos de la organización democrática de la sociedad para que esta determine no el fin del capitalismo como modo de producción sino que con una nueva predominancia de la sociedad, esta planifique una actividad global que atienda a las necesidades del conjunto de la sociedad humana.

Ocurrió con la esclavitud, con el feudalismo, también ocurrirá con el capitalismo. De esa nueva realidad resurgirán las ideas socialistas y el «hombre» nuevo será producto de nuevas relaciones de producción a las que la sociedad podrá llamar «socialista» por su carácter liberador del ser humano dando inicio a la verdadera historia de la Humanidad.

De aquel viejo programa apoyado en estatizaciones para mantener el funcionamiento del aparato productivo mientras desde el poder se defendían los derechos y conquistas de los trabajadores, pasaremos a este que tiene como herramientas la medida monetaria única y universal, y como modo de obtener fondos para el desarrollo de la sociedad un sistema impositivo basado en la circulación del dinero, dando muerte a los paraísos fiscales, y a los sistemas impositivos basados en el consumo, los salarios y las pensiones.

Seguramente para ello será necesario tomar la conducción de la economía mundial desde el Banco Mundial y desde el Fondo Monetario Internacional como los medios más importantes para imponer desde ellos estás líneas programáticas.

Jorge Aniceto Molinari.
Montevideo, 16 de Diciembre de 2019.

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[:es]Lo lamento pero esto pienso.[:ca]Ho lamento però això penso.[:]

[:es]

Lo lamento pero esto pienso.

Abordando eso gris, que parece la teoría.

Jorge Aniceto Molinari.

Viernes, 22 de Noviembre de 2019.

Roberto Savio.Con este título presentaba su nota Roberto Savio1, la pueden leer en las columnas digitales de Uypress: precisa, clara e inquietante; no sólo expresa los valiosos conocimientos sobre acontecimientos de enorme importancia sino también y de algún modo un estado de ánimo generalizado. Es a ello que traté de responder en un correo que le envié al autor.

Mi correo:

Excelente descripción, y aún podríamos agregarles más cosas, como por ejemplo que con los documentos de identificación nacionales o en el marco de comunidades como la europea, podría agregarse un enlace donde cada uno de los seres humanos dispusiera de su historia clínica digital, y si disponemos como hoy dispone la humanidad de análisis de poco costo y no invasivos para saber qué enfermedades ha tenido cada uno de nosotros y cuales es propenso a tener, cada ser humano estará en condiciones de ser atendido en las mejores condiciones, con un resultado relevante en el mundo sobre la posibilidades de atender correctamente con los medicamentos e instrumental médico que hoy son patrimonio de sectores privilegiados de la sociedad.

¿Pero cuál es el problema, tanto para lo que desarrolla Roberto, como esto que agrego? Que la economía de la Humanidad está en manos de una dictadura regida por los complejos empresariales multinacionales, y comandada por el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional que regula sus pugnas contra la gente en un marco permanente de agostamiento de la tasa general de ganancia, y haciendo al sistema incapaz sin ampliar la guerra de mantener la rentabilidad, lo cual es suicida. ¿Qué necesitamos? La voluntad política para aplicar dos herramientas: una moneda única y universal, que termine con el juego de esta contra la gente, y un sistema impositivo basado en la circulación del dinero que ni siquiera necesita que sea material físico, eliminando los impuestos al consumo, a los salarios y a las pensiones, y dando muerte a los paraísos fiscales. Esto es dar muerte en paz a la predominancia del modo de producción capitalista y la sociedad estaría en condiciones de un desarrollo democrático y en beneficio de la gente de su aparato productivo. Cambio radical en el BM y en el FMI. Todo lo que desarrolla Roberto apuntando a este objetivo sería la revolución que la humanidad está hoy necesitando. Organizando la atención de la salud, de la educación, del trabajo, del medio ambiente, bajando así radicalmente todas las lacras que la falta de rentabilidad entre otras cosas hace que el capitalismo las promueva. Y un apunte más. Nada de engordar Estados para poder aplicar esta política, que debe ser eficiente y rentable en beneficio de la sociedad toda. El capitalismo seguramente ya sin su predominancia seguirá existiendo como ha ocurrido con los otros modos de producción. La nueva forma de organizar el aparato productivo nos dará el ser humano nuevo, por aquello que escribía Carlos Marx:

«…El conjunto de las relaciones de producción forma la estructura económica de la sociedad, la base real sobre la que se eleva un edificio (Uberbau) jurídico y político y a la que corresponden determinadas formas de conciencia social. El modo de producción de la vida material determina (bedingen) el proceso de la vida social, política y espiritual en general. No es la conciencia del hombre la que determina su ser, sino por el contrario, el ser social es lo que determina su conciencia».

Esta estructura económica es hoy ecuménica.

La respuesta del compañero no se hizo esperar:

Muy bien dicho, y tienes toda la razón. Pero, hasta ahora, la gente se vuelve zombi… y el sistema no se toca… ojalá vayamos en tu dirección… un abrazo Roberto en el aeropuerto de Bonn…

Días antes habíamos intercambiado opiniones sobre la necesidad de comprender que está pasando con el Foro Social Mundial (FSM), que naciera con una enorme fuerza y alentara esperanzas de promover cambios importantes sobre la grave crisis que vive el mundo y que mucho tiene que ver con lo que Roberto Savio analiza en su nota sobre los enormes cambios tecnológicos de esta época.

Roberto nos hacía partícipes de este correo que nos dice con claridad su opinión:

Querido Chico,

No lo había leído, y quiero darte una respuesta rápida, ya que estoy viajando…

Creo que venimos de dos experiencias diferentes, y que de allá vienen nuestras posiciones diferentes.

Yo siempre estuve a favor del espacio abierto. Pero esto no quiere decir que un espacio abierto tiene que ser una masa informe de personas, que sólo a través de una improbable autogestión total pueden encontrar el mejor de sus caminos. Si la autogestión no tiene alguna capacidad de crear mecanismos de visión y de prioridades, esto hace del espacio abierto algo que es un gigantesco intercambio, pero que no va a una construcción importante. Que se haga un FSM, en el cual no hay paneles sobre el cambio climático, como fue de hecho la última vez, es ciertamente una expresión de las prioridades de los participantes. Pero a la vez buscar líneas que son objetivamente prioritarias, y pedir a los participantes que se abran a ellas, es algo que hay que solucionar. La inmensa fragmentación de los foros en muchos paneles que se repetían ad infinitum, es otro problema que hay que solucionar, espacio abierto o no. El mundo iba hacia un camino desastroso, y nosotros a una pulverización de debates, sin la capacidad de poder presentar una voz alternativa…

Creo que hemos llegado a extremos de talmudismo en que no se pudieran hacer declaraciones, ya que estas podían dividir. Un llamado a la paz, una declaración en contra de las guerras, una denuncia del florecimiento de líderes nacionalistas, xenófobos y populistas, no hubieran divido el FSM. Hubiera bastado acordar los límites a declaraciones, para que fueran suficientemente inclusivas y relacionadas a los temas contenidos en la carta de principios, para que el FSM hubiese jugado un papel activo en las relaciones internacionales, como era su intención anti Davos. No veo como una declaración sobre el desastre ambiental hubiese divido al Foro.

En otras palabras, para defender unos principios abstractos, hemos conducido el Foro a ser sólo un espacio de reflexión, basado en el mínimo común denominador, reduciendo enormemente el valor de una enorme movilización de entusiasmo y compromiso.

Lo que siempre me sorprende es que en el debate sobre el FSM nunca se habla de comunicación. Probablemente, porque esto hay que organizarlo. Pero cada Foro no ha tenido relación con el inmenso mundo que miraba al Foro, y que por razones diferentes (económicas, geográficas) no podía participar. Y que tampoco hemos asegurado el traspaso de lo alcanzado en un foro al que seguía. Los FSM se han así convertido en una secuencia de actos auto referentes, que no han logrado crear un proceso, ni una participación de la sociedad civil.

Una acotación, tal vez emblemática. Los diarios no han dejado de participar porque no éramos contemporáneos a Davos. Muy pocos medios hubieran tenido los recursos para cubrir los dos eventos. Han dejado de participar, como dije varias veces, porque un periodista que viene a un FSM se encuentra frente a centenares de paneles, y a menos que no sea un especialista de temas globales, se pierde, y termina escribiendo sobre el folklore del FSM. Esto hubiera sido fácil de solucionar. Hubiese bastado dar a los periodistas un carné de nombres y teléfonos (como hace EU en las Conferencias), con escrito: Mujer: resource person: Gina Vargas. Tel: 43217562. Allá quien quería escribir sobre temas de mujer, contactaba a la Gina Vargas, miraba al FSM en que estaba con mayor comprensión, y sacaba un buen artículo sobre este tema, y después sobre otros.

Pues, Chico, hubiese sido esto posible, en tu visión ¿Nombrar de alguna manera portavoces? Obviamente no. El resultado: perdimos todos los diarios. Y cuando levanté este tema, no faltó quien dijera que no era nuestro interés tener diarios burgueses en el FSM. Y esto, para mí, es falta de consciencia política…

Asi, querido, yo creo que prisioneros de nuestra formula, no hemos tomado ni algunas medidas mínimas para sincronizarnos con el mundo exterior, ya que hubieran requerido alguna medida organizativa, que nada tiene que ver con la organización de un movimiento, sino con hacer más eficiente la fórmula del espacio abierto. Más bien creo que hemos cometido un error tolemaico. El FSM partió tan fuerte y exitoso, que nos hemos quedado en sus orígenes, mientras el mundo cambiaba, y no nos preocupábamos para nada de esto. Podemos decir que hemos sido coherentes. Hemos seguido por 18 años el mismo camino, la defensa de una horizontalidad como método absoluto, un espacio autogestionado, etc. Pero sabemos que esto no es completamente así. Que en el CI siempre hubo un grupo más igual que los otros. Y que siempre se dieron momentos de supremacía de unos sobre otros, sin que esto fuera una batalla de valores…

Moraleja. Yo creo que un espacio abierto no pueda convertirse en un espacio cerrado, que no se relaciona con su mundo exterior. El FSM tenía que motivar, abastecer e intercambiar también con los que no habían podido llegar, y querían seguir el debate interno. El FSM tenía que reaccionar al mundo que lo circundaba. El FSM tenía que hacer esfuerzos para ser una alternativa a Davos, lo que significaba sembrar en el mundo. Un debate sobre modelos abstractos nos ha paralizado, nos ha impedido de ser una voz fuerte y participativa en un mondo que, como dices tú, «andas por lo pior». Y, nuevamente, me gustaría entender como el FSM va a seguir en un mundo donde la deriva comercial de Internet nos está transformando todos en zombies. Me gustaría entender cómo se puede entender el futuro del FSM, con reuniones físicas, como integrar a ellas todos los nuevos actores de la sociedad civil global, sin entrar en el campo de la batalla en la comunicación… pero para hacer este nuevo FSM, relacionado con la realidad, querido Chico, significa salir de tu experiencia de la iglesia de base de Brasil, para entrar en un camino que requiere alguna organización: por ejemplo, hacer un FSM sobre los varios puntos que la olla a presión deja escapar, de Chile a Alger, de Lebanon, a Honk Kong, de Francia a Yemen… los puntos que nos dicen que el sistema ya no aguanta… Pero tiene sentido querer llevarlos todos a un lugar, para que discutan entre ellos, como es nuestra tradición, sin que puedan hacer ninguna declaración: ¿Estamos seguros que esto es lo que los que manifiestan para un cambio necesitan hoy? A la vez, no creo que tampoco puedan organizar un movimiento, vista las grandes diferencias. Pero un espacio de encuentro y de intercambio ciertamente. ¿Pero tú crees que la vieja fórmula del FSM es contemporánea?

Esto dicho, un abrazo, Roberto.

A lo cual respondí interesado por la importancia del tema:

«Es un tema apasionante y a la vez lleno de ideas contrapuestas y en un marco que no las puede atender y por lo tanto tampoco responder.

El FSM irrumpe en el Brasil de Lula, donde la burguesía paulista en particular, luego de combatirlo de mil formas, lo apoya como un modo de desarrollar su inserción en el mercado mundial.

El FSM, nació con ese impulso pero producto de una inmensidad de militancias en distintas áreas del desarrollo humano y con distintos objetivos y fines. Y está bien que fuera así porque eso es lo que mejor expresa el sentimiento y el desarrollo de los seres humanos.

El Foro no se podía constituir en una iniciativa política en sí mismo, podía dar los insumos, y ser la base con conocimientos y militancia, no podía resolver la ecuación política.

Lula y también la burguesía paulista con sus objetivos diferentes agotaron rápidamente su programa. La crisis irreversible de la predominancia del modo de producción capitalista exige un programa que lo que hasta el día de hoy está para resolver. Y no es el Foro el que lo debe resolver son las organizaciones políticas que dicen responder a los intereses de los trabajadores, que deben tomar el desafío.

No es el Foro el que está en crisis, sino las organizaciones políticas, el Foro está allí y cada vez que se le convoque estará presente».

Mis disculpas, soy consciente de traer al intercambio apreciaciones en el marco personal, que desde mi punto de vista (también subjetivo) valen en tanto son preocupaciones que cada vez están generalizadas.

Jorge Aniceto Molinari.
Montevideo, 21 de Noviembre de 2019.


Enlace del artículo original en castellano:

https://www.uypress.net/auc.aspx?100275


Nota:

1El ítalo-argentino Roberto Savio es economista, periodista, experto en comunicación, comentarista político, activista por la justicia social y climática y defensor de una gobernanza global anti neoliberal. Director de relaciones internacionales del Centro Europeo para la Paz y el Desarrollo. Cofundador, en 1964, y actual Presidente Emérito de la agencia de noticias Inter Press Service (IPS), presidente de Other News.

[:ca]

Ho lamento però això penso.

Abordant això gris, que sembla la teoria.

Jorge Aniceto Molinari.

Divendres, 22 de novembre de 2019.

Roberto Savio.Amb aquest títol presentava la seva nota Roberto Savio1, la poden llegir en les columnes digitals de Uypress: precisa, clara i inquietant; no sols expressa els valuosos coneixements sobre esdeveniments d’enorme importància sinó també i d’alguna manera un estat d’ànim generalitzat. És a això que vaig tractar de respondre en un correu que li vaig enviar a l’autor.

El meu correu:

Excel·lent descripció, i encara podríem agregar-hi més coses, com per exemple que amb els documents d’identificació nacionals o en el marc de comunitats com l’europea, podria agregar-se un enllaç on cadascun dels éssers humans disposés de la seva història clínica digital, i si disposem com avui disposa la humanitat d’anàlisi de poc cost i no invasiu per a saber quines malalties ha tingut cadascun de nosaltres i quines són propenses a tenir, cada ésser humà estarà en condicions de ser atès en les millors condicions, amb un resultat rellevant en el món sobre la possibilitats d’atendre correctament amb els medicaments i instrumental mèdic que avui són patrimoni de sectors privilegiats de la societat.

Però quin és el problema, tant per allò que desenvolupa Roberto, com això que afegeixo? Que l’economia de la Humanitat està en mans d’una dictadura regida pels complexos empresarials multinacionals, i comandada pel Banc Mundial i el Fons Monetari Internacional que regula les seves pugnes contra la gent en un marc permanent d’esgotament de la taxa general de guany, i fent al sistema incapaç sense ampliar la guerra de mantenir la rendibilitat, la qual cosa és suïcida. Què necessitem? La voluntat política per a aplicar dues eines: una moneda única i universal, que acabi amb el joc d’aquesta contra la gent, i un sistema impositiu basat en la circulació del diner que ni tan sols necessita que sigui material físic, eliminant els impostos al consum, als salaris i a les pensions, i donant mort als paradisos fiscals. Això és donar mort en pau a la predominança de la manera de producció capitalista i la societat estaria en condicions d’un desenvolupament democràtic i en benefici de la gent del seu aparell productiu. Canvi radical en el BM i en el FMI. Tot allò que desenvolupa Roberto apuntant a aquest objectiu seria la revolució que la humanitat està avui necessitant. Organitzant l’atenció de la salut, de l’educació, del treball, del medi ambient, baixant així radicalment totes les xacres que la manca de rendibilitat entre altres coses fa que el capitalisme les promogui. I una anotació més. Res d’engreixar Estats per a poder aplicar aquesta política, que ha de ser eficient i rendible en benefici de tota la societat. El capitalisme segurament ja sense la seva predominança continuarà existint com ha ocorregut amb les altres maneres de producció. La nova manera d’organitzar l’aparell productiu ens donarà l’ésser humà nou, per allò que escrivia Karl Marx:

«…El conjunt de les relacions de producció forma l’estructura econòmica de la societat, la base real sobre la qual s’eleva un edifici (Uberbau) jurídic i polític i a la qual corresponen determinades formes de consciència social. La manera de producció de la vida material determina (bedingen) el procés de la vida social, política i espiritual en general. No és la consciència de l’home la que determina el seu ser, sinó per contra, el ser social és el que determina la seva consciència».

Aquesta estructura econòmica és avui ecumènica.

La resposta del company no es va fer esperar:

Molt ben dit, i tens tota la raó. Però, fins ara, la gent es torna zombie… i el sistema no es toca… tant de bo anem en la teva direcció… una abraçada Roberto en l’aeroport de Bonn…

Dies abans havíem intercanviat opinions sobre la necessitat de comprendre que està passant amb el Fòrum Social Mundial (FSM), que nasqué amb una enorme força i encoratjà esperances de promoure canvis importants sobre la greu crisi que viu el món i que molt té a veure amb el que Roberto Savio analitza en la seva nota sobre els enormes canvis tecnològics d’aquesta època.

Roberto ens feia partícips d’aquest correu que ens diu amb claredat la seva opinió:

Estimat Noi,

No ho havia llegit, i vull donar-te una resposta ràpida, ja que estic viatjant…

Crec que venim de dues experiències diferents, i que d’allà vénen les nostres posicions diferents.

Jo sempre vaig estar a favor de l’espai obert. Però això no vol dir que un espai obert ha de ser una massa informe de persones, que només mitjançant d’una improbable autogestió total poden trobar el millor dels seus camins. Si l’autogestió no té alguna capacitat de crear mecanismes de visió i de prioritats, això fa de l’espai obert una cosa que és un gegantesc intercanvi, però que no va cap a una construcció important. Que es faci un FSM, en el qual no hi ha panells sobre el canvi climàtic, com va ser de fet la darrera vegada, és certament una expressió de les prioritats dels participants. Però alhora cercar línies que són objectivament prioritàries, i demanar als participants que s’obrin a elles, és quelcom que cal solucionar. La immensa fragmentació dels fòrums en molts panells que es repetien ad infinitum, és un altre problema que cal solucionar, espai obert o no. El món anava cap a un camí desastrós, i nosaltres a una polvorització de debats, sense la capacitat de poder presentar una veu alternativa…

Crec que hem arribat a extrems de talmudisme en què no es poguessin fer declaracions, doncs aquestes podien dividir. Una crida a la pau, una declaració en contra de les guerres, una denúncia del floriment de líders nacionalistes, xenòfobs i populistes, no haurien dividir el FSM. N’hi hauria prou acordar els límits a declaracions, perquè fossin prou inclusives i relacionades als temes continguts en la carta de principis, perquè el FSM hagués jugat un paper actiu en les relacions internacionals, com era la seva intenció anti Davos. No veig com una declaració sobre el desastre ambiental hi hagués dividit el Fòrum.

En altres paraules, per a defensar uns principis abstractes, hem conduït el Fòrum a ser només un espai de reflexió, basat en el mínim comú denominador, reduint enormement el valor d’una enorme mobilització d’entusiasme i compromís.

Allò que sempre em sorprèn és que en el debat sobre el FSM mai no es parla de comunicació. Probablement, perquè això cal organitzar-ho. Però cada Fòrum no ha tingut relació amb l’immens món que mirava el Fòrum, i que per raons diferents (econòmiques, geogràfiques) no podia participar. I que tampoc hem assegurat el traspàs d’allò aconseguit en un fòrum al qual es seguia. Els FSM s’han així convertit en una seqüència d’actes auto referents, que no han aconseguit crear un procés, ni una participació de la societat civil.

Una acotació, tal vegada emblemàtica. Els diaris no han deixat de participar perquè no érem contemporanis a Davos. Molt pocs mitjans haurien tingut els recursos per a cobrir els dos esdeveniments. Han deixat de participar, com vaig dir diverses vegades, perquè un periodista que ve a un FSM es troba enfront de centenars de panells, i tret que no sigui un especialista de temes globals, es perd, i acaba escrivint sobre el folklore del FSM. Això hauria estat fàcil de solucionar. N’hi hauria prou donar als periodistes un carnet de noms i telèfons (com fa la Unió Europea en les Conferències), amb escrit: Dona: resource person: Gina Vargas. Tel: 43217562. Allà qui volia escriure sobre temes de dona, contactava a la Gina Vargas, mirava al FSM en qui estava amb major comprensió, i treia un bon article sobre aquest tema, i després sobre uns altres.

Perquè, Noi, hauria estat això possible, en la teva visió nomenar d’alguna manera portaveus? Òbviament no. El resultat: vam perdre tots els diaris. I quan vaig aixecar aquest tema, no va faltar qui digués que no era el nostre interès tenir diaris burgesos en el FSM. I això, per a mi, és manca de consciència política…

Així, volgut, jo crec que presoners de nostra formula, no hem pres ni algunes mesures mínimes per a sincronitzar-nos amb el món exterior, doncs haguessin requerit alguna mesura organitzativa, que res té a veure amb l’organització d’un moviment, sinó amb fer més eficient la fórmula de l’espai obert. Més aviat crec que hem comès un error ptolemaic. El FSM va partir tan fort i reeixit, que ens hem quedat en els seus orígens, mentre el món canviava, i no ens preocupàvem per a res d’això. Podem dir que hem estat coherents. Hem seguit per 18 anys el mateix camí, la defensa d’una horitzontalitat com a mètode absolut, un espai autogestionat, etc. Però sabem que això no és completament així. Que en el CI sempre va haver-hi un grup més igual que els altres. I que sempre es van donar moments de supremacia dels uns sobre els altres, sense que això fos una batalla de valors…

Moralitat. Jo crec que un espai obert no pot convertir-se en un espai tancat, que no es relaciona amb el seu món exterior. El FSM havia de motivar, proveir i intercanviar també amb els que no havien pogut arribar, i volien seguir el debat intern. El FSM havia de reaccionar el món que el circumdava. El FSM havia de fer esforços per a ser una alternativa a Davos, la qual cosa significava sembrar arreu del món. Un debat sobre models abstractes ens ha paralitzat, ens ha impedit de ser una veu forta i participativa en un pelat que, com dius tu, «vas pel pior». I, novament, m’agradaria entendre com el FSM seguirà en un món on la deriva comercial d’Internet ens està transformant tots en zombis. M’agradaria entendre com es pot entendre el futur del FSM, amb reunions físiques, com integrar a aquestes tots els nous actors de la societat civil global, sense entrar en el camp de la batalla en la comunicació… però per a fer aquest nou FSM, relacionat amb la realitat, estimat Noi, significa sortir de la teva experiència de l’església de base del Brasil, per a entrar en un camí que requereix alguna organització: per exemple, fer un FSM sobre els diversos punts que l’olla de pressió deixa escapar, de Xile a Alger, de Líban, a Honk Kong, de França a Iemen… els punts que ens diuen que el sistema ja no aguanta… Però té sentit voler portar-los tots a un lloc, perquè discuteixin entre ells, com és la nostra tradició, sense que puguin fer cap declaració: Estem segurs que això és el que els que manifesten per a un canvi necessiten avui? Alhora, no crec que tampoc puguin organitzar un moviment, vista les grans diferències. Però un espai de trobada i d’intercanvi certament. Però tu creus que la vella fórmula del FSM és contemporània?

Això dit, una abraçada, Roberto.

A la qual cosa vaig respondre interessat per la importància del tema:

«És un tema apassionant i alhora ple d’idees contraposades i en un marc que no les pot atendre i per tant tampoc respondre.

El FSM irromp al Brasil de Lula, on la burgesia paulista en particular, després de combatre-la de mil formes, li dóna suport com una manera de desenvolupar la seva inserció en el mercat mundial.

El FSM, va néixer amb aquest impuls però producte d’una immensitat de militàncies en diferents àrees del desenvolupament humà i amb diferents objectius i finalitats. I està bé que fos així perquè això és el que millor expressa el sentiment i el desenvolupament dels éssers humans.

El Fòrum no es podia constituir en una iniciativa política en sí mateix, podia donar els inputs, i ser la base amb coneixements i militància, no podia resoldre l’equació política.

Lula i també la burgesia paulista amb els seus objectius diferents van esgotar ràpidament el seu programa. La crisi irreversible de la predominança de la manera de producció capitalista exigeix un programa que el que fins al dia d’avui està per a resoldre. I no és el Fòrum el que l’ha de resoldre són les organitzacions polítiques que diuen respondre als interessos dels treballadors, que han de prendre el desafiament.

No és el Fòrum el que està en crisi, sinó les organitzacions polítiques, el Fòrum és allí i cada vegada que se li convoqui estarà present».

Les meves disculpes, sóc conscient de portar a l’intercanvi apreciacions en el marc personal, que des del meu punt de vista (també subjectiu) valen en tant són preocupacions que cada vegada estan generalitzades.

Jorge Aniceto Molinari.
Montevideo, 21 de novembre de 2019.


Enllaç de l’article original en castellà:

https://www.uypress.net/auc.aspx?100275


Nota:

1L’ítalo-argentí Roberto Savio és economista, periodista, expert en comunicació, comentarista polític, activista per la justícia social i climàtica i defensor d’una governança global anti neoliberal. Director de relacions internacionals del Centre Europeu per a la Pau i el Desenvolupament. Cofundador, en 1964, i actual President Emèrit de l’agència de notícies Inter Press Service (IPS), president d’Other News.

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[:es]Respuesta a Yamandú Orsi.[:ca]Resposta a Yamandú Orsi.[:]

[:es]

Respuesta a Yamandú Orsi.

Yamandú Ramón Antonio Orsi Martínez.No lo conozco personalmente. Los informes me indican que se trata de un excelente administrador, frenteamplista y militante. Estoy hablando del compañero Yamandú Orsi. Sin embargo y quiero señalarlo, sus declaraciones sobre la desdolarización del país son equivocadas. Necesitamos tener un lugar donde debatirlas. Esto de opinar diciendo lo que se piensa es muy bueno. Ahora necesitamos la contrapartida de eventos donde esto se pueda debatir abiertamente, con el complemento luego de que las organizaciones tomen luego las medidas propias necesarias para cumplir administrativamente con lo resuelto. Así debe funcionar la democracia en todos sus planos: sindical, política, social.

Azucena Arbeleche.Bastante daño le ha hecho al país las declaraciones de la economista Azucena Arbeleche diciendo que habían hecho gestiones –no sabemos por resolución de quién– ante calificadoras internacionales de riesgo. No debería promoverse que se juegue al pelotazo, como parece ser la moda actual. Volviendo sobre el punto decíamos en nuestra columna de Uypress, con referencia a Chile: «Imaginemos por un momento a Chile, a Uruguay, a Brasil, a Grecia, a España, sin impuestos al consumo, al trabajo y a las pensiones. ¿Y entonces como se banca el presupuesto del Estado?, con un impuesto sobre la circulación del dinero, haciendo inválida cualquier transacción que no esté debidamente registrada donde la sociedad democráticamente lo determine».

«Sí, pero ningún país lo puede hacer por separado, si y es ahí donde debemos organizar la toma del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional, para imponer un cambio sustancial en la economía del mundo».

«Una sola forma universal de medir los hechos económicos, no a una moneda para los dueños de los medios de producción y otra para la gente. Que los recursos provenientes de un impuesto a la circulación del dinero sean administrados democráticamente sin engrosar las burocracias estatales y administrados con criterios de rentabilidad social, y eficiencia».

Por eso hablar de dos monedas cuando los ahorros del país, y los ahorros personales de los administradores se hacen en la moneda «fuerte» no sólo me parece incorrecto, sino grave para los intereses de la gente. Destaco lo de fuerte porque ya en el mundo se debe hablar de monedas predominantes como es en este caso, que inciden sobre la vida de la gente, y hacen que sobre el manejo de ellas se juegue con el nivel de vida de vastos sectores.

Jorge Aniceto Molinari.
Martes, 19 de Noviembre de 2019.

[:ca]

Resposta a Yamandú Orsi.

Yamandú Ramón Antonio Orsi Martínez.No el conec personalment. Els informes m’assenyalen que es tracta d’un excel·lent administrador, frenteamplista i militant. Estic parlant del company Yamandú Orsi. No obstant això i vull assenyalar-ho, les seves declaracions sobre la desdolarització del país estan equivocades. Necessitem tenir un lloc on debatre-les. Això d’opinar dient el que es pensa és molt bo. Ara necessitem la contrapartida d’esdeveniments on això es pugui debatre obertament, amb el complement després que les organitzacions prenguin després les mesures pròpies necessàries per a complir administrativament amb el resolt. Així ha de funcionar la democràcia en tots els seus plans: sindical, política, social.

Azucena Arbeleche.Bastant mal li ha fet al país les declaracions de l’economista Azucena Arbeleche dient que havien fet gestions –no sabem per resolució de qui– davant qualificadores internacionals de risc. No hauria de promoure’s que es jugui al pelotazo, com sembla ser la moda actual. Tornant sobre el punt dèiem en la nostra columna d’Uypress, amb referència a Xile: «Imaginem per un moment a Xile, a l’Uruguai, al Brasil, a Grècia, a Espanya, sense impostos al consum, al treball i a les pensions. I llavors com s’assoleix el pressupost de l’Estat?, amb un impost sobre la circulació dels diners, fent invàlida qualsevol transacció que no estigui degudament enregistrada on la societat democràticament ho determini».

«Sí, però cap país ho pot fer per separat, si i és aquí on hem d’organitzar la presa del Banc Mundial i del Fons Monetari Internacional, per a imposar un canvi substancial en l’economia del món».

«Una sola forma universal de mesurar els fets econòmics, no a una moneda per als amos dels mitjans de producció i una altra per a la gent. Que els recursos provinents d’un impost a la circulació dels diners siguin administrats democràticament sense engrossir les burocràcies estatals i administrats amb criteris de rendibilitat social, i eficiència».

Per això parlar de dues monedes quan els estalvis del país, i els estalvis personals dels administradors es fan en la moneda «forta» no sols em sembla incorrecte, sinó greu per als interessos de la gent. Destaco això de forta perquè ja en el món s’ha de parlar de monedes predominants com és en aquest cas, que incideixen sobre la vida de la gent, i fan que sobre el maneig d’aquestes es jugui amb el nivell de vida d’amplis sectors.

Jorge Aniceto Molinari.
Dimarts, 19 de novembre del 2019.

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[:es]Esto es ahora: 2019.[:]

[:es]

Esto es ahora: 2019.

(Abordando eso gris, que parece la teoría).

Pedro Sánchez y Pablo Iglesias dándose un abrazo.Se perfila como novedad un gobierno en España del PSOE y Podemos. Se están discutiendo cargos lo cual no es novedad, pero la preocupación es que programa para España y ahora ya con eso no alcanza, es necesario avanzar en un programa para el mundo.

No somos optimistas. Ahora la situación va agregando cada vez más ingredientes en la crisis en un mundo cuyo gobierno y en la pugna está en manos de los cuerpos gerenciales de los conglomerados empresariales multinacionales, sus instrumentos para aplicar su política a los Estados son el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional. Es una dictadura por ahora no cuestionada y donde todo lo demás viene por añadidura.

Tal vez la historia nos esté reservando novedades, son demasiados los ingredientes que se le vienen poniendo a la olla de la crisis, para que de ella la humanidad no saque enseñanzas para avanzar.

Y porque no, desde España, desde Uruguay; miren lo que está pasando en Bolivia, todo el odio de clase al desnudo como que hubiera estado escondido por la afrenta que para ellos significaba que un «Indio» fuera Presidente, con el apoyo del pueblo.

Hasta la sociedad en EE.UU. parece más tolerante luego del gobierno de Obama, ahora el problema sigue siendo el mismo: ¿cuál es el programa que necesitamos para abordar la crisis y sus consecuencias?

La derecha lo quiere todo aunque no sabe para qué. En el poder se siente segura. En Venezuela ganaron una elección entre más de 10 (la abstención de la izquierda fue notoria). En Bolivia aún con crecimiento económico importante, Evo dio un paso en falso, y fuera, sus mayorías no califican en el mercado capitalista. Recordemos que su derrota en la propuesta constitucional de continuidad fue precedida de una campaña de prensa, sucia sobre su moralidad, que luego se demostró falsa.

Un amigo me escribe coincidiendo con mis enfoques, pero me señala que insisto con la revolución bolchevique que está fuera del conocimiento de las generaciones actuales.

Tal vez tenga razón en que me faltan elementos en el desarrollo, y que no explique suficientemente en que todos los cambios sociales para afirmarse necesitan de la teoría y del conocimiento profundo de la realidad. En 1917 llegó en plena crisis al poder, un partido que tenía toda una estructura ideológica que no la enarbolaba como dogma sino como guía para la acción y a su vez la enriquecía permanentemente con nuevos textos. Eso se cortó en 1924 y aún hoy la humanidad lo sufre porque no ha podido reemplazarlo y continuar la tarea de elaboración que es lo que hoy necesitamos imperiosamente. Hoy la crisis irreversible de la predominancia del modo de producción capitalista abarca a todo el planeta.

Los partidos actuales, todos, elaboran programas para su país como si el resto del mundo no existiera y no fuera determinante.

Sin embargo el propio Marx tenía una respuesta para esta interrogante:

«…El conjunto de las relaciones de producción forma la estructura económica de la sociedad, la base real sobre la que se eleva un edificio (Uberbau) jurídico y político y a la que corresponden determinadas formas de conciencia social. El modo de producción de la vida material determina (bedingen) el proceso de la vida social, política y espiritual en general. No es la conciencia del hombre la que determina su ser, sino por el contrario, el ser social es lo que determina su conciencia».

Esta estructura económica es hoy ecuménica. De eso la conciencia social ha comenzado a tomar nota y necesita tiempo y experiencia para conformar la voluntad política necesaria para avanzar.

Estamos en presencia de una crisis irreversible de la predominancia del modo de producción capitalista y no solo necesitamos que su muerte sea en paz, sino que sea reconocida como tal.

Cuánto ha costado en términos de desarrollo de la economía, que se entendiera que tal como venía el desarrollo económico de la humanidad, el capitalismo que conociera uno de sus centros de mayor desarrollo en el Reino Unido, necesitó, en una determinada etapa, construir un nuevo centro sobre la base en gran parte de la herencia cultural del propio Reino Unido en EE.UU., rica en luchas sociales y la aplicación de todos los avances de la tecnología, recordemos el rol del ferrocarril en medio de la guerra civil en la construcción de la unidad nacional.

Similitud en la utilización de ferrocarril para construir el ejército rojo, y la propia unidad de la Unión Soviética sobre esa base en medio de la guerra civil.

La vida hacía añicos la teoría del súper imperialismo y daba la razón a los análisis de Lenin.

Sin embargo, la vida iba a depararnos nuevas vueltas, EE.UU. comandaba el libre mercado en el mundo, y a la vez la Unión Soviética, luego de la derrota de Lenin, se convertía en el modelo alternativo al capitalismo que se esboza desde un capitalismo de estado y se amuralla.

Renacía nuevamente la teoría del súper imperialismo. Y otra vez la vida no sólo que da por tierra con esta teoría sino que nos hace vivir hoy la paradoja en la construcción de un nuevo centro predominante del capitalismo mundial en China y su entorno, gobernada esta por el Partido Comunista y liderando el libre comercio mundial.

El ministro del área en el gobierno Bolsonaro de Brasil acaba de informar –no ocultando su satisfacción– que ese país va a firmar un tratado de libre comercio con China. Cosas vedere Sancho, le haría decir don Miguel de Cervantes a don Quijote.

Y por si esto fuera poco es EE.UU. ahora el que se amuralla, y no son pocos los izquierdistas que sueñan en el mundo con sus propias murallas con el objetivo de desarrollos nacionales.

«El modo de producción de la vida material determina (bedingen) el proceso de la vida social». El proceso de la economía china y su entorno necesariamente luego de su auge va a conocer la necesidad de planificar su vida posterior, se pondrá en juego en el nuevo centro del capitalismo la capacidad de los comunistas para rectificar una compresión de los fenómenos sociales luego de la derrota de Lenin, que no ha permitido comprender en su plenitud el pensamiento de los maestros y frenó por todo un período la compresión de los fenómenos que estábamos viviendo.

Tal vez lo que ha costado pasar de los límites nacionales a los internacionales, para elaborar respuestas en beneficio de la gente. Hoy todavía los comunistas y los socialistas son nacionales. La literatura sobre la derrota de Lenin en 1924, es aún muy escasa. En el Uruguay tenemos el privilegio de tener un texto de José Batlle y Ordoñez sobre el tema.

Sin embargo, la tarea central para procesar este cambio aún no está planificada –falta la voluntad política que lo realice y es nada más ni nada menos que la toma del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional para imponer un cambio sustancial en su política, que necesitará de dos herramientas primarias para poder ser aplicada: la moneda y los impuestos.

Ahora creo entender que está pasando con quienes leen mis notas: Toda la vida se basaron en la idea de que socialismo es propiedad estatizada, y que alguien venga y les diga que eso es un error, que el socialismo se construye no creando un modelo alternativo al capitalismo, sino desarrollando éste hasta sus límites, para luego ayudar a que su predominancia muera en paz y se comience a planificar la economía con un carácter mundial y sobre la base de una moneda única universal y que los impuestos que la sociedad necesita para abordar las necesidades de este etapa deben provenir de la propia circulación del dinero, dando muerte a los paraísos fiscales y haciendo no válida toda transacción que no esté debidamente registrada en los instrumentos que la sociedad democráticamente determine.

No desconocemos que en toda una etapa de la historia, el Estado cumplió una función y muchas veces fue el escudo de los débiles, cuando los débiles pudieron hacerse fuertes para defender sus derechos. Ahora, siempre fue un medio y no un fin en sí mismo.

No renegamos de ninguno de los programas nacionales que en su momento reivindicó la izquierda en la lucha de clases, si aportamos que estos tenían y tiene un período a cumplir que hoy necesita de una perspectiva superior.

Y nos hacemos cargo, ahora que está de moda decir que uno se hace cargo, de todos los errores cometidos en el capitalismo de estado con el objetivo de contribuir a liberar a la sociedad de las consecuencias de la explotación capitalista. De lo que no nos hacemos cargo es de convertir esas acciones en la teoría necesaria para superar la etapa capitalista de la sociedad, y menos de emparentarla con las ideas que en su momento desarrollaron los maestros. Y menos aun de la corrupción y de los crímenes que se cometieron en nombre de los ideales revolucionarios.

La vuelta a esas ideas es lo que nos permite pensar que un mundo mejor es posible.

Jorge Aniceto Molinari.
Montevideo, 14 de Noviembre de 2019.

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[:es]Reflexión.[:ca]Reflexió.[:]

[:es]

Reflexión.

Pedro Sánchez y Pablo Iglesias dándose un abrazo.Se perfila como novedad un gobierno en España del PSOE y Podemos. Se están discutiendo cargos lo cual no es novedad, pero la preocupación es qué programa para España, y ahora ya con eso no alcanza. Es necesario avanzar en programa para el mundo.

No somos optimistas. Ahora la situación va agregando cada vez más ingredientes en la crisis en un mundo cuyo gobierno y en la pugna está en manos de los cuerpos gerenciales de los conglomerados empresariales multinacionales. Sus instrumentos para aplicar su política a los Estados son el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional. Es una dictadura por ahora no cuestionada y donde todo lo demás viene por añadidura.

Tal vez la historia nos esté reservando novedades. Son demasiados los ingredientes que se le vienen poniendo a la olla de la crisis, para que de ella la Humanidad no saque enseñanzas para avanzar.

Y porque no desde España, desde Uruguay, miren lo que está pasando en Bolivia. Todo el odio de clase al desnudo como que hubiera estado escondido por la afrenta que para ellos significaba que un «Indio» fuera Presidente, con el apoyo del pueblo.

Hasta EE.UU. parece más tolerante luego del gobierno de Obama. Ahora el problema sigue siendo el mismo: ¿cuál es el programa que necesitamos para abordar la crisis y sus consecuencias?

Un amigo me escribe coincidiendo con mis enfoques, pero me señala que insisto con la revolución bolchevique que está fuera del conocimiento de las generaciones actuales.

Tal vez tenga razón en que me faltan elementos en el desarrollo, y que no explique suficientemente en que todos los cambios sociales para afirmarse necesitan de la teoría y del conocimiento profundo de la realidad. En 1917 llegó, en plena crisis al poder, un partido que tenía toda una estructura ideológica que no la enarbolaba como dogma sino como guía para la acción y a su vez la enriquecía permanentemente con nuevos textos. Eso se cortó en 1924 y aún hoy la Humanidad lo sufre porque no ha podido reemplazarlo y continuar la tarea de elaboración que es lo que hoy necesitamos imperiosamente. Hoy la crisis irreversible de la predominancia del modo de producción capitalista es irreversible y abarca a todo el planeta.

Los partidos actuales, todos, elaboran programas para su país como si el resto del mundo no existiera y no fuera determinante.

Jorge Aniceto Molinari.
Miércoles, 13 de Noviembre de 2019.

[:ca]

Reflexió.

Pedro Sánchez i Pablo Iglesias donant-se una abraçada.Es perfila com a novetat un govern a Espanya del PSOE i Podemos. S’estan discutint càrrecs la qual cosa no és cap novetat, però la preocupació és quin programa per a Espanya, i ara ja amb això no s’hi arriba. És necessari avançar en programa per al món.

No som optimistes. Ara la situació va agregant cada vegada més ingredients en la crisi en un món el govern del qual i en la pugna està en mans dels cossos gerencials dels conglomerats empresarials multinacionals. Els seus instruments per a aplicar la seva política als Estats són el Banc Mundial i el Fons Monetari Internacional. És una dictadura ara com ara no qüestionada i on tota la resta ve per afegiment.

Tal vegada la història ens estigui reservant novetats. Són massa els ingredients que se li venen posant a l’olla de la crisi, perquè d’ella la Humanitat no tregui ensenyaments per a avançar.

I perquè no des d’Espanya, des de l’Uruguai, mireu el que està passant a Bolívia. Tot l’odi de classe al descobert com que hagués estat amagat pel greuge que per a ells significava que un «Indi» fos President, amb el suport del poble.

Fins els EUA semblen més tolerants després del govern d’Obama. Ara el problema continua sent el mateix: quin és el programa que necessitem per a abordar la crisi i les seves conseqüències?

Un amic m’escriu coincidint amb els meus enfocaments, però m’assenyala que insisteixo amb la revolució bolxevic que està fora del coneixement de les generacions actuals.

Tal vegada tingui raó en què em falten elements en el desenvolupament, i que no explico prou en què tots els canvis socials per a afirmar-se necessiten de la teoria i del coneixement profund de la realitat. El 1917 va arribar, en plena crisi al poder, un partit que tenia tota una estructura ideològica que no l’enarborava com a dogma sinó com a guia per a l’acció i al seu torn l’enriquia permanentment amb nous textos. Això es va tallar el 1924 i encara avui la Humanitat ho pateix perquè no ha pogut reemplaçar-ho i continuar la tasca d’elaboració que és el que avui necessitem imperiosament. Avui la crisi irreversible de la predominança de la manera de producció capitalista és irreversible i abasta a tot el planeta.

Els partits actuals, tots, elaboren programes per al seu país com si la resta del món no existís i no fos determinant.

Jorge Aniceto Molinari.
Dimecres, 13 de novembre del 2019.

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[:es]De Chile al mundo.[:]

[:es]

De Chile al mundo.

(Abordando eso gris, que parece la teoría).

María Cecilia Morel Montes, primera dama de Chile. Triste.La señora esposa del actual Presidente de Chile lo expresó con una claridad meridiana: (no es textual y no conozco que haya sido desmentido) «nos están invadiendo los alienígenas, vamos a tener que ceder algunas de nuestras riquezas».

La expresión puede tener varias traducciones, generalizada en algunos sectores de la sociedad actual; una traducción de clase: son ellos y nosotros, los pobres y los ricos, los que tienen y los que no tienen. Una salida, no tan compartida: ceder algunas de nuestras riquezas.

Por desgracia esta es una forma de razonar producto de un sistema económico, de un modo de producción que está llegando a sus límites posibles.

Probablemente la señora no esté en condiciones de reconocer que aún así no tiene arreglo, que lo que necesita morir es la predominancia de un modo de producción.

Porque lo que pasa en Chile, hoy es solo un ejemplo más de lo que está pasando en el mundo.

También es nociva la contrapartida vulgar: «si tuviéramos los bienes que tiene ellos», pues no conduce a superar lo que origina el problema.

Imaginemos por un momento a Chile, a Uruguay, a Brasil, a Grecia, a España… sin impuestos al consumo, al trabajo y a las pensiones. ¿Y entonces como se banca el presupuesto del Estado?, con un impuesto sobre la circulación del dinero, haciendo inválida cualquier transacción que no esté debidamente registrada donde la sociedad democráticamente lo determine.

Sí, pero ningún país lo puede hacer por separado, si y es ahí donde debemos organizar la toma del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional, para imponer un cambio sustancial en la economía del mundo.

Una sola forma universal de medir los hechos económicos, no a una moneda para los dueños de los medios de producción y otra para la gente. Que los recursos provenientes de un impuesto a la circulación del dinero sean administrados democráticamente sin engrosar las burocracias estales y administrados con criterios de rentabilidad social, y eficiencia.

¿Que resolver hacer esto debe ser lo más complicado?: de acuerdo. Pero hoy lo hace la burocracia instalada en el Banco Mundial y en el Fondo Monetario Internacional sin más aval que el de las capas gerenciales de los complejos empresariales multinacionales.

Entonces a analizar y poner en debate como organizar el aparato productivo de la humanidad para que sea más eficiente y democrático para la gente.

No estamos de acuerdo con los nacionalismos a los que se acude para dispersar la capacidad organizativa popular, esto en múltiples facetas, donde se reivindican religiones, monedas, costumbres. Si estamos de acuerdo con que se respeten las nacionalidades, que significan entre otras respetar las culturas que han incorporados sus conocimientos a la riqueza de la humanidad.

Hasta hoy las empresas estatizadas1, y las cooperativas han sido un medio de defender el trabajo de la gente cuando existían actividades que corrían el riesgo de dejarla sin trabajo. Las primeras convertidas en teoría que conocieron su mayor fracaso con la caída del llamado socialismo real, aún cumplen un ciclo histórico y de alguna manera continúan hasta hoy. Las segundas teniendo que convivir en una sociedad que siempre aspiraba a absorberlas para el sistema de empresas monopólicas.

Pensamos que una organización democrática del aparato económico de la humanidad no va a descartar particularmente a las cooperativas que son siempre un instrumento de educación del trabajo colectivo, y que entonces si encontrarán las estabilidades que hoy le son negadas.

¿Qué tiene que ver todo esto con lo concreto de Chile hoy? Salvador Allende en un histórico discurso en la ONU reivindicó para Chile la nacionalización del cobre. Era la época donde los pueblos aún podían pensar en los beneficios de una economía estatizada, frente a la expoliación de los monopolios empresariales multinacionales.

La derecha no soportó este camino y utilizó el sabotaje militar organizado por los «servicios» de EE.UU. para derrocarlo. Pero, paradoja, hoy el cobre estatizado es la fuente de recursos del presupuesto militar.

Hoy Chile necesita una constituyente donde se puedan organizar la atención a las necesidades popular, sabiendo en definitiva que el equilibrio solo se podrá lograr si el mundo encara un sistema impositivo basado en la circulación del dinero.

Y no para resolver Chile sino para atender la economía del mundo en plena crisis.

Escritas estas líneas llegan noticias entre otras del golpe contra Evo Morales en Bolivia y del pantano electoral en España, un amigo me escribe en Facebook afirmando que el único camino es la democracia a lo que respondo:

«No te confundas, la democracia no es un fin, es un medio. Para lograr los avances han sido necesarios los esfuerzos con ese fin. Cuando cosas tan simples como que la economía tenga una medida igual para todos y que los impuestos vayan sobre la circulación del dinero son tan resistidos y ninguneados por todos, es porque la crisis es muy profunda y la sociedad ha entrado en una etapa en que si no discutimos ideas de cómo salir no se va a salir.

Es muy fácil decir los que están en el gobierno son los responsables de todo, o la contrapartida: nadie lo puede hacer mejor que nosotros, pero ambas posturas son falsas. Necesitamos ideas, programa para superar una crisis que es irreversible pero que no es el fin del mundo si logramos que esas ideas avancen».

Jorge Aniceto Molinari.
Montevideo, 11 de Noviembre de 2019.


Nota:

1En la salud y la enseñanza, el rol del Estado ha ganado un papel que a pesar de la mercantilización de estos rubros ha sido bien importante.

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[:es]Propuestas económicas para la crisis. Entrevista a Jorge Aniceto Molinari. La Voz de Paysandú, 24‑9‑2019.[:]

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Propuestas económicas para la crisis. Entrevista a Jorge Aniceto Molinari. La Voz de Paysandú, 24‑9‑2019.

https://www.ivoox.com/propuestas-economicas-para-crisis-entrevista-a-jorge-audios-mp3_rf_42634107_1.html

Néstor Gerardo Vanzini entrevista a Jorge Aniceto Molinari, colaborador del Centro de Estudios Joan Bardina en Uruguay. Propuesta de un patrón o una medida monetaria única para todo el Mundo, una moneda telemática que ayude a resolver diferentes problemas económicos: Deuda de los estados y carencias presupuestarias, posible quiebra de los servicios sociales, paro, fraude fiscal, especulación de divisas, corrupción, falta de protección al medio ambiente, etc. Como el Presidente de Uruguay José Mujica planteó esta solución en la Asamblea General de la ONU, el martes, 24 de Septiembre del 2013.

Emisión radiofónica del martes, 24 de Septiembre de 2019. CW39, La Voz de Paysandú, Uruguay. Duración: 37 minutos y 11 segundos. Idioma: castellano.

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[:es]Hagamos volar la imaginación.[:]

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Hagamos volar la imaginación.

(Abordando eso gris, que parece la teoría).

Los jalones que conocemos en la historia tienen acontecimientos que marcan luego los tiempos. Por ejemplo la toma de la Bastilla en la revolución francesa, el asalto al Palacio de Invierno en la revolución rusa. Eclosión de procesos.

Nosotros en nuestra humildad vamos a intentar hacer volar la imaginación y nos planteamos, como un signo de estos tiempos, la toma de los organismos financieros internacionales, en particular el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional.

En este caso no se trata de la toma física sino en la toma ideológica de los mismos y lo que ello significa para la política económica que se desarrolla en el mundo.

Una primera dificultad, existe la creencia bastante arraigada de que la realidad se cambia Estado por Estado, y que el gobierno del mundo radica en los Estados. Y eso ya no es así, el gobierno del mundo, y lo que es fundamental el de su economía, no reconoce a las autoridades estaduales –que incluso selecciona (y para ello usan la democracia, la dictadura, los golpes de Estado, según los convenga) en función de sus intereses– sino a los estados mayores gerenciales de los complejos empresariales multinacionales que además están en pugna por la rentabilidad que se va agostando permanentemente en la medida que la expansión del modo de producción capitalista alcanza los límites planetarios.

Es en esta realidad en la que se han creado dos organismos encargados de regir las políticas necesarias a las corporaciones y a los propios Estados en línea con ellos, son el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional.

Entonces para la política que rige en los Estados surgen dos posiciones, una que nos plantea que debemos seguir al pie de la letra sus recomendaciones para entonces acceder al desarrollo económico (el llamado flujo de capitales) y otra la de que debemos romper con estas instituciones porque proponen una política de ajuste en las economías, que conduce al hambre y la desocupación de los pueblos. De más está decir que las dos posiciones sufren los avatares de la crisis actual.

No compartimos ninguna de las dos posiciones. Creemos que la voluntad política organizada en el mundo debe plantearse el tomar la dirección del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional, para aplicar un programa de transición que nos saque de esta crisis irreversible de la predominancia del modo de producción capitalista y la ayude a morir en paz.

Me imagino el escándalo y más bien el ignorar este planteo, (esto sucedió con el discurso del entonces Presidente Mujica en la ONU en setiembre del 2013, lamentablemente única oportunidad en que encaró el tema con la seriedad que requiere) de todas las corrientes políticas que han hecho parte de su transitar en el mundo el ocupar los cargos estatales, el dulce encanto de la burocracia. Lo que no quiere decir que no haya sido necesaria para determinada etapa de la historia humana que ahora está llegando a su fin.

Imagino a estos organismos o a otros similares en esta su función actual, determinar por ejemplo, la muerte de la multiplicidad de monedas, y así como existe, el kilo, el litro, el metro… que exista en la economía una medición única y universal, y con ello cerrando la etapa de las maniobras estaduales y de empresas dedicadas a ello, contra la gente con las mismas. Y luego establecer que los sistemas impositivos deban establecerse sobre la circulación del dinero, haciendo no válidas las transacciones que no estén registradas en los organismos que la sociedad determine, dando muerte a los paraísos fiscales y a los impuestos basados en el consumo, los salarios y las jubilaciones.

Cuantos «marxistas» nos dirán: pero esa no es la revolución que planteaban Marx, Engels y Lenin. Es el problema que podemos tener con los «marxistas» mal leídos, pero es hora que a los maestros –con una formidable obra que ha enriquecido a la humanidad–, se les valore por el verdadero valor de las mismas.

El capitalismo como modo de producción predominante ha preparado las condiciones para ser superado. Pero no va a ser sustituido por un modo de producción que lo confronte y lo derrote como fue lo que la concepción stalinista desarrolló en toda una etapa en que el desarrollo del capitalismo de Estado (no se trataba ni se trata de un modo de producción diferente) se presentaba como alternativa. No renegamos de esa etapa de la historia, entre otras cosas porque usufructuó la herencia de la revolución rusa y permitió con mucho sacrificio construir experiencias importantes para la humanidad como fueron por ejemplo la revolución china y la cubana que luego empezaron a reencaminar su andar hasta llegar a lo que sucede hoy en que el propio capitalismo se encamina a establecer a China y su entorno como un nuevo centro en la actual etapa de su desarrollo.

Cuánto costó y con qué sacrificio la gente agobiada por el hambre, empujó para que se tomara la Bastilla, otra cosa –también existía el hambre– fue la toma del Palacio de Invierno, en que un Partido organizado y con base ideológica iba dando los pasos para que el accionar popular se plasmara en lo que fue el primer gobierno bolchevique.

Esta época en muchos aspectos es diferente, la humanidad conoce un desarrollo del modo de producción capitalista que hace maravillas con la tecnología y llega a los confines de todo el planeta. Pero la tasa general de ganancias se agosta, y la rentabilidad comienza a buscarse en los peores incentivos contrarios al desarrollo humano, agravando además la llamada grieta social, que no es otra cosa que la propia crisis del sistema. A la vez aumentan, el déficit fiscal, los endeudamientos y el monto en los paraísos fiscales. Hay una capacidad productiva que va quedando a la vera del camino rápidamente y se vuelve rápidamente obsoleta y otra nueva rápidamente se incorpora. Desde el punto de vista humano –tal vez lo más grave, con tremendo peso en la consciencia colectiva– millones de seres que pasan por la vida en muy malas condiciones y sin tener de parte de la sociedad una respuesta que le permita realizarse como seres humanos.

Los stalinistas y neostalinistas no dan pie en bola, y es hora de recurrir al bagaje de conocimientos que la humanidad atesora en la obra de los maestros para poner en práctica no el de crear un régimen alternativo y de confrontación sino para desarrollar las herramientas que permitan la transición en paz, sin desconocer los riesgos que significa una agravación de la guerra que el negocio de esa industria está realizando.

Aspiramos a que el mundo tenga una respuesta antes de que la crisis tenga consecuencias aún más graves, pero no tenemos duda de que este camino, el que hemos venido desarrollando, es el que hay que recorrer, para iniciar una tarea gigantesca para el porvenir, para lo cual están todas las condiciones. Porque un mundo y una humanidad mejor es posible.

Jorge Aniceto Molinari.
Lavalleja, 6 de Septiembre de 2019.

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[:es]La importancia de explicar.[:]

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La importancia de explicar.

(Abordando eso gris, que parece la teoría).

El compañero Luis Turiansky hace sus análisis en la revista digital Vadenuevo que se caracteriza por la seriedad y documentación de sus enfoques y en lo personal eso nos sirve para tratar de explicar más a fondo nuestros puntos de vista.

Dice el compañero:

Cuando la agitación recorre el mundo.

10/07/2019.

Esperando a Godot.

A nadie escapa que el mundo está en un callejón sin salida. Mientras el descontento aumenta y no se encuentran soluciones ni alternativas, la agitación y las protestas se extienden. Esto se juega también en el marco del proceso electoral uruguayo, aunque no parezca.

Por Luis C. Turiansky.

Hace dos números, aludiendo a un tango famoso en el que se afirma que «al mundo le falta un tornillo», desarrollé la imagen de un mundo enfermo en espera de curación, sin la cual la catástrofe final se hace inexorable. Con el objeto de animar la discusión, tuve el atrevimiento de presentar una fórmula impositiva destinada a rescatar de las arcas de los grandes capitalistas tan solo una porción mínima de la plusvalía acumulada a partir del trabajo humano y los beneficios de la especulación (entendidos en su conjunto como «valor excedente»), con el fin de financiar los programas sociales, entre ellos la «renta universal».

Está claro que ni la renta universal resolverá todos los problemas de la crisis del capitalismo, ni los potenciales contribuyentes aceptarán de buen grado desprenderse de una parte de su fortuna, por más que se trate de una cantidad irrisoria en relación con lo que poseen. La idea está destinada, no obstante, a movilizar las mentes y entregar a todos los que hoy salen a las calles a protestar sin tener claro adónde ir, un objetivo comprensible y convincente. Porque actualmente es común que la protesta se limite a rechazar lo que hay, sin proponer cambios.

Hasta aquí el inicio de la nota.

La idea no es ajena a lo que se debate aquí en el Uruguay y coincide con un planteo similar del MPP, grupo que lidera José Mujica. Aún cuando en la ONU (setiembre 2013) el Pepe insinuó otra cosa.

En lo personal no nos oponemos a la idea, como no nos oponemos a que en determinas circunstancias para conservar lugares de trabajo se construyan cooperativas o se apele a estatizaciones coyunturales. Acordemos que esto es cada vez más difícil en la medida que el principio de rentabilidad que rige la lógica capitalista es cada vez más esquiva.

Lo que constata Turiansky es lo que de alguna manera todos los estudiosos de estos temas también llegan a una misma conclusión, que no es otra cosa que el agostamiento de la tasa general de ganancia, (como diría el Dr. Carlos Quijano: «siempre se vuelve a Marx»), y que tampoco es un índice de que en determinados nichos de la economía las tasas de ganancia sean aún exuberantes a costa particularmente de los vicios sociales, que va en detrimento del rendimiento de la propia tasa general.

Habría que explicar China y su entorno y el propio Trump, con la pregunta de para cuanto tienen en estas condiciones del mercado mundial.

Cuando decimos que está en juego la predominancia del modo de producción capitalista, precisamente lo que decimos es que el sistema es incapaz de dar una finalidad a los billones y billones de moneda fuerte que genera su actividad y eso a la larga es letal. Ver además el crecimiento de los paraísos fiscales y de las deudas de los Estados.

Los viejos marxistas fruto de la crisis del stalinismo quedaron encerrados en una lógica de Estado donde comunismo es propiedad estatizada y todo lo demás, posibles reformas para ir tirando hasta que esto se pueda realizar.

En este caso en que se analiza la posibilidad de un impuesto a las grandes fortunas para mitigar la pobreza creciente en una inmensa población del planeta, cuando aumenta la evasión y elusión fiscales a montos siderales parecería que debería empezarse por impedir estos fenómenos del campo tributario.

Esto incluye hoy un nuevo fenómeno digno de ser estudiado: China y su entorno, liderada por el Partido Comunista, comandando el libre comercio en el mundo y constituyéndose en un nuevo centro del capitalismo mundial, en tanto EE.UU. bajo el gobierno de Trump (de alguna manera hay que llamarlo) amurallándose, y no sin que surjan en distintos países sectores políticos importantes como el de Cristina Fernández en Argentina que propongan hacer lo mismo y sin que a nadie se lo ocurra debatirlo por el contrasentido que ello significa en el mundo actual.

La Humanidad ha concentrado suficiente inteligencia en millones de seres humanos preparados como para pretender y a planificar otra cosa. Y cuando además los recursos existen y no se movilizan por la sencilla razón de que al modo de producción predominante no le son rentables.

¿Existe un modo de cambiar esto?: Si y se puede hacer ya. Así como hoy el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial estudian cómo atender situaciones que como bien analiza Luis son cada vez más complejas y amenazan con nuevas y más profundas crisis, se podría revertir esa situación si estos organismos u otros que los mejoren, dispusieran de capitales para movilizar toda la economía mundial y poder recuperar a millones de seres humanos en la órbita del trabajo y del desarrollo de la sociedad.

Para eso son necesarias dos herramientas: la moneda y los impuestos. La primera en todas sus versiones posibles (cripto e inda mais) con un valor único y universal cumpliendo con las funciones para la que fue creada allá en los inicios de los tiempos, y el sistema impositivo basado en la circulación del dinero, dando muerte a los paraísos fiscales y por consiguiente con la predominancia del modo de producción capitalista, que no desaparece como tal pero se pone al servicio de un desarrollo armónico de toda la sociedad que este modo de producción ya no está en condiciones de comandar, porque ha llegado a sus límites posibles.

Qué lejos y sin embargo que cerca: algunos viejos comunistas confundidos, soñando con la sociedad estatizada y esto que es la posibilidad real poniendo en marcha a lo mejor de la Humanidad de construir la sociedad del pan y de las rosas.

La crisis está allí. Sus consecuencias pueden ser terribles. La salida más que nunca está al alcance de lo mejor de la humanidad. Los maestros en su momento lo advirtieron aunque la Humanidad no respetó sus aportes. Hoy necesita volver a ellos, incluso para superarlos, de ser posible.

Jorge Aniceto Molinari.
Montevideo, 16 de Julio de 2019.

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[:es]Cascabel al gato.[:ca]Picarol al gat.[:]

[:es]

Cascabel al gato.

(Abordando eso gris, que parece la teoría).

Dicen que los ratones reunidos en asamblea para preservar sus vidas resolvieron por unanimidad ponerle un cascabel al gato. El problema pasó a ser entonces quién le ponía el cascabel al gato. Algo de esto está pasando con el acuerdo generalizado de que hay que reformar la Seguridad Social. Todos coinciden y hemos escuchado los más variados argumentos.

Ahora el problema es crucial para abordarlo y para la crisis irreversible de la predominancia del modo de producción capitalista que estamos viviendo. Por lo tanto somos incansables en repetir una y mil veces nuestros argumentos hasta que se nos demuestre que estamos equivocados o no.

En Febrero del 2006 en plena crisis de la Caja Bancaria participamos sobre el tema en «Buscadores», un programa de la Televisión Nacional del Uruguay, que ahora pasa a VTV y esto era lo que decíamos.

En octubre del 2008, el gremio bancario defendiendo su Caja Bancaria, logró un importante acuerdo a nivel del gobierno que ha permitido en este sector un equilibrio actuarial sustentable y un ejemplo a analizar y tener en cuenta.

Por otra parte el crecimiento sostenido de la economía y los acuerdos salariales han permitido que los distintos sectores abarcados por la Seguridad Social hayan vivido un periodo de relativa tranquilidad y digo relativa porque no ignoro las consecuencias de la salidas a la Seguridad Social que originó la llamada ley de las afaps con sus consecuencias actuales.

Ahora hoy todos avizoran un panorama sombrío en la medida que la crisis económica directa, que vive esta zona del continente va a tener también consecuencias en el Uruguay, aún cuando haya un nuevo período de gobierno para el Frente Amplio; nuevo período para el cual todos en la oposición parecerían estar de acuerdo en que así ocurra en la medida que electoralmente aumenten su influencia para poder decidir en las medidas futuras de gobierno, sin por lo tanto estar implicados en la responsabilidad del mismo, cuando no tienen la menor idea de que hacer, y más aún con lo que le viene sucediendo a cambios muy festejados por ellos –a la oposición– en su momento, como los de Macri y Bolsonaro.

Esta Seguridad Social que hoy tenemos se corresponde a una etapa de desarrollo capitalista en el mundo occidental y cristiano que está llegando a su fin. Todos coinciden en que el problema son los recursos y por lo tanto o se achican las prestaciones o se incrementan estos. En el mundo capitalista actual esto es una disyuntiva de hierro, ecuación que podríamos definir como indestructible dentro de la predominancia de este modo de producción.

Podríamos resumir: para bajar las prestaciones se precisan gobiernos neoliberales lindantes con el fascismo, para aumentar los recursos se necesitan gobiernos «populistas» que pongan impuestos a los empresarios o asuman desde el Estado gestiones empresariales que por lo general están destinadas al fracaso.

¿Y entonces quién le pone el cascabel al gato?

Para nosotros humildemente se trata de comprender que la Humanidad está en otra etapa y que para abordarla en beneficio de la gente necesita reformas universales para las cuales hay que construir voluntad política.

Hoy están existiendo situaciones dramáticas donde las necesidades presupuestales hacen que gobiernos sensibles a los problemas de la gente tengan que decidir si determinados recursos van para atender una población cada vez más envejecida o a las nuevas generaciones, por ejemplo.

Es urgente el cambio de rumbo del Banco Mundial, y del Fondo Monetario Internacional, en lo regional entre otros del Banco Interamericano de Desarrollo y para ello es necesario que los cientos y miles de intelectuales que han estado involucrados en su gestión hagan el análisis retrospectivo de lo que ha sido su gestión y sus propuestas fallidas en el seno de la sociedad humana.

Esto puede sorprender, porque existe una «cultura» de izquierda que cataloga a estos organismos de una manera y para siempre: «son el estandarte de la derecha». No desarrollamos falsas expectativas, pero si sabemos que la crisis en su curso puede tener transformaciones en la manera de encarar los problemas que llegados a un determinado punto pueden eclosionar, más aún si somos capaces de hacer propuestas programáticas correctas y no un compendio de buenas intenciones que es en lo que se han convertidos los programas de las izquierdas. La crisis actual es irreversible para la predominancia del modo de producción capitalista, ¿o alguien puede demostrar lo contrario?

En el Uruguay por ejemplo tenemos a una personalidad excepcional como el Contador Enrique Iglesias, quién ha manifestado su preocupación por la incertidumbre que hoy afecta al desempeño político y económico de los Estados en el mundo. ¿No sería el momento de un llamado a esa reserva intelectual del mundo para encarar la crisis actual? No se trata entonces de un cascabel sino de abordar a nivel humano una salida que nosotros no tenemos la menor duda de que existe, y que vale la pena transitarla.

Jorge Aniceto Molinari.
Montevideo, 27 de Abril de 2019.

[:ca]

Picarol al gat.

(Abordant això gris, que sembla la teoria).

Diuen que els ratolins reunits en assemblea per a preservar les seves vides van resoldre per unanimitat posar-li un picarol al gat. El problema va passar a ser llavors qui li posava el picarol al gat. Una mica d’això està passant amb l’acord generalitzat que cal reformar la Seguretat Social. Tots coincideixen i hem escoltat els més variats arguments.

Ara el problema és crucial per a abordar-lo i per a la crisi irreversible de la predominança de la manera de producció capitalista que estem vivint. Per tant som incansables a repetir una i mil vegades els nostres arguments fins que se’ns demostri que estem equivocats o no.

Al febrer del 2006 en plena crisi de la Caixa Bancària participem sobre el tema en «Buscadores», un programa de la Televisió Nacional de l’Uruguai, que ara passa a VTV i això era el que dèiem.

A l’octubre del 2008, el gremi bancari defensant la seva Caixa Bancària, va aconseguir un important acord a nivell del govern que ha permès en aquest sector un equilibri actuarial sustentable i un exemple a analitzar i tenir en compte.

D’altra banda el creixement sostingut de l’economia i els acords salarials han permès que els diferents sectors abastats per la Seguretat Social hagin viscut un període de relativa tranquil·litat i dic relativa perquè no ignoro les conseqüències de la sortides a la Seguretat Social que va originar l’anomenada llei de les afaps amb les seves conseqüències actuals.

Ara avui tots sotgen un panorama ombrívol en la mesura que la crisi econòmica directa, que viu aquesta zona del continent tindrà també conseqüències a l’Uruguai, encara quan hi hagi un nou període de govern per al Front Ampli; nou període per al qual tots en l’oposició semblarien estar d’acord que així succeixi en la mesura que electoralment augmentin la seva influència per a poder decidir en les mesures futures de govern, sense per tant estar implicats en la responsabilitat d’aquest, quan no tenen la menor idea que fer, i més encara amb el que li ve succeint a canvis molt festejats per ells –a l’oposició– en el seu moment, com els de Macri i Bolsonaro.

Aquesta Seguretat Social que avui tenim es correspon a una etapa de desenvolupament capitalista en el món occidental i cristià que està arribant a la seva fi. Tots coincideixen que el problema són els recursos i per tant o s’acovardeixen les prestacions o s’incrementen aquests. En el món capitalista actual això és una disjuntiva de ferro, equació que podríem definir com a indestructible dins de la predominança d’aquesta manera de producció.

Podríem resumir: per a baixar les prestacions es requereixen governs neoliberals confrontants amb el feixisme, per a augmentar els recursos es necessiten governs «populistes» que posin impostos als empresaris o assumeixin des de l’Estat gestions empresarials que en general estan destinades al fracàs.

I llavors qui li posa el picarol al gat?

Per a nosaltres humilment es tracta de comprendre que la Humanitat està en una altra etapa i que per a abordar-la en benefici de la gent necessita reformes universals per a les quals cal construir voluntat política.

Avui estan existint situacions dramàtiques on les necessitats pressupostàries fan que governs sensibles als problemes de la gent hagin de decidir si determinats recursos van per a atendre una població cada vegada més envellida o a les noves generacions, per exemple.

És urgent el canvi de rumb del Banc Mundial, i del Fons Monetari Internacional, en el pla regional entre altres del Banc Interamericà de Desenvolupament i per a això és necessari que els centenars i milers d’intel·lectuals que han estat involucrats en la seva gestió facin l’anàlisi retrospectiva del que ha estat la seva gestió i les seves propostes fallides en el si de la societat humana.

Això pot sorprendre, perquè existeix una «cultura» d’esquerra que cataloga a aquests organismes d’una manera i per sempre: «són l’estendard de la dreta». No desenvolupem falses expectatives, però si sabem que la crisi en el seu curs pot tenir transformacions en la manera d’encarar els problemes que arribats a un determinat punt poden fer eclosió, més encara si som capaços de fer propostes programàtiques correctes i no un compendi de bones intencions que és en el que s’han convertit els programes de les esquerres. La crisi actual és irreversible per a la predominança de la manera de producció capitalista, o algú pot demostrar el contrari?

A l’Uruguai per exemple tenim a una personalitat excepcional com el Comptador Enrique Iglesias, qui ha manifestat la seva preocupació per la incertesa que avui afecta a l’acompliment polític i econòmic dels Estats en el món. No seria el moment d’una cridaanomenat a aquesta reserva intel·lectual del món per a encarar la crisi actual? No es tracta llavors d’un picarol sinó d’abordar a nivell humà una sortida que nosaltres no tenim cap mena de dubte que existeix, i que val la pena transitar-la.

Jorge Aniceto Molinari.
Montevideo, 27 d’abril de 2019.

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